En los últimos meses parece que ese concepto de «PC con IA» está en boca de todos, y conscientes de ello los fabricantes han comenzado a afanarse en perfeccionar sus equipos para que funcionen de manera óptima con sistemas de Inteligencia Artificial. Por supuesto, ASUS está a la vanguardia de esto y ya lo vimos cuando analizamos el Vivobook S15 con procesador de Qualcomm, pero ahora nos llega una vuelta de tuerca: hoy analizamos el nuevo ASUS ProArt PZ13, un convertible 2 en 1 certificado como PC Copilot+ y que está destinado, especialmente, a profesionales que necesitan llevarse su creatividad a todas partes. Vamos a verlo.
ASUS define el ProArt PZ13 como un portátil desmontable con certificación IP52 y de calidad militar, diseñado para creadores activos que quieren usar su equipo en exteriores. Incorpora una impresionante pantalla táctil OLED, pero destaca por su procesador Qualcomm Snapdragon X Plus de 45 TOPS de potencia para IA. Pero dejémonos de preámbulos y vamos a entrar en materia.
ASUS ProArt PZ13, especificaciones técnicas
ASUS ProArt PZ13 | |
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Procesador | Qualcomm Snapdragon X Plus (8 núcleos, 8 hilos a 3,4 GHz) |
Procesador IA | Qualcomm Hexagon NPU (45 TOPs) |
Memoria RAM | 16 GB LPDDR5X a 8.448 MHz soldados en placa |
Tarjeta gráfica | Integrada (Qualcomm Adreno) |
Almacenamiento | 1 TB PCIe 4.0 NVMe SSD |
Pantalla | OLED de 13,3 pulgadas 2880 x 1800 píxeles 60 Hz y 0,2 ms Brillo máximo de 500 nits Display HDR True Black 500 |
Teclado y touchpad | Teclado extraíble tipo chiclet con clave Copilot Touchpad de precisión |
Sonido | Sistema de amplificación inteligente Matriz de micrófonos harman/kardon |
Comunicaciones | Webcam HD de 5 Mpx hasta 1440p Cámara trasera de 13 Mpx hasta 4K WiFi 7 2x2 (802.11be) Bluetooth 5.4 |
Conectividad | 2x USB 4.0 Gen 3 Type-C support display / power delivery Lector de tarjetas SD Express 7.0 |
Batería | 70 Wh |
Alimentación | Adaptador de CA de650 W |
Dimensiones | 29.75 x 20.29 x 0.90 ~ 0.90 cm |
Peso | 850 gramos |
Precio | Desde 1.599€ |
Este nuevo portátil Copilot+ de ASUS incorpora el nuevo procesador Qualcomm Snapdragon X Plus, con 8 núcleos y 8 hilos de proceso a una velocidad máxima de 3,4 GHz, por lo que a priori (y siendo un PC con Windows al fin y al cabo) debería de proporcionarnos potencia suficiente para prácticamente cualquier tarea. Esta CPU ARM se ve complementada por una NPU Qualcomm Hexagon capaz de generar una potencia de 45 TOPS para IA, mientras que su GPU integrada es una Qualcomm Adreno que ya conocemos porque es la misma que lleva el Snapdragon X Elite.
El equipo está diseñado para tener una máxima portabilidad, y por eso tiene que prescindir de algunos elementos para hacer un portátil lo más portable y ligero posible. Así, por ejemplo la memoria RAM está soldada en placa y no es ampliable, pero con los 16 GB LPDDR5X deberíamos tener más que de sobra para casi cualquier cosa. En cuanto al almacenamiento, el equipo porta un SSD de 1 TB PCIe 4.0.
En la línea de hacer el equipo lo más portable y ligero posible, la conectividad también se reduce y solo cuenta con dos puertos USB4 que, eso sí, van a plena potencia y sirven tanto para carga como para conectar pantallas externas si hace falta. También cuenta con WiFi 7 y Bluetooth 5.4 de última generación.
Pero uno de los elementos estrella de este ASUS ProArt PZ13 es su pantalla OLED, de 13,3 pulgadas y resolución 2880 x 1800 píxeles, táctil y perfecta para artistas creativos. Tiene 60 Hz de frecuencia de refresco y un tiempo de respuesta de 0,2 ms, con certificación VESA DisplayHDR TrueBlack 500 que llega a 500 nits de brillo máximo, por lo que es ideal para su uso en exteriores incluso bajo la luz directa del sol.
