Es posible que a algunos de nuestros lectores les haya ocurrido, de repente veis como uno de los componentes o periféricos empieza a funcionar de manera errática y veis como los drivers no se encuentran por ningún lado, ni tan siquiera en internet. Pues bien, para los usuarios de sistemas con cierta antigüedad es un problema común y no precisamente pequeño.
Si en algo ha avanzado la informática en las últimas décadas es en comodidad, lejos quedan esos enfrentamientos diarios en los que al PC un día le dolía una cosa u otra como si fuese un anciano quejoso. Todo ello por la excelente gestión de los controladores del hardware y la estandarización de estos. Sin embargo, de la red de redes no solamente desaparecen páginas comprometidas, sino también y aunque no os lo creáis drivers de hardware.
El problema de los drivers que se esfuman
Uno de los problemas que tiene Windows 10 es su repositorio de drivers, si nuestro sistema es demasiado antiguo, entonces nos encontraremos con que de repente veremos como el sistema operativo no tendrá el controlador en el repositorio de drivers. ¿El motivo? El fabricante ha terminado el soporte técnico y si nos encontramos en la tesitura de tener que reinstalarlo todo nos podemos encontrar, como de repente, una serie de controladores que antes teníamos asegurados, ya no lo estén.
¿Y qué consecuencias tiene esto? Pues varias, nos podemos encontrar que cosas como la tarjeta de sonido en la placa base, la conexión inalámbrica o hasta cosas como el pequeño sensor de temperatura dejen de funcionar. Y todo por el hecho que un buen día el fabricante de nuestro portátil ha borrado, vete a saber el motivo, ciertos drivers del repositorio. Un ejemplo es lo que le ha pasado a un servidor con su ya veterano portátil, donde tras una reinstalación del sistema operativo a este les es imposible encontrar ciertos drivers en el repositorio.
Es decir, de repente me encuentro con que aparecen una serie de dispositivos sin controlador, Windows no los encuentra y no están listados en la página web del fabricante. Sin embargo, una investigación me dice que son drivers esenciales de la placa base. ¿Por qué antes Windows no los echaba en falta y ahora sí? Por el hecho que los tenía a mano. No olvidemos que cada dispositivo tiene un código de identificación que permite usar los drivers correctos.
Dejad que otros se encarguen del trabajo sucio
El otro gran problema que tenemos es el hecho que como los fabricantes se lavan las manos en lo que en el tema de drivers se refiere, dejan que otros sean los encargados de crear repositorios de drivers antiguos. ¿El problema? Tan pronto como no pueden pagar el servidor se pierden para siempre. Y el problema además se agrava en una época en la que muchos dispositivos se venden sin los controladores de serie. ¿La respuesta? Te los puedes bajar de internet, pero tan pronto como estos desaparezcan de la red de redes podemos decirles definitivamente adiós.
Lo curioso es que antes se solían incluir en la caja del producto, pero con la desaparición de los lectores ópticos en los ordenadores han terminado en desuso. Lo normal sería incluir una pequeña tarjeta MicroSD o un Pendrive de poca capacidad en la que el fabricante incluyese una colección de drivers de sus productos. No solo de ese en concreto, si bien no estarían actualizados ya sería algo. Por otro lado, os recomendamos nosotros hacer copias de seguridad de estos por si las moscas, nunca sabéis qué puede pasar al volver a instalar el sistema operativo.