El fabricante de placas base para servidores, Supermicro, ha querido hoy salir al paso de la controversia despertada ayer por un artículo de Bloomberg, en el que se afirmaba que el gobierno chino había implantado chips espía en varios de sus modelos de placas base para servidores, negando estas acusaciones. Y no ha sido la única compañía que lo ha negado.
Supermicro es, probablemente, el fabricante de placas base para servidores más conocido del mundo desde hace muchos años. Aunque la empresa no solo se dedica a fabricar placas base para este mercado, sino que más recientemente se ha diversificado, sacando otros modelos para otros tipos de mercados. Sin embargo, la publicación en el día de ayer de un artículo de la revista Bloomberg, donde se afirmaba que se habían encontrado chips espía en el PCB de varias placas base para servidores, que habrían sido fabricadas en China, ha levantado un huracán para la empresa. No en vano, tras la publicación del artículo, las acciones de la empresa se desplomaron un 41%.
Sin embargo, la empresa ha querido salir al quite de las acusaciones que se vertían en el artículo, comentando que no es verdad que las placas base de los servidores que vendieron a ciertos clientes tenían un chip espía que era propiedad del gobierno chino, que podría haberse empleado para realizar espionaje en ciertas empresas y, llegado el caso, tomar el mando de estas máquinas de manera remota.
Supermicro no ha sido la única empresa en negar las acusaciones del artículo
En el artículo de Bloomberg, dos de las empresas mencionadas que habían sido afectadas por el hackeo de sus servidores con el chip chino eran Amazon y Apple. Y ambas empresas han sacado también sendos comunicados cada una, negando las acusaciones del artículo de Bloomberg sobre el hackeo de sus servidores, afirmando que lo único a lo que pueden referirse es a un incidente sucedido durante el pasado año 2016, por el que se encontró un driver de una placa base de Supermicro infectado de software espía, según palabras de un representante de Apple. Por su parte, Amazon ha afirmado que durante varios meses ha confirmado con Bloomberg que ellos no han podido verificar ninguna de las afirmaciones del artículo, y que ellos no han tenido ningún problema con sus servidores.
Sin embargo, Supermicro nunca ha sido contactada por ninguna agencia de seguridad de ningún gobierno para verificar la seguridad de los productos que vende. De hecho, la empresa tiene controles de calidad muy exhaustivos para sus productos, en los cuales se revisan las instalaciones y el material que se produce en ellas con cierta asiduidad.