Las características especiales Copilot+ para IA
Como decíamos en la introducción, llevamos ya un tiempo hablando mucho de los PC con IA, que no es que lleven una IA integrada sino que están más preparados para fomentar un mejor rendimiento en aplicaciones de IA gracias a que el procesador integra una NPU, una especie de coprocesador específicamente diseñado para manejar los algoritmos que usan las Inteligencias Artificiales.
Esto permite que el equipo se desenvuelva mejor en este tipo de tareas, como por ejemplo:
- Live Captions: esta función se introdujo para ofrecer a los usuarios con problemas de audición (e incluso sordos) la posibilidad de consumir contenido de audio mediante subtítulos de voz generados automáticamente mediante IA.
- Automatic Super Resolution: esta función utiliza las capacidades de aumento de escala basadas en la NPU del portátil para mejorar el rendimiento en juegos. Permite que se ejecuten más rápido y con imágenes mejoradas, una especie de DLSS.
- Recall: es una función que permite guardar instantáneas de la pantalla mientras usas el dispositivo, permitiendo encontrar y utilizar fácilmente cualquier cosa que hayas estado haciendo anteriormente. Se pueden buscar archivos, imágenes, páginas web y mucho más utilizando lenguaje natural y las pistas que recuerdes. También se puede explorar sin esfuerzo la actividad pasada utilizando una línea de tiempo para encontrar exactamente lo que estabas buscando.
- Cocreator: los usuarios podrán transformar bocetos en Paint en arte en tiempo real. Se puede empezar a dibujar en un lienzo utilizando el conjunto de herramientas estándar de Paint y añadir un texto para describir el resultado deseado. Cocreator generará una vista previa del resultado actualizándola a tiempo real a medida que el usuario dibuja, y se puede seguir editando y regenerando la imagen mediante IA hasta conseguir el resultado deseado.
- Windows Studio Effects: tiene nuevas funciones, como contacto visual mejorado, luz de retrato y filtros creativos. Eye Contact Enhanced funciona como un telemprompter, ajustando la mirada de la persona en la pantalla para alinearla con la webcam aunque no la estés mirando en realidad. En general, esta función ofrece muchas y grandes mejoras para las videoconferencias.
Unboxing y análisis externo
Como es habitual en casi todos los portátiles de ASUS, el equipo viene en una caja de cartón duro con asa, en este caso de color negro, en cuya parte exterior no encontramos prácticamente información sobre lo que hay en el interior con la salvedad de una etiqueta que detalla el código del equipo y sus principales características de hardware.
En el interior encontramos dos cajas más pequeñas, una que contiene el portátil y otra con los accesorios.
En la caja de los accesorios se incluye el adaptador de corriente USB-C de 65 vatios, un adaptador de micro SD a SD y un ASUS Pen 2.0, ya que recordemos que la pantalla es táctil.
En la otra caja tenemos el portátil, que como veremos en seguida se divide en varias partes.
Y es que como es un convertible, tenemos la pantalla (y el hardware) por un lado, el teclado por otro, y también otra parte que es una funda magnética para mantener el equipo siempre protegido.
Vamos con el equipo principal. El ASUS ProArt PZ13 tiene una pantalla de 13,3 pulgadas de diagonal con matriz OLED y acabado brillante, que como hemos comentado ya muchas veces en el pasado no es algo que nos guste mucho, pero que con el equipo encendido no se nota tanto. No hay mucho que destacar en esta cara frontal con la salvedad de que, como siempre, en la parte superior tenemos la webcam, el micrófono y el sensor de luz.
En la parte inferior tenemos el conector para el teclado, así como dos hendiduras donde encajará la parte de éste para que no se mueva de su sitio.
En el lateral izquierdo tenemos un puerto USB4 (USB-C), y si retiramos una tapita de plástico tenemos el lector de tarjetas SD Express 7.0 y el otro puerto USB4.
En la parte de arriba tan solo destaca una rejilla de ventilación y el botón de encendido.
En el lateral derecho, dos botones para controlar el volumen y nada más.
En la parte trasera hay muchas pegatinas, además del logo de ASUS ProArt, pero también aquí hay una cámara más grande que la frontal, ya que al fin al cabo… bueno, pues es una tablet PC.
