Ya es una realidad, el controlador NVMe para PCIe 4.0 está empezando a ser producido, por lo que cada vez está más cerca de nuestros ordenadores de alto rendimiento. Los SSD que funcionen sobre el estándar PCIe con este controlador serán capaces de transmitir 8 GB por segundo y más de dos millones de IOPS, una cifra que se queda atrás si nos fijamos en el controlador de Liquid con 25 GB/s.
Llega el primer controlador NVMe desarrollado para las placas base con puerto PCIe 4.0
Mientras que el precio de los SSD SATA no consigue equipararse al de los HDD y sigue siendo muy elevado para grandes capacidades, la tecnología no deja de avanzar y estamos a punto de tener en nuestros ordenadores SSD que funcionan a 8 GB/s. Además, si comparamos equipos, tenemos dispositivos PCIe como el SSD Samsung 970 EVO a precios bastante razonables que hacen que ganen a ojos del consumidor a los SATA.
Microsemi es la empresa que ha empezado la producción de estos controladores NVMe 3016 Gen 4, convirtiéndose en la primera empresa en hacerlo. Este controlador está destinado a los SSD que necesiten garantizar fiabilidad y soporte para RAID y ECC junto al alto rendimiento de las tecnologías de almacenamiento NAND TLC y NAND QLC. Ambos tipos de memoria son los cada vez más utilizados debido a su bajo coste, que se paga con una menor durabilidad.
Liquid aumenta la velocidad del PCIe 4.0 y lo lleva a 25 GB/s
Los SSD que trabajen sobre PCIe 4.0 x16 podrán acceder a una velocidad de hasta 25 GB/s y resolver más de 3,5 millones de IOPS de 4 KB. Una velocidad más de tres veces mayor que la conseguida por Microsemi y que permite la conexión de hasta 8 SSD M.2, con una capacidad total de 32 TB.
No cabe duda de que son especificaciones de alto rango que benefician en gran medida a las empresas, pero esto asegura que el año que viene estaremos frente a una nueva generación de SSD con velocidades cada vez mayores. No obstante, para ello necesitamos que las empresas empiecen a actualizar el puerto PCIe de sus placas base a la Gen 4.0. El ciclo típico de la producción de nuevos productos es que estos lleguen antes a las empresas, para después entrar en el mercado de consumo, por lo que puede que aunque lleguen el año que viene no lo hagan hasta mediados de 2019.