Aunque ya están establecidos en el mercado los SSD PCIe 5.0, estas unidades aún son muy escasas, las placas base compatibles aún están contadas, y además son extremadamente caros. En cambio, los SSD PCIe 4.0 llevan ya unos años entre nosotros, prácticamente cualquier placa base moderna los soporta, han mejorado mucho en temperatura y durabilidad, son capaces de ofrecernos velocidades muy altas y, al mismo tiempo, cada vez son más baratos. Por ello, hoy os traemos el análisis de uno de los últimos modelos que acaba de llegar al mercado: el KIOXIA EXCERIA PLUS G3.
Los SSD PCIe 4 han evolucionado mucho desde sus primeros modelos lanzados en 2019. A parte de ser ahora mucho más baratos, incluso en sus modalidades de 2 TB, también se ha optimizado mucho la eficiencia de energía, lo que ha permitido prescindir de los grandes disipadores que acompañaban a estas unidades.
Hoy os vamos a enseñar cómo rinde este nuevo SSD NVMe de KIOXIA pensado, sobre todo, para jugadores y editores de vídeo.
KIOXIA EXCERIA PLUS G3: especificaciones técnicas
KIOXIA Exceria Plus G3 | |
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Factor de forma | M.2 2280 |
Interfaz | PCIe 4.0 x4 NVMe 1.4 |
DRAM | No |
Capacidades | 1 y 2 TB |
Controladora | Phison PS5021 |
Tipo de NAND | BiCS FLASH TLC |
Soporte | S.M.A.R.T. TRIM NCQ DevSleep Garbage Collection Algoritmo ECC LDPC |
Cifrado | N/A |
Lectura secuencial | Hasta 5.000 MB/s |
Escritura secuencial | Hasta 3.900 MB/s |
Lectura aleatoria | 1 TB: 770K IOPS 2 TB: 680K IOPS |
Escritura aleatoria | 950K IOPS |
Durabilidad | 1 TB: 600 TBW 2 TB: 1.200 TBW |
Consumo | 1 TB: 4,9W 2 TB: 5,3W |
Temperatura de funcionamiento | 0 - 85 ºC |
Dimensiones | 80,15 x 22,15 x 2,63 mm |
Peso | 7,4 gramos |
Garantía | 5 años |
KIOXIA ha fabricado este SSD utilizando memorias BiCS FLASH TLC, un tipo de memorias 3D patentadas de muy alto rendimiento apilada verticalmente que permite no solo aumentar la densidad, sino también reducir el tamaño de los chips. Estas memorias utilizan la tecnología NVMe 1.4, que, junto al estándar PCIe Gen4 x4 nos va a brindar unas velocidades de lectura y escritura muy elevadas.
Esta unidad podemos encontrarla tanto en 1 TB de capacidad como en 2 TB de capacidad (nosotros vamos a analizar la unidad de 2 TB). Este SSD nos ofrece una velocidad máxima de lectura de 5.000 MB/s y 680.000 IOPS, y de escritura de 3.900 MB/s y 950.000 IOPS. Además, nos brinda una durabilidad garantizada TBW de 1.200 terabytes y una esperanza de vida de 1.5 millones de horas.
Un dato curioso de este SSD es que se ha establecido su rango de temperaturas de funcionamiento que se sale del estándar. Lo normal en un SSD es que su rango de temperatura en funcionamiento vaya desde los 0ºC hasta los 70ºC, pero en este caso KIOXIA ha dispuesto que puede funcionar a plenas facultades (entendemos que sin Thermal Throttling) hasta los 85ºC.
El SSD tiene el formato estándar M.2 2280, con unas dimensiones de 80.15 x 22.15 x 2.63 mm y un peso de 7.4 gramos. Por ello, es ideal para cualquier PC, portátil e incluso para las consolas PS5.
Unboxing y análisis externo
El KIOXIA EXCERIA PLUS G3 viene en una caja de cartón blando, con los colores negro y azul predominantes. En la parte superior de la caja podemos ver una foto de la unidad así como su velocidad y otras especificaciones técnicas. En la parte trasera encontramos información más detallada sobre el producto.
Abrimos la caja y nos encontramos la unidad SSD perfectamente envuelta en un plástico, dentro de un blíster de cartón.
Dentro del blíster encontramos el típico folleto de inicio rápido, además de otro folleto con información de seguridad.
Sacamos el SSD y ya tenemos el primer contacto con él. A simple vista no vemos mucho porque tiene la típica pegatina encima del controlador y los chips que suelen incluir los fabricantes para mostrar la marca y el modelo de la unidad. Como vemos se trata del EXCERIA PLUS G3, y pertenece a la serie “personal”, para uso doméstico.
En la parte inferior del PCB nos encontramos con que no hay absolutamente nada, tan solo una pegatina donde nos viene la marca, el modelo, el número de serie y la capacidad.
Justo en el extremo tenemos el conector M.2 con un diseño estándar, sin nada que destacar especialmente.
Debajo de la etiqueta nos encontramos el controlador PHISON PS5021 (muy conocido y que ofrece un excelente funcionamiento) que monta esta unidad, así como sus chips de memoria.
Ya hemos visto cómo es, y ahora vamos a ver cómo funciona.
Probando el rendimiento del KIOXIA EXCERIA PLUS G3
El montaje de este SSD no esconde ningún misterio, basta con colocarlo en una ranura M.2 de la placa base, y anclarlo con el tornillo o con el anclaje que tenga nuestra placa. Nuestra recomendación es colocar encima un disipador (aunque sea el de la propia placa base) para tener a raya la temperatura a pleno rendimiento, aunque no debería suponer ningún problema.
