La disputa entre Apple e Intel está lejos de quedar atrás. Las espadas están en todo lo alto y aunque el acuerdo parece haber terminado, los de Cupertino parecen buscar una justificación persistente ante cualquier movimiento de la compañía. Al parecer, Apple presentará sus nuevos chips personalizados ARM en el WWDC de finales de este mes y evidentemente, ya está calentando el ambiente y al parecer, buscando excusas para justificar el dejar a Intel en el camino.
Será el 22 de este mes cuando el programa de creación de sus nuevos chips denominados Kalamata vea la luz y conozcamos todas las mejoras de la compañía. Los desarrolladores tendrán por lo tanto algo menos de un año para optimizar sus softwares a la nueva arquitectura ARM con la que los de Cupertino piensan sustituir los procesadores X86 de Intel, ¿un posible error?
Tres procesadores, tres SoCs diferentes de próxima generación
Como era de esperar y dadas las fechas de lanzamiento, Apple trabaja muy duro de la mano de TSMC para llegar a tiempo con sus nuevos SoC a 5 nm de la compañía taiwanesa. Aparte de los nuevos diseños big.LITTLE que se están filtrando con cuentagotas, Apple tendrá a su disposición un nuevo procesador de gráficos, un motor neuronal y diversos chips específicos de seguridad.
El procesador tope de gama llegará con una versión basada en 8 núcleos de alto rendimiento con nombre en clave FireStorm, mientras que incluirá al mismo tiempo otros 4 núcleos basados en Cortex de bajo consumo y denominados como IceStorm. Por lo tanto y como ya informamos en su momento, la baza de Apple es desarrollar SoC con más núcleos, más eficientes y más rápidos, siendo los primeros en 36 años de historia que serán exclusivos de la compañía sin depender de terceros.
El problema es que al igual que pasó a principios de año, las voces críticas del sector afirman que es un gran error dejar a Intel de lado, porque los de Santa Clara no son IBM y están reaccionando al mercado.
Apple acusa a Intel y justifica su huida hacia delante
Un gigante como Apple no toma decisiones al azar ni por motivos variopintos. El dejar a Intel ha sido sin duda una decisión pensada y consensuada, basada en las posibilidades de TSMC y de sus ingenieros para crear chips que puedan competir con AMD e Intel.
El problema es que, a diferencia del sector de los smartphones, Intel no es Qualcomm y visto el rendimiento de Tiger Lake y de todo lo que viene por parte de los azules, las voces críticas se están alzando contra la compañía desde la sombra. Según parece, voces autorizadas de Apple y familiarizadas con la compañía aseguran que la mejora anual de rendimiento de los chips Intel se desaceleró y el departamento de I+D dirigido por Johny Srouji decidió hacer un cambio drástico hacia el auto consumo.
Apple por lo tanto culpa a Intel de que su roadmap podía poner en peligro, retrasar o dificultar algunos modelos futuros de Mac y aquí es donde todo comienza a oler realmente mal. Según las fuentes, los primeros diseños ES de los nuevos SoC de Apple muestran un rendimiento muy mejorado frente a las versiones de chips de Intel, especialmente en GPU, donde además aseguran ser mucho más eficientes.
El problema es que actualmente no hay SoC móvil que se pueda acercar al desempeño de un procesador de AMD o Intel aun con 3 veces menos núcleos, solo hay que mirar suites como Geekbench para ver las diferencias palpables.
Software específico para ARM, ¿rendimiento muy inferior al de Intel?
Los rumores afirman que estas estimaciones de Apple son bajo software específico para ARM y no bajo X86, lo que parece un intencionado movimiento de marketing, algo que de poco les va a valer para los usuarios que usen bootcamp/parallels por ejemplo, donde el rendimiento va a caer en picado.
Los profesionales que busquen editar vídeo profesional bajo un sistema MacOS pueden sufrir el paso de X86 a ARM por la ausencia de instrucciones SIMD y en definitiva, cualquier usuario que tenga que emular sufrirá durante algún tiempo hasta que todo esté realmente portado e integrado para ARM. Lo que parece claro es que Apple ha corrido demasiado, Intel a puesto el pie en el acelerador, Tiger Lake será el primer peldaño del camino y los de Cupertino puede que tengan que justificar su rendimiento en ciertos entornos durante bastantes años.
¿Están sus usuarios dispuestos a pagar un buen dinero por la integración de un SoC a todas las luces móvil de bajo consumo y potencia parcialmente limitada? Bueno, veremos hasta dónde llega esto en menos de 15 días tras conocer más detalles de primera mano.