La «funda» es magnética y hecha a medida para este ASUS ProArt PZ13, así que solo hay que colocarla encima y listo. Como podéis apreciar, la parte inferior se puede doblar para colocar la pantalla en vertical y que así haga las veces de portátil también.
Vamos ahora a ver la parte del teclado. Es muy fino y las teclas tienen muy poco recorrido, pero aun así es un teclado compacto TKL, con un touchpad bastante generoso y ojo, porque es retroiluminado.
En la parte endeble de la zona de arriba es donde tenemos el conector y dos protuberancias para anclarlo a la pantalla. El anclaje, de todos modos, es magnético y hemos de decir que bastante firme.
Ensambladas las tres piezas, hemos convertido este 2 en 1 en todo un portátil totalmente funcional.
Eso sí, ojo porque el grosor de todo el conjunto suma bastante, así como el peso, que aumenta notablemente. Las dimensiones y peso de la tabla de especificaciones se refieren tan solo a la parte «tablet», la pantalla sin el teclado ni la funda.
Visto el equipo, vamos a encenderlo y tras pasar por el tedioso pero obligatorio asistente de configuración de Windows, probar qué tal funciona.
Probando el ASUS ProArt PZ13
Como siempre, al encender al portátil nos encontramos con el logo de la familia, en este caso el logo de ProArt.
El teclado, como decíamos antes, es retro iluminado, aunque hemos de decir que su intensidad no es demasiado alta.
En uso, el equipo es muy cómodo de llevar a cualquier parte, aunque hemos de reconocer que para «cerrarlo» es un poco tedioso tener que andar cerrando y desplegando la «pata» de la funda trasera para que la pantalla se quede de pie. Con todo, es un equipo que se puede usar perfectamente sobre las piernas o incluso sujetándolo con una mano mientras usas el ASUS Pen 2.0 con la otra. Es bastante ligero y cómodo dondequiera que lo utilices, porque además no se calienta nada.
Como siempre, hemos de destacar su excelente pantalla OLED como uno de los puntos fuertes, y es que se ve de maravilla incluso bajo la luz directa del sol. Además, es una pantalla táctil muy sensible e ideal para utilizar con el ASUS Pen 2.0 que se incluye en el pack, hasta el punto de que es apta incluso para utilizar en aplicaciones de dibujo y diseño gráfico, tal cual como si fuera una tableta digitalizadora… pero mucho mejor, claro.
En cuanto a la autonomía, hemos estado usando el equipo durante varias horas tanto para hacer benchmarks como para trabajo cotidiano (de hecho, este análisis lo estamos escribiendo en el propio equipo), y con una utilización que podríamos considerar bastante intensiva la batería no se ha quejado en toto el día… desde las 8 y pico de la mañana, ha aguantado todo el día hasta más de las 18:00 y restaba un 32% de batería, así que vaya, desde luego es un equipo ideal para usarlo todo el día sin problemas.
Ruido y temperatura
En reposo, el ASUS ProArt PZ13 es completamente inaudible, e incluso sometido a máxima carga sus ventiladores apenas emiten un leve rumor que no se aprecia salvo que estés en completo silencio, por lo que podemos decir que es uno de los portátiles (o más bien convertibles) más silenciosos del mercado ahora mismo.
En cuanto a la temperatura, como podéis ver en la captura de My ASUS de arriba el equipo no es precisamente fresco, pues en reposo ronda los 50ºC y cuando se le somete a máxima carga sobrepasa los 82ºC, todo ello con 26ºC de temperatura ambiente. Sin embargo, el diseño térmico es excelente porque el equipo no se siente caliente en ningún momento, por lo que este ASUS ProArt PZ13 se lleva un aprobado con nota.
Pruebas de rendimiento
Comenzamos como siempre mostrándoos una captura de CPU-Z para ver el hardware del equipo. Hay que tener en cuenta que si adquirís un equipo como este con procesador Qualcomm, deberéis descargar la versión para ARM del software porque si no no funcionará bien.
Aprovechamos que tenemos CPU-Z abierto para someter al procesador al benchmark interno de la aplicación, tomando como referencia el Snapdragon X Elite que monta, por ejemplo, el ASUS Vivobook S 15.
El resultado es bastante inferior, pero esto es normal porque este procesador de Qualcomm es de 8 núcleos frente a los 12 núcleos del que hemos usado para compararlo, y con un TDP bastante inferior también.
