Comprar una tarjeta gráfica de AMD es mala idea tras el acuerdo de Microsoft y NVIDIA
En Microsoft andan con prisas de que los diferentes reguladores del mundo les aprueben la compra de Activision-Blizzard coma una operación qué es sumamente polémica al tratarse de la compra más grande del sector. Lo que ha llevado que varias empresas del mismo, tanto competencia como satélites y aliados, estén aprovechando para sacar tajada y ventajas en plena negociación, ¿La última? El trato entre NVIDIA y Microsoft para llevar los juegos de esta última a GeForce Now. Sin embargo, este pacto perjudica AMD de forma negativa en el mercado de juegos de PC.
Desde hace tiempo los fabricantes de tarjetas gráficas y con ello no nos referimos a los ensambladores, sino a AMD y NVIDIA, que buscan captar la atención de los jugadores de dicha plataforma, es decir, del PC. Para ello realizan acuerdos comerciales con los diferentes desarrolladores que a cambio de capital promoción qué apoyo técnico terminan por optimizar más sus juegos hacia un lado que otro. Esto es especialmente importante en los títulos más jugados.
El pacto entre NVIDIA y Microsoft perjudica a AMD
Es cuanto menos una paradoja que Call of Duty con una popularidad en todas las plataformas y la cantidad de horas jugadas y número de jugadores se encuentre más optimizado en sus títulos para AMD que para NVIDIA. Esto se debe entre otras cosas de que las versiones PC son realmente conversiones directas desde consola donde la marca de Lisa Su y si descontamos a Nintendo tiene el monopolio durante dos generaciones porque su tecnología se encuentra tanto en las consolas de Sony como las de Microsoft.
El acuerdo entre NVIDIA y Microsoft para que se pueda jugar a los juegos de Activision-Blizzard en un futuro si se completa la compra por parte de la multinacional de Redmond trae más miga de lo que parece. Y es que para el hall la nube es necesario que la GPU genere los frames a más velocidad que en un PC convencional para poderlo comprimir, enviar a través de internet y que nuestro sistema lo descomprima a una velocidad lo suficientemente rápida como para no ser un problema durante las partidas sobre todo en los juegos competitivos.
Los más avispados ya os habéis dado cuenta de que eso significa optimizar los juegos hacia las tarjetas gráficas de NVIDIA, lo que supondría un motivo menos por parte de usuarios de los potenciales usuarios de AMD de utilizarlas.
Una táctica habitual en la industria
Desde NVIDIA ya llevan tiempo usando este tipo de tácticas para erosionar a su rival. La de asociar su marca con juegos importantes, ya sea proporcionando soporte técnico para la implementación de cosas como el de DLSS o el trazado de rayos en los juegos. Aunque os parezca mentira que el título sea alto calibre, como Call of Duty se asocien a una marca concreta de hardware, supone una gran cantidad de propaganda derivada para dichos componentes.
Al mismo tiempo, creemos que se ha de destacar el hecho de que AMD no haya sabido capitalizar este hecho a su favor en todo este tiempo. Lo cual es una pena, ya que son los motivos que le ha permitido a su rival quedarse con la mayor cuota mental y rozar cifras de cuasi monopolio en tarjetas gráficas para jugar.