Seguramente son muchas las personas que conocen los periféricos básicos que se pueden utilizar para controlar un ordenador, como son el teclado y el ratón. Pero también existen otros sistemas realmente peculiares que permiten cumplir la misma función.
El ratón es un tipo de periférico que surgió con el auge de la simplificación en los sistemas operativos, este se desarrolló con el objetivo de permitir a los usuarios navegar de forma sencilla sobre una interfaz visual. Pero la utilidad que ofrece no implica que el desarrollo se haya quedado estancado en este diseño, ya que existen bastantes productos que cumplen la misma función (y hay algunos que lo hacen incluso mejor).
Teclado
Es una de las formas más básicas que encontramos a la hora de utilizar un ordenador. Un PC puede funcionar sin ratón pero no sin teclado, en los modelos más antiguos que utilizaban una interfaz por texto lo común era encontrar que tan solo era necesario utilizar este periférico ya que no existía ningún apartado visual sobre el que hacer clic.
Los sistemas operativos actuales han mantenido este tipo de funciones, permitiendo que se pueda utilizar como periférico único gracias a las teclas de dirección y otras especiales como el tabulador (permite identificar botones), el enter (permite presionar botones) así como todas las distintas combinaciones que existen de atajos y funciones.
Touchpad
Aunque muchas personas pueden pensar que el Touchpad es lo más semejante a un ratón que podemos encontrar, realmente no es el caso ya que funciona de una forma completamente distinta. Mientras que los periféricos tradicionales utilizan un sensor que detecta la luz LED o un sistema mecánico con una bola que reconoce la posición del ratón, el panel táctil puede detectar las acciones realizadas dependiendo de qué sensores incluya.
Pueden ser capacitivos, ópticos o de presión, lo que permite detectar tanto el movimiento como la posición de los dedos. Este movimiento se traduce a señales que luego permiten interactuar con la interfaz gráfica.
Trackball
Entrando en una serie de periféricos que seguramente hay personas que no han visto en la vida tenemos la Trackball, este tipo de «ratón» tiene un diseño muy peculiar que se basa en los modelos más antiguos. Utiliza el mismo sistema mecánico para generar un movimiento que manda señales y permite mover el cursor.
El punto más interesante que tiene este tipo de sistema está en que hay ratones específicos que lo incluyen como el Logitech MX Ergo S, pero en lugar de tener que desplazar el periférico sobre la mesa tan solo es necesario mover el Trackball que incorpora con el pulgar para posicionar el puntero del ratón en cada posición.
Eye Tracking
Para muchas personas puede parecer extraño que se pueda controlar un ordenador son ciertas partes del cuerpo, pero os aseguramos que el Eye Tracking no es el más extraño que vamos a ver. Este sistema detecta la posición de los ojos de un usuario mediante una cámara para situar el cursor en lugares distintos, permitiendo ofrecer un tiempo de reacción muy superior comparado con un ratón tradicional.
El mayor problema que presenta a su vez es la necesidad de mantener constantemente la vista en un punto exacto, además de que en términos generales tiene una precisión más baja ya que tiene un tamaño muy superior al de un puntero tradicional. Puede implementarse mediante una cámara tradicional y un software, pero también hay dispositivos especializados para ello.
Mouthpad
Hemos comentado que el Eye Tracking no era la forma más extraña de controlar un ordenador, y lo decíamos por el hecho de que existen sistemas como el Mouthpad. Este tipo de periférico está creado con el mismo objetivo original que el Eye Tracking, permitir que personas con grandes problemas de movilidad puedan utilizar distintas partes del cuerpo para utilizar un sistema informático.
Este tipo de periférico se inserta en la boca, utiliza la forma de un protector bucal con un sistema que cubre los dientes y parte del paladar, permitiendo desplazar la lengua por el aparato para actuar tal y como lo haría un Touchpad con los dedos.
Neuralink
Si el poder controlar un ordenador con la lengua os parecía un invento futurista, el Neuralink y otros sistemas similares os sorprenderán. Este tipo de sistemas se centran en permitir que un usuario pueda controlar un sistema informático mediante las ondas cerebrales. La explicación más simple está en comprender que el cerebro humano funciona por impulsos eléctricos, este aparato los capta e identifica qué objetivo tiene cada uno.
De esta forma quienes tienen este tipo de periférico son capaces de mandar directamente las señales que en otros periféricos necesitarían un agente externo (el sensor de un ratón, las teclas de un teclado y similares) directamente desde el cerebro. Aunque el mayor punto negativo que tiene actualmente es la necesidad de pasar por una cirugía cerebral invasiva para poder implementarlo, además de estar en fase experimental.