TerraMaster no es un fabricante demasiado conocido todavía en España, pero lleva ya unos cuantos años fabricando y vendiendo productos de almacenamiento en red y directo y nube personal con un éxito bastante notable de ventas. De entre su catálogo, el fabricante nos ha enviado un TerraMaster D4-300 para mostraros nuestro análisis, un DAS (almacenamiento con conexión directa al PC) de cuatro bahías de disco que cuenta con la particularidad de que incorpora conectividad USB 3.1 Type-C, aunque también es compatible con USB 3.0.
Cada vez es más común que los usuarios tengamos necesidades grandes de almacenamiento, motivo por lo que los discos duros externos USB se siguen vendiendo muchísimo a día de hoy. Sin embargo, a veces llega un momento en el que se nos juntan un montón de discos externos y no sabemos qué tenemos en cada cual, por lo que las soluciones como la que os presentamos hoy de TerraMaster se convierten en la alternativa ideal.
Y es que a pesar de ser un DAS y no un NAS, nos proporciona en éste caso cuatro bahías de disco duro de 2.5/3.5 pulgadas en un solo dispositivo, pudiendo instalar hasta 24 TB de almacenamiento (hasta 6 TB por disco duro) y permitiéndonos crear entornos RAID para mayor seguridad (en éste caso la unidad es compatible con RAID 0, RAID 1, RAID 3, RAID 5, RAID 10, JBOD, Single y Clone) y con un rendimiento bastante decente. Además, en éste caso TerraMaster incorpora como novedad la posibilidad de conectar la unidad a nuestro ordenador mediante el nuevo conector USB Type-C reversible.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS.
Sacadas de la página web del fabricante.
Como decíamos, el TerraMaster D4-300 incorpora cuatro bahías para disco duro de fácil acceso, y nos permite configurarlos en diferentes configuraciones RAID. Se conecta al PC mediante un conector USB Type-C reversible o el habitual Type-A, proporcionándonos un rendimiento teórico de hasta 210 MB/s de lectura y 190 MB/s de escritura en RAID0, un rendimiento bastante decente.
La carcasa está fabricada en aluminio para facilitar la disipación de calor, pero además incorpora dos ventiladores para refrigerar todos los discos duros del interior y así poder despreocuparnos en éste sentido. Además, cuenta con su fuente de alimentación propia, así que tampoco tendremos que preocuparnos por éste tema.
ANÁLISIS EXTERNO.
El TerraMaster D4-300 viene embalado en una caja de cartón duro de color oscuro en cuyo exterior apenas podemos ver los logotipos del fabricante, sin nada de información sobre el producto que hay en el interior salvo una pequeña etiqueta con el número del producto.
En el interior, perfectamente protegido nos encontramos con el producto y con una caja que contiene los accesorios.
En el interior de ésta caja, todo perfectamente embalado y etiquetado, nos encontramos con lo siguiente:
- Manual de instrucciones e información sobre la garantía.
- Tornillería más que de sobra para instalar todo tipo de discos duros.
- Cable USB Type-C a USB Type-A.
- Cable USB Type-C a USB Type-C.
- Adaptador de corriente con enchufe europeo.
- Cable con enchufe de UK.
Aquí tenéis ya el TerraMaster D4-300 posando para la cámara en una vista a tres cuartos.
En el frontal encontramos las cuatro bandejas para discos duros con clips para extracción rápida. En la izquierda, el botón de encendido / apagado y los LED indicadores de estado tanto de encendido como de actividad para cada uno de los discos duros de manera individual.
Aquí tenéis en detalle ésta última zona.
En la parte derecha una pegatina con unos iconos de los cuales solo comprendo los dos primeros, no sé vosotros (entiendo que el tercer icono nos quiere decir que el producto es guay…).
A pesar de que la carcasa es toda de aluminio, la parte frontal y las bandejas de los discos duros son de plástico.
En ambos laterales de aluminio nos encontramos imprimado el logo de la marca.
Por la parte trasera, también de plástico de color plateado, tenemos los dos ventiladores y, en la parte derecha, el conector de alimentación y el USB Type-C de entrada.
Detalle de ésto último.
La zona inferior cuenta con una pieza metálica con perforaciones para entrada de aire, además de cuatro patas de goma anti vibraciones y anti deslizamiento de buen tamaño.
También hay una etiqueta que nos indica el modelo, la cumplimentación de regulaciones e información eléctrica.
Detalle de una de las patas de goma.
ANÁLISIS INTERNO.
Visto el DAS por fuera es hora de ver qué esconde bajo esa carcasa de aluminio. Lo primero de todo, claro, es sacar las cuatro bandejas para disco duro.
Cada una de ellas está etiquetada para ayudarnos a saber dónde iba cada disco cuando los saquemos para limpiar.
Un aspecto negativo es que sea el disco duro que sea el que instalemos, habrá que atornillarlo en la zona inferior. No tiene anclaje sin herramientas en los laterales.
