A veces son las cosas más pequeñas las que fallan e incluso un pequeño engranaje de la caja de cambios puede hacer que un coche no funcione. La escasez de chips no es un tema nuevo, pero ahora todos los fabricantes de portátiles se ven amenazados por nuevos problemas desde un rincón bastante inesperado: Intel no solo había lanzado sus nuevas CPUs para portátil Tiger Lake, sino que también introdujeron Thunderbolt 4 (TBT4) y USB 4 en los dispositivos correspondientes; solo el soporte para CPU es una cosa, pero la implementación técnica es otra muy distinta.
Estamos hablando de los denominados controladores USB Type-C y de suministro de energía (PD) con interruptores de alimentación de fuente integrados. Los representantes típicos de estos chips son Texas Instruments (por ejemplo con su controlador dual TPS65994AD) y Cypress. Estos controladores monitorizan las conexiones, detectan si se está utilizando un puerto y con qué conexión, administran la fuente de energía para los dispositivos conectados y habilitan la comunicación entre ellos.
No hay chips Thunderbolt 4 ni USB 4
Para comprender mejor de qué se trata el problema, vamos a simplificarlo todo al máximo. En el dispositivo, el proceso se ejecuta de modo que después de enchufar un dispositivo externo a un puerto USB o Thunderbolt, se realiza una detección del cable de acuerdo con la especificación USB-C. Además, la controladora se comunica con el dispositivo externo en el canal CC a través del llamado protocolo USB-PD.
Cuando la detección del cable y la negociación PD USB se completan con éxito, la controladora PD activa la ruta de alimentación adecuada y configura los llamados ajustes de modo alternativo (USB 4, DisplayPort vídeo o Thunderbolt) para multiplexores externos. Es bien sabido que USB 4 y también Thunderbolt 4 requieren mayores demandas de comunicación y alcance de la fuente de alimentación.
Ahora han llegado nuevas informaciones de varias fuentes (OEM / ODM de portátiles, mayoristas, etc.) que indican que hay una gran escasez de suministro que incluye congelaciones completas del mismo. Texas Instruments incluso llegó a ofrecer anticipos para hacerse con estos chips ya que sus propias tiendas están imposibilitadas en estos momentos, y llevan días sin ofrecer estos chips sin importar cuán grande sea la solicitud de compra. También podemos ver una captura de pantalla con los descabellados precios de los componentes actuales:
Sin entrar en más detalles técnicos llegados a este punto, debéis saber que el mayor de los problemas es que es imposible reemplazar estas controladoras con otras de anterior generación si se quiere mantener la funcionalidad, o dicho de otra manera, no podrás implementar una interfaz USB 4 sin una controladora USB 4 específicamente diseñada para ello. De hecho, los OEM han llegado al punto de que recomiendan omitir USB 4 en sus plataformas, o al menos solo mencionar sus productos como «compatibles» con esta interfaz siempre que los controladores no estén disponibles.
Resumiendo todo esto, la escasez de chips ha comenzado a afectar también a Intel, quien hasta ahora parecía haberse librado gracias a que cuenta con fábricas propias. Sin embargo, al final también han sido afectados y no en los chips para procesadores sino en las controladoras USB / Thunderbolt para su nueva generación, con la que presumían de integrar conectividad de última generación pero parece ser que, por ahora, no va a poder ser.
Ahora queda ver cómo reacciona Intel a este problema; pudiera ser que retrasaran el lanzamiento de la nueva plataforma a la espera de que este problema se solucione, o que decidan dar marcha atrás y volver a las versiones anteriores.