Seguramente hayas escuchado o leído hablar sobre el flickering en los monitores de PC, un fenómeno que se produce en casi todos los modelos del mercado y que, a la larga, produce efectos nocivos para la salud visual del usuario. A continuación vamos a explicarte qué es el flickering, qué lo produce y por qué deberías tenerlo muy en cuenta si quieres mantener una buena salud visual.
Casi todos los monitores del mercado se fabrican con varias «capas» en la pantalla: por un lado, pueden tener un panel LCD o con otras tecnologías que son las que muestran la imagen, pero por detrás tienen una retroiluminación LED que es la que ilumina los píxeles de la pantalla, y es precisamente la culpable de que suceda el flickering en el monitor. Pero antes de entrar en materia, vamos a ver primero en qué consiste este problema.
Qué es el flickering en los monitores
La definición de flickering (que significa «parpadeo») es «un cambio significativo en la intensidad de la luz en intervalos cortos de tiempo». Básicamente y tal y como su nombre sugiere, son parpadeos debidos a los cambios de luz en la retroiluminación LED de las pantallas. La frecuencia de estos cambios se define por el número de veces por segundo que ocurre, así que cuanto más rápido es el cambio es menos perceptible, motivo por lo que los monitores con altas frecuencias de refresco son menos propensos a que el flickering sea perceptible por el ojo humano.
¿Por qué se produce este efecto?
Principalmente por dos factores:
- Por la generación de la imagen en sí misma, ya que para poder generar la sensación de movimiento en un monitor, es necesario que se creen muchas imágenes cada segundo con leves actualizaciones entre una y otra, en lo que conocemos como tasa de refresco.
- Por el sistema de retroiluminación, por el hecho de que está en la mayoría de monitores es por PWM (pulse width modulation) que consiste en activar y desactivar el brillo de la luz de fondo para generar una mayor o menor cantidad de brillo.
Este último efecto es heredado de las películas antiguas del cine, en las que los proyectores tenían que apagar y encender la luz para pasar de una imagen a otra en los rollos de cinta. Parece mentira, pero aunque esto ahora sucede muchas veces por segundo en los monitores normales, el efecto de la modulación de luz por pulsos viene de ahí.
¿Por qué deberías tener cuidado con el flickering en tu monitor?
El flickering, o parpadeo de la pantalla, puede causar efectos nocivos para la salud visual tales como fatiga ocular, dolor de cabeza, irritación de los ojos e incluso náuseas. Tampoco le tengáis miedo porque eso sí, los síntomas no comienzan a aparecer porque sí, sino tras una exposición prolongada y durante muchos días seguidos a las pantallas.
Es recomendable, por lo tanto, y sobre todo si sois usuarios de PC que pasáis muchas horas delante de la pantalla, invertir en vuestra salud con monitores flicker-free, que evitan este parpadeo.
Hay que tener en cuenta que en tasas de refresco superiores a 60 Hz es probable que no lo notemos, sin embargo, nuestra vista puede que sí, y que tengamos dolores de cabeza sin darnos cuenta del motivo. Por lo que si te duele al usar un ordenador, puede que sea la causa, ten cuidado.