Muchos y de gran magnitud parecen los planes que tiene AMD de cara al futuro. Es bien sabido que la compañía hace bastante que no lanza procesadores de escritorio de alto rendimiento que puedan competir con Intel, pero ahora los rumores sobre los próximos lanzamientos se están empezando a acumular. Si ayer os contábamos una filtración de SK Hynix sobre la futura memoria HBM 3D para la próxima generación de gráficas de AMD, que será extrapolada a APUs y, posiblemente, a procesadores de escritorio, hoy nos llegan rumores sobre TSMC, quien parece estar ya preparando una nueva generación de procesadores x86 de alto rendimiento para AMD con proceso de fabricación FinFET+ a 16 nm.
Según publica Bitsandchips, TSMC ya está preparando la producción de procesadores con proceso FinFET+ de 16 nanómetros para AMD, pero no comenzarán la producción en masa hasta la segunda mitad de 2016. Se desconoce cuáles serán exactamente los procesadores que fabricarán, pero probablemente serán Opteron x86 para servidores y Excavator o Zen para escritorio.
Por otro lado, ya se sabe que la arquitectura Excavator está planeada para el primer trimestre del año que viene, pero en principio la veremos en las APUs Carrizo (sucesor de Kaveri). Ojo, porque teóricamente estos primeros procesadores basados en Excavator serán todavía fabricados con proceso de 28 nm, y decimos teóricamente porque no está confirmado, pero no hay ninguna información que nos haga pensar en otra cosa. AMD parece seguir «estancada» en los 28 nm por lo menos hasta la llegada de la próxima generación de tarjetas gráficas, que ya se sabe que serán fabricadas con proceso de 20 nm. Por tanto, el salto a los 16 nm en procesadores podría producirse directamente desde los 28 nm actuales.
En cualquier caso y como siempre nos toca esperar, pero habrá que estar muy atentos porque parece muy interesante la estrategia que parece estar tomando AMD con respecto a sus futuros lanzamientos. En los últimos tiempos solo vemos «refritos» utilizando las mismas tecnologías que antaño, pero parece ser que están haciéndose esperar por unos muy buenos motivos.