Intel ha introducido una nueva gama de procesadores, los Core i+, los que se venden bajo esta marca incorporan una memoria Intel Optane junto al Intel Core que corresponda. Con esta estrategia la marca pretende llegar a los usuarios que quieren mejorar el rendimiento de sus unidades de almacenamiento y no quieren invertir en un SSD. Estos procesadores llegarán a las principales tiendas y plataformas online.
Los Intel Core i+ son el complemento perfecto para nuestro HDD secundario
La oferta inicial de procesadores Intel Core i+ consiste en tres packs:
- Intel Core i7+8700, que cuenta con el procesador Intel Core i7-8700 y una memoria Intel Optane de 16 GB. El precio del pack es de 340 dólares y el del procesador sin pack es de 302 dólares.
- Intel Core i5+8500, que cuenta con el procesador Intel Core i7-8500 y una memoria Intel Optane de 16 GB. El precio del pack es de 240 dólares y el del procesador es de 205 dólares.
- Intel Core i5+8400, que cuenta con el procesador Intel Core i7-8400 y una memoria Intel Optane de 16 GB. El precio del pack es de 215 dólares, mientras que el del procesador es de 179 dólares.
Con estos packs la compañía está matando dos pájaros de un tiro. Por un lado, están brindado a los usuarios una experiencia de SSD con sus antiguos HDD, por un precio relativamente barato; por el otro, están mejorando su experiencia en la producción masiva de sus nuevas memorias 3D XPoint.
Esta oferta llega cuando la compañía ha mejorado su tecnología Optane y ha conseguido que ahora puedan actuar de caché para cualquier disco duro, sin importar si es un disco de arranque o un disco secundario del equipo -antes sólo podían hacerlo con el disco primario o de arranque-. Gracias a esto las memorias Optane consiguen una interesante función, ya que muchos usuarios contamos con un SSD dónde está instalado el sistema y un HDD secundario dónde ejecutamos los juegos o guardamos nuestra información, ahora este último podrá alcanzar grandes velocidades sin tener que invertir mucho dinero en él.
La propia Intel asegura que un sistema de almacenamiento híbrido con 32 GB de caché Optane es de 1,7 a 3,9 veces más rápido que un HDD normal. Este tipo de memorias no sirven como sustitución de un SSD, sólo sirven para ser utilizados como caché; Intel lanzó sus propios SSD NVMe Optane que servían como memoria y caché SSD a la vez, los Intel Optane 800P.