Continuamos con GPU-Z.
Bueno, la gráfica Adreno que integra este procesador no es que sea una maravilla, pero cuando te compras un convertible no es que lo hagas para contar con una buena GPU y usarla para jugar precisamente.
Vamos a continuar viendo el rendimiento del equipo con CrystalDisk Mark, para ver qué tal funciona ese SSD PCIe 4.0 de 1 TB que incorpora.
El rendimiento es el esperado para este tipo de unidades, rondando los 5 GB/s tanto de lectura como de escritura, así que no hay mucho que decir aquí.
Vamos a pasar a ver qué tal funciona la memoria RAM del equipo, que recordemos monta 16 GB LPDDR5X a 8.448 MHz, y para ello usaremos como siempre Aida64.
Igual que nos sucedió cuando analizamos el Vivobook S 15 con procesador Snapdragon, el rendimiento de la memoria es… raro. Ofrece una tasa de lectura impresionante, a la altura de las RAM DDR5 de sobremesa de más alta gama, pero sin embargo el rendimiento de escritura y copia deja bastante que desear pues se queda a la altura de la DDR4 de anterior generación.
Vamos a someter pues al equipo a otra prueba de memoria con SuperPi, que obligará al procesador a calcular 32 millones de decimales del número Pi, y cuanto menos tarde mejor.
El resultado, aunque más de un minuto mejor de lo que obtuvimos con el Vivobook S 15, sigue siendo bastante malo si lo comparamos con el resultado que obtenemos en un portátil con CPU x64 convencional, que suelen durar entre 6 y 8 minutos como mucho.
Veamos ahora una prueba más específica para el procesador con Cinebench 2024, que nos mostrará una puntuación arbitraria del rendimiento del procesador a la hora de renderizar una escena 3D tanto con un solo núcleo como utilizando todos los que tiene el procesador.
El rendimiento es de nuevo el esperado para esta CPU ARM de 8 núcleos, pero lo que sí hay que decir es que esa puntuación con un solo núcleo es superior a la que obtuvimos con el Snapdragon Elite X de 12 núcleos. Está bastante bien, a la altura de un Apple M1 Max.
El siguiente benchmark en nuestra batería de pruebas era Geekbench, pero por algún motivo nos daba error pues consideraba que el procesador era una muestra de ingeniería y que no podían procesar el resultado. No es verdad, pues además este portátil ya está lanzado, pero qué le vamos a hacer. Así pues, pasamos a la siguiente prueba que es el rendimiento 3D con 3DMark Fire Strike, para ver qué tal se desenvuelve aunque como ya hemos dicho varias veces este no es un equipo pensado para ello.
Como era de esperar, el resultado es bastante malo, pero es que este no es un equipo para jugar sino para trabajar o realizar cualquier tipo de tarea en cualquier lugar. Aun así pues oye, juegos sencillos, bajando la resolución y con los gráficos en bajo… quizá podamos tener 30 FPS para echar el rato.
Conclusión y veredicto
Ya cuando analizamos los primeros portátiles con procesador Qualcomm os contamos que nos habían decepcionado porque las expectativas eran muy altas, pero en este caso hay que ver no solo el rendimiento, sino también el comportamiento de este equipo, que es para lo que es.
Con esto queremos deciros que el ASUS ProArt PZ13 no es un portátil gaming, ni tampoco un equipo diseñado para altas cargas de trabajo. No. Es un convertible para poder trabajar en cualquier parte, para tareas de diseño y para aplicaciones que usen Inteligencia Artificial teniendo una excelente portabilidad, autonomía de batería y una pantalla cuando menos impresionante.
La verdad es que es un convertible que nos ha gustado mucho por lo versátil que es y por lo bien que se comporta, porque a pesar de que consideramos que Windows 11 es a día de hoy un lastre, el ASUS ProArt PZ13 se muestra fluido y sin problemas en cualquier tipo de tarea, ya sea editar imágenes con Photoshop, navegar por Internet, gestionar Excels enormes o disfrutar de contenido multimedia.
Consideramos, honestamente, que ahora mismo es uno de los mejores convertibles que te puedes comprar, especialmente si eres un creativo que quiere usar su equipo allá donde esté, y por eso no podemos sino darle nuestro galardón de Oro, así como nuestra recomendación por su diseño, que nos parece una pasada.