Los ordenadores para jugar son los que tienen el hardware más potente y, por tanto, los que consumen más batería son los portátiles gaming. Es por ello que hemos pensado que daros unos consejos con los que podéis hacer que vuestros ordenadores no solo duran mucho más tiempo conectados sin depender de la fuente de alimentación, sino para ahorrar en consumo y darle una vida mucho más larga a la batería del portátil. Todo ello a través de consejos muy sencillos que no te costará nada aplicar.
Los portátiles gaming se han convertido en uno de los tipos de ordenador más vendidos de todos, no llegan a la potencia de sus equivalentes de sobremesa, pero lo compensan ocupando un menor espacio y sin líos de cables. Sin embargo, en comparación con un portátil normal, estos consumen mucho más, lo que afecta a la batería del portátil gaming y a largo plazo a la vida útil de nuestro PC. No olvidemos que hay modelos que son excesivamente difíciles de desmontar para hacerles mantenimiento y por ello es importante evitar los picos de consumo que se traducen también en picos de calor.
¿Cómo ganar más horas de batería en un portátil gaming?
A día de hoy todos los portátiles gaming vienen con dos tarjetas gráficas, una de bajo rendimiento integrada en el procesador central y otra de alto rendimiento con su propia memoria que se encuentra en un chip aparte. Pues bien, por ejemplo, desde el Panel de Control de NVIDIA, si usáis un modelo de dicha marca, entonces podéis asignar si una aplicación se ejecuta usando la gráfica integrada o la dedicada. No olvidéis que en el 99% de los portátiles gaming la salida de vídeo es controlada por la integrada en el procesador.
¿Por qué decimos esto? Pues por el hecho que si no estáis ejecutando un juego y os encontráis haciendo un informe con una aplicación clásica de Windows, entonces no tiene sentido que la gráfica dedicada se encuentre encendida, aunque sea al mínimo de su potencia. Dejad que está solo se active cuando es necesario y, por tanto, se necesita su potencia, como es el caso de juegos y ciertas aplicaciones de creación de contenido.
Es más, nuestra recomendación es dejar a los gráficos integrados como configuración global y luego le asigno la dedicada de NVIDIA a cada juego desde el panel de control de la misma marca. Así, de esta manera consigo ahorrar batería por el hecho que la tarjeta gráfica gaming hace acto de presencia cuando es realmente necesaria.
Cuidado con los programas de inicio y en segundo plano
Esto os parecerá contraproducente, pero no tiene sentido tener abiertos los clientes de Steam, Epic Games, Battle.Net y otros si no vamos a jugar a sus juegos. Son literalmente una sanguijuela de recursos y nuestra recomendación es que los deshabilitéis del inicio. Vuestro ordenador no solo arrancará mucho más rápido, sino que tendréis menos procesos a ejecutar. De la misma manera, también os recomendamos cerrarlos si no los estáis usando.
Sabemos que vuestro portátil gaming es muy potente y puede con todo, pero gastar más potencia y consumo afecta negativamente a la batería de un portátil gaming. Por no hablar de que una subida en la temperatura significan automáticamente medidas drásticas, las cuales suponen bajadas en la velocidad de reloj y con ello recortes de rendimiento.