Las conversaciones entre el gobierno de España y el CEO de Intel van a dar frutos, no los que necesitábamos como tal, pero frutos al fin y al cabo. Y es que la compañía estadounidense se ha comprometido junto con el gobierno a lanzar un plan de investigación en nuestro país de manera que se creará y desarrollará un laboratorio de primer nivel en Barcelona por un valor de 400 millones en los próximos 10 años. El objetivo es ambicioso cuanto menos: crear procesadores basados en la ISA RISC-V para superordenadores.
No habrá SUPER FAB de Intel en España para crear chips. La propuesta del gobierno de 11.000 millones de euros (casi un cuarto del presupuesto de la UE para tal fin) no ha surtido efecto alguno en los de Pat Gelsinger, pero sí que hizo que su CEO mirara a nuestro país para invertir en desarrollo e I+D. Por ello y pese al fracaso inicial comentado, Barcelona será la sede del nuevo laboratorio de Intel TOP a nivel mundial.
La inversión de Intel asciende a 400 millones en España, ¿suficiente?
Pues vistos los números que se manejan en Alemania, Francia e Italia, probablemente no. Pero es que vamos con retraso aquí y por algo hay que comenzar, así que seremos positivos a este respecto.
El laboratorio que se va a crear con financiación tanto de la empresa azul como del gobierno está fijado para un plazo de 10 años por un valor de 400 millones y representará el baluarte en un sector donde Intel quiere explotar: superordenadores para Zettascale.
No confundir Exascale con Zettascale, aquí hablamos del diseño e I+D de lo que sería el primer superordenador de primera generación del mundo. El Barcelona Supercomputing Center o BSC, será el encargado de darle vida tras salir del laboratorio y tendrá la particularidad de que este superordenador estará basado en la arquitectura e ISA RISC-V, por lo tanto, Intel quiere investigar con algo totalmente diferente.
Objetivo 2027: la primera plataforma Zettascale del mundo
La inversión será de 10 años, pero Intel no puede esperar tanto. Por ello, estima que en 2027 la plataforma debe estar lista para comenzar a trabajar en este superordenador, algo que ya tenía en sus planes y que el BSC convertirá en realidad para dicha fecha. Jeff McVeigh, vicepresidente y gerente general de la rama Super Compute Group de Intel expresa claramente lo que está por venir en nuestro país:
La computación de alto rendimiento es la clave para resolver los problemas más desafiantes del mundo, y nosotros en Intel tenemos el ambicioso objetivo de pasar rápidamente a la era Zettascale para HPC. Barcelona Supercomputing Center comparte nuestra visión para este objetivo, con igual énfasis en la sostenibilidad y un enfoque abierto. Estamos emocionados de asociarnos con ellos para embarcarnos en este viaje.
Para darle un poco más de contexto a todo lo que hemos comentado, hay que entender que un superordenador de clase ZettaFLOPS como el que se quiere construir significa que hay que aumentar el rendimiento en torno a 1000 veces frente a los actuales, todo en aproximadamente 5 años, es decir, es un reto mayúsculo en un tiempo ínfimo que tiene fecha límite.
Para darle más forma todavía a lo dicho: se necesitan nuevas arquitecturas, nuevos tipos de memoria, nuevas interfaces de E/S, nuevos sistemas de conexión y empaquetado de chips, en definitiva, toda una nueva generación de procesadores y plataformas que serán la base de un futuro donde Intel pretende cambiar las reglas del juego en HPC. ¿Será suficiente esos 400 millones que Intel va a invertir en España junto al gobierno para dar vida a este mastodóntico superordenador?