Kingston Digital ha anunciado la incorporación de un nuevo miembro a su familia de tarjetas de memoria Class 10 UHS-I SDHC/SDXC con 512 GB de capacidad. Está especialmente concebida para cámaras DSLR y cámaras de vídeo que graban en resolución 4K, y que necesitan una altísima capacidad de almacenamiento y a gran velocidad.
Con esta tarjeta de memoria SDXC de 512 GB de capacidad, Kingston es ahora capaz de ofrecer una solución de almacenamiento masivo que cumpla con las necesidades de los usuarios (profesionales o no) más exigentes, que cada vez están demandando una mayor capacidad de almacenamiento por el creciente tamaño que ocupa el contenido en alta definición, especialmente ahora que cada vez hay más dispositivos capaces de soportar resoluciones nativas Ultra HD y 4K.
Pero además de dar la posibilidad de almacenar miles de fotos y una gran cantidad de vídeos en alta definición, estas nuevas tarjetas de memoria de Kingston son especialmente indicadas para grabación de contenido en resolución Ultra HD/4K por su gran rendimiento, ya que proporcionan velocidades de hasta 90 MB/s de lectura y 45 MB/s de escritura, permitiendo a su vez incluso grabar vídeo 1080p 3D en tiempo real sin ningún tipo de problema.
Por cierto que además de este nuveo modelo de 512 GB de capacidad, Kingston continua ofreciendo dentro de la misma familia capacidades más modestas que incluyen 256 GB, 128 GB, 64 GB, 32 GB y 16 GB en su modelo más barato, si bien es cierto que ahora el producto estrella es sin duda el modelo de 512 GB.
Como todas las tarjetas de memoria de Kingston, estas nuevas Class 10 UHS-I SDHC/SDXC de 512 GB e inferiores cuentan con garantía limitada de por vida, aunque Kingston todavía no ha dicho ni cuándo estará disponible este nuevo modelo ni a qué precio.
¿Es realmente necesaria esta capacidad?
Si tomamos como ejemplo TimeScapes: The Movie que presume de ser la primera película vendida de manera oficial en resolución 4K nativa (es decir, 4096 x 2304 píxeles), la respuesta parece evidente puesto que sus 52 minutos de duración ocupan la friolera de 140 GB, y eso que está comprimida con diversos códec (es decir, no está en el formato RAW en el que graban las cámaras profesionales, que ocupa mucho más espacio).
No vamos a entrar en el debate de si la resolución Ultra HD / 4K son el futuro que nos espera (los fabricantes quieren que así sea), pero lo que está claro es que la necesidad de almacenamiento está en alza por culpa de la alta definición, y tarjetas de memoria de 512 GB como la que acaba de presentar Kingston ya no parecen tan descabelladas.