La subida de precio de la PS5 de SONY nos ha cogido a todos por sorpresa, especialmente a los que solemos seguir la evolución de los precios en el mundo del hardware a diario. Lo habitual es que el coste de los componentes de una consola se vaya abaratando con el tiempo a través de una serie de revisiones y nuevas versiones del sistema. Sin embargo, con la actual PlayStation 5 ha ocurrido algo que nadie se esperaba y que no tiene precedente en la historia de las consolas de videojuegos.
Una de las mentiras más repetidas por la propaganda de las marcas de consolas es que el hardware se vende a perdidas. Esto es falso desde el momento en que si esto fuese así, entonces el fabricante debería abonar dinero sobre toda la cadena de distribución y de producción, impuestos incluidos. Más bien la respuesta es, las consolas se venden a cero ganancia o ganancias mínimas para el fabricante con el objetivo de recuperar el dinero con la venta de juegos, periféricos y servicios relacionados con el sistema. En medio de todo esto ha aparecido el mito de que la subida de precio de PS5 se debe al aumento de costes.
Lo que nadie cuenta sobre la subida de precio de PS5
El gran error que se suele cometer es el hecho de relacionar el precio de un producto con su coste de producción, de tal manera que muchos caen en la trampa de pensar que si un producto reduce sus costes se hará más barato. Multitud de veces hemos relanzamientos que son un recorte de gastos para el fabricante en forma de rediseño sin una bajada de precio asociada. Claro está que no es el caso de SONY con PS5 y aquí tenemos que lanzar un cubo de agua fría que posiblemente no les gustará a muchos de nuestros lectores y con ello no pretendemos exonerar a SONY de su pésima decisión por la subida de precios de PS5.
Desde el lanzamiento de la consola hemos visto como muchos se han aprovechado de la falta de stock para vender la consola muy por encima del precio recomendado. Muchos usuarios de PS5 no han pagado 500 € por la consola, sino mucho más. Lo cual supone enviarle la señal a SONY de que puede aumentar el precio de su consola, ya que hay gente dispuesta a pagar más de su precio para disfrutarla.
¿La única forma en que esto se vea como un error? No solo que se vendan menos consolas, sino que las ganancias de SONY bajen con ello lo suficiente como para que se planteen bajar el precio. Y veremos si con el tiempo y pese a las críticas en internet, si PS5 con su enorme popularidad se ve afectada por ello.
El hardware en PC es un océano rojo
En PC tenemos un ecosistema donde tenemos varias opciones que compiten entre sí para llamar la atención por parte de los consumidores. Muchas de ellas tienen una percepción en el valor casi igual y lo que hace que nos interesemos por uno u otro producto si son iguales según el precio que tengan. Es por ello que las tarjetas gráficas están bajando de precio, por el hecho que en una lucha de este tipo no se ha de ver como una pérdida de dinero, sino como una oportunidad de superar a tus rivales o más bien de vender tus productos.
Además, hemos de tener en cuenta que la vida comercial de un producto para PC es mucho más corta que el de una consola. En el sentido de que un producto con mejores especificaciones está a la vuelta de la esquina y lo importante para los fabricantes no solo es vender, sino limpiar sus existencias lo más rápido posible. Una vez que existe un producto técnicamente superior al mismo precio, se hace difícil venderlo al precio original e incluso puede ser rechazado por buena parte de tu público potencial, ya que obtiene menos por más.
Así pues, con la futura generación de tarjetas gráficas de NVIDIA y AMD ya en producción en las fábricas y los SSD con soporte PCIe Gen 5 a la vuelta de la esquina, Es normal que los fabricantes bajen los precios. Al fin y al cabo es lo único que pueden hacer si no quieren quedarse con el inventario cogiendo polvo en sus almacenes.
En cambió PS5 es un océano, ¿azul?
Muchos os estaréis preguntando qué significa esto de los océanos y colores, pues viene de un libro sobre estrategia empresarial llamado «La estrategia del océano azul» donde se explica un concepto llamado innovación en el valor. Este consiste en que si puedes hacer que tu producto se diferencie lo suficiente de la competencia hasta el punto en el que se vea como uno distinto, entonces eliminas la competencia y con ello la guerra de precios.
Desde la perspectiva de SONY no es que Xbox no exista, sino que entienden que la gente busca un producto único llamado PS5, con una especificaciones concretas y que no ofrece la competencia. Es decir, nadie más puede hacer PS5 y, por tanto, su fabricante entiende que están fuera de una guerra directa de precios.
En cambio, los fabricantes de componentes para PC no se pueden permitir el lujo de mantener los precios de manera independiente a la competencia por el hecho de que no ofrecen un producto diferenciado. Claro está que esto es una percepción del consumidor. Desde PlayStation están poniendo a prueba el mercado. Lo que quieren hacer es comprobar si los potenciales nuevos clientes de la consola están dispuestos a pagar por ello. Por lo que tienen que tener mucha confianza para jugar con fuego de esta manera.