Retiradas las bandejas para discos podemos ver la placa electrónica que contiene los conectores SATA.
Más de cerca.
Retirando seis tornillos en la parte trasera, tenemos acceso directo a la pareja de ventiladores preinstalados. Son ventiladores con conector de 4 pines pero se trata de un conector especial, no universal (y de hecho como veréis en la imagen de la galería inferior, vienen con un pegote de pegamento para que no lo quitemos), por lo que si se nos estropeara un ventilador no tendríamos más remedio que recurrir al fabricante para solicitar un reemplazo, no podríamos comprar un ventilador e instalarlo por nuestra cuenta.
El interior del D4-300 consta de una placa electrónica con un pequeño SoC, los componentes necesarios, y un zócalo PCI-Express x1 en el que se conecta la placa que contiene los cuatro conectores SATA para los discos.
Todo el interior se saca de la carcasa deslizándose, por lo que podemos ver ésta totalmente vacía.
TESTEO.
Visto por dentro y por fuera, es hora de poner el aparato a prueba. Lo único que hay que hacer, claro, es instalarle los discos duros con los que vayamos a trabajar. En nuestro caso hemos instalado dos SSDs de 2,5 pulgadas Crucial M4 de 256 GB y conexión SATA 3.
El software.
Nada más conectar el TerraMaster D3-400 a nuestro ordenador en un puerto USB Type-C, el sistema operativo reconoce los discos duros de manera individual. Necesitaremos instalar el software que podemos descargar de la web del fabricante (se llama TerraMaster RAID Manager) para poder configurar los modos RAID internos del aparato.
En la segunda pestaña, el software detecta los discos que tenemos instalados y nos permite seleccionar los modos de RAID compatibles. En nuestro caso vamos a configurar un RAID 0 para tener el mejor rendimiento.
En apenas un minuto ya tenemos el RAID preparado.
Claro que, tras hacer ésto, los discos han sido borrados y se ha creado un volumen de una sola unidad con ambos discos. Deberemos ir al administrador de discos de Windows para asignarle un volumen y una letra a la unidad.
Hecho ésto, ya podemos trabajar con nuestro RAID0 de dos SSDs en el TerraMaster D3-400 como si fuera una unidad de disco duro más conectada a nuestro PC.
Pruebas de rendimiento.
Hemos sometido al volumen creado a diferentes pruebas de rendimiento. La parte mala es que como el RAID se realiza de manera interna en el DAS de TerraMaster, para algunas pruebas Windows no lo reconoce bien pues no reconoce la controladora (para trabajar con el disco en Windows no hay ningún tipo de problema, lo detecta como decíamos antes como una unidad de disco duro más).
Un ejemplo, CrystalDisk Info, que no logra saber lo que tiene entre manos. Solo detecta que hay un RAID0 de discos JMicron (Crucial) realizado por Hardware (H/W).
En CrystalDisk Mark se nos muestra el siguiente rendimiento. Notaréis que tiene unas tasas muy lentas, y ésto es por el mismo motivo: no detecta bien la controladora.
Lo mismo ocurre con AS SSD Benchmark.
Y con HD Tune.
Como habréis visto no cuadran muy bien ni siquiera las tasas de lectura. Sin embargo, trabajando con la unidad funciona a la perfección. Por ejemplo, copiando un archivo grande de 25 GB desde el SSD de sistema al DAS, la tasa de transferencia era de 96 MB/s, que aun así es bastante más baja de lo que nos decía el fabricante. Al contrario (del DAS al SSD) la velocidad era de unos 190 MB/s, ya sí más cercana a la especificación de 210 MB/s del fabricante.
CONCLUSIÓN.
El TerraMaster D3-400 se vende en Amazon por unos 200 euros pero si utilizáis el cupón DDOGXJBC se queda en 180 euros (podéis utilizar el cupón en cualquiera de sus variantes) y tiene variantes de 2 bahías por 150 euros y de 5 bahías de disco por 250 euros. Sinceramente me resulta un poquito caro, pero la verdad es que puede ser un dispositivo muy útil pues en el caso de la unidad analizada nos da la posibilidad de tener almacenamiento directo de hasta 24 TB con conexión USB 3.1 y conector tanto el habitual Type-A como el nuevo Type-C reversible. ¿Es una buena compra? Desde luego que sí para el que la necesite, se trata de un producto de buena calidad y con un rendimiento bastante decente.
PROS:
- Cuatro bahías para disco, hasta 24 TB de almacenamiento.
- Posibilidad de configurar distintos niveles de RAID.
- Muy buena calidad de materiales.
- Refrigeración integrada.
- Rendimiento de lectura decente.
- Muy silencioso.
CONTRAS:
- Rendimiento de escritura un tanto pobre.
- Instalación de discos con herramientas.
- No se pueden cambiar los ventiladores.
Por ello, creemos que el TerraMaster D4-300 se merece nuestro galardón de Oro y nuestra recomendación por su diseño.