Cada vez son más los usuarios que dudan sobre qué tipo de periférico es mejor para su uso en el ordenador, y es que hay una gran cantidad de modelos que podemos encontrar que tienen muchas características distintas, pero hay una duda que sigue estando presente en todos los casos, si es mejor optar por un modelo inalámbrico o uno cableado. Por este mismo motivo, os vamos a explicar qué diferencias tienen principalmente uno u otro en términos de ratón y teclado, para que podáis decidir de una vez por todas qué tipo de conectividad es mejor para vosotros.
En la mayoría de las ocasiones es probable que tengamos un periférico normal y corriente para nuestro PC, los teclados o ratones que podemos encontrar en el mercado tienen diferentes gamas que nos permitirán elegir lo que necesitemos dependiendo del tipo de ordenador que tengamos junto con el uso que le demos. En general hay algunos que tienen una conectividad que resulta mejor para ciertos casos, mientras que hay otra que puede tener ciertas ventajas en otras ocasiones, es decir, que hay situaciones en las que es mejor utilizar un periférico con cable y otras en las que seguramente agradeceremos que es inalámbrico.
La duda eterna, ¿es mejor un periférico inalámbrico o uno con cable?
La decisión que tomamos a la hora de utilizar un periférico por lo general suele estar ligada a las necesidades que tenemos, es decir, al uso que le vamos a dar, siendo este el principal motivo por el que muchas veces preferimos elegir un modelo específico para ello. En el caso de la conectividad, hay varios motivos por los que una persona puede decidir hacerse con un ratón o teclado que tenga cable, mientras que hay muchos otros por los que podemos optar por comprar ambos dispositivos con una función inalámbrica.
En el primer caso, si hablamos de los modelos con cable debemos tener claro que entre las mayores ventajas que tienen una es la fiabilidad de la propia conexión, es decir, que sabemos que van a funcionar porque son plug and play, no hay ningún tipo de forma (sin que se rompa el cable) de que falle la conexión. Además de esto, el precio por lo general suele ser mucho menor, algo que permite que exista una variedad mucho mayor en comparación con los inalámbricos y que se traduce directamente en una mayor cantidad de modelos entre los que elegir.
Por su parte, los dispositivos inalámbricos ofrecen la capacidad de poder eliminar el problema que tienen los dispositivos con cable de tener que cambiar el conector cada vez que queramos utilizarlo en otro dispositivo, favoreciendo la portabilidad y uso del periférico. Además de esto, también hay que destacar que la selección de artículos que incorporan una tecnología inalámbrica también suelen ser las gamas más altas (si hablamos de periféricos gaming), por lo que al comprarlos nos aseguramos de tener la mejor calidad posible.
Entonces, ¿cuál es mejor?
La respuesta es bastante sencilla, ya que al final depende de las necesidades y capacidades económicas de cada persona, si vemos un modelo inalámbrico barato seguramente no tenga una calidad demasiado alta (a no ser que sea una oferta de una marca reconocida), lo que implica que sería mejor optar por un modelo de mejor calidad aunque tenga cables, siempre y cuando tengamos un presupuesto más limitado.
Si por el contrario no nos importa invertir más dinero en un dispositivo con una gama más alta y además nos molesta el hecho de tener un cable de por medio, ya sea porque nos resulta difícil gestionarlos, porque queremos tener el escritorio más limpio o directamente porque necesitamos que se pueda conectar de forma sencilla a varios dispositivos, obviamente lo mejor es recurrir a aquellos modelos que sean inalámbricos.