El banco de pruebas que hemos utilizado para poner a prueba esta unidad es el siguiente:
- Procesador AMD Ryzen 9 7950X3D
- Memoria RAM DDR5 CORSAIR Vengeance RGB 32 GB a 6.000 MHz
- Placa base AORUS X670 ELITE AX
- Tarjeta gráfica AMD Radeon RX 7900 XT
- Windows 11 23H2
Windows lo reconoce sin problemas y sin necesidad de instalar nada. Eso sí, de fábrica viene sin formato o letra de unidad asignada, así que como es habitual lo primero que tendremos que hacer antes de poder utilizarlo es inicializarlo desde el propio administrador de discos de Windows.
Una vez inicializado y creada una partición en NTFS, vamos a ver su rendimiento. Lo primero que haremos será utilizar el programa CrystalDiskInfo para poder conocer al detalle las especificaciones técnicas de la unidad.
En el siguiente paso, lo que haremos será utilizar el programa CrystalDisk Mark para medir la velocidad de lectura y escritura del disco duro. Como podemos ver, para ser una unidad PCIe 4.0, los datos obtenidos son sobresalientes, consiguiendo las velocidades (incluso algo por encima) que nos prometía el fabricante.
El siguiente programa que vamos a usar para medir el rendimiento de la unidad es AS SSD Benchmark. Este software analiza varios puntos del funcionamiento de la unidad y nos devuelve una puntuación, perfecta para comparar.
En esta prueba nos damos cuenta de que los valores son algo inferiores (suele ser normal, ya que este programa utiliza unos algoritmos diferentes al anterior), pero aun así son unos datos excelentes, tal como era de esperar. Además, también tiene unos tests específicos que nos permiten medir las velocidades al copiar archivos, tanto programas como imágenes ISO y juegos.
E incluso un test con el que vamos a poder conocer el rendimiento y la estabilidad al trabajar con archivos no comprimibles, una de las tareas donde más sufren este tipo de unidades. En este último sí podemos ver que el SSD sufre un poco con los archivos no comprimibles, aunque no llega a caer en picado la velocidad y recupera muy bien.
Otro test que vamos a realizar con este SSD lo haremos con el programa ATTO Disk Benchmark. Este software nos va a permitir conocer la velocidad de lectura y escritura de archivos de diferentes tamaños, pasando desde los 512 bytes hasta los 64 megabytes. De esta forma vamos a ver cómo se comporta con archivos pequeños y a partir de qué capacidad ya obtenemos el pleno rendimiento.
Como podemos ver en este test, el SSD consigue su velocidad máxima de escritura a partir de los 32 KB, aunque la velocidad tope de lectura no se alcanza hasta los ficheros de 1 MB. A partir de aquí, se mantiene siempre estable.
Y, además, también hemos usado el programa Anvil Benchmark, gracias al cual vamos a poder medir el rendimiento del SSD, así como su rendimiento aleatorio, en IOPS, para ver cómo se comporta.
Por último, la temperatura que hemos obtenido durante las pruebas de rendimiento ha estado bastante controlada. Eso sí, debemos tener en cuenta que, a pesar de haber utilizado el disipador de nuestra propia placa base, el SSD ha rozado los 70 grados después de las pruebas de rendimiento. Si vamos a hacer un uso intensivo de él, y no queremos enfrentarlos al Thermal Throttling, mejor optar por instalarle un disipador mejor que mantenga esos grados de más controlados.
En cualquier caso, es un SSD que ha mantenido bastante bien el tipo en todas las pruebas y que, en definitiva, ha cumplido con lo prometido.
Conclusión, ¿merece la pena?
Es cierto que no estamos ante el SSD PCIe Gen4 más rápido del mercado, pero tampoco es uno de los más caros (de hecho su precio es uno de los mayores atractivos que tiene, algo que es habitual en KIOXIA). Entrando ya en velocidades de 4 GB/s de escritura y 5 GB/ de lectura, los cuellos de botella quedan totalmente erradicados, y es mejor intentar reducir el precio de las unidades, o conseguir algunas con mejor acceso aleatorio, antes que gastarnos más dinero en algo más de velocidad (que, por cierto, se traducirá en mayor calor).
Este KIOXIA EXCERIA PLUS G3 es una opción intermedia, totalmente válida para todo tipo de usuarios. Por un lado, vamos a conseguir velocidades sobresalientes que nos permitirán sacarle todo el partido a nuestro hardware y a los juegos (funciona incluso en una PS5), mientras que por otro lado podremos comprarla a un precio bastante asequible. Actualmente, podemos encontrar la modalidad de 1 TB por apenas 60 euros, mientras que la de 2 TB (la que hemos analizado) podemos encontrarla por unos 110 euros (ambos precios, en oferta).
Eso sí, a pesar de que es un SSD que según el fabricante soporta hasta 85ºC en funcionamiento sin problemas (frente a los 70ºC habituales), nuestra recomendación es que si tu placa base tiene disipadores para los SSD los utilices, ya que de lo contrario estarás haciendo funcionar este SSD a una temperatura superior a la que debería y podrías llegar a sufrir Thermal Throttling si no tienes la caja bien ventilada.
Por todo ello, hemos decidido darle a este SSD NVME KIOXIA EXCERIA PLUS G3 nuestro galardón de Oro y nuestra recomendación por su relación prestaciones / precio.