Cualquier usuario de una Nintendo Switch actual (en cualquiera de sus modelos) sabe que uno de los problemas más molestos y recurrentes es el conocido como drifting en sus joystick, un problema que consiste en que con el tiempo el mecanismo se va desgastando y los joystick empiezan a desviarse incluso cuando ni los estás tocando. Conscientes de ello, parece que en Nintendo se han puesto las pilas puesto que han patentado un nuevo sistema magnético para los joystick de sus consolas, algo que presumiblemente veremos ya en la próxima versión que conocemos por ahora como Switch 2.
Realmente, el drifting es un problema que afecta a prácticamente cualquier tipo de mando, sea de PC o de cualquier consola. Dado que los joystick tienen un mecanismo mecánico, existe rozamiento y el rozamiento implica necesariamente desgaste, por lo que al final todos acaban fallando con el paso del tiempo, sin excepción.
Adiós al drifting en los joystick de la Switch 2
Los usuarios que utilizan la Nintendo Switch con asiduidad seguro que son conocedores de este problema, y es por ello bastante frecuente el tener que enviar los Joy-con a reparación, tramitar su garantía o incluso tener que cambiarlos porque han dejado de funcionar adecuadamente. Nintendo siempre ha sido consciente de este problema y, hasta la fecha, nunca ha hecho nada para solucionarlo, aunque afortunadamente esto podría cambiar cuando la compañía lance su próxima consola portátil…
Por este motivo que os acabamos de contar, un sistema magnético podría ser una solución definitiva al problema del drifting, dado que igual que sucede con los ventiladores de levitación magnética se evita completamente el desgaste porque no existe contacto físico y por lo tanto no hay rozamiento.
Recientemente, Nintendo ha presentado varias patentes nuevas, una de las cuales implica un joystick que utiliza un sistema magnético para registrar el movimiento (bueno, realmente la patente habla incluso de un fluido, pero si fuera algo estanco como el aceite en los amortiguadores de un coche o una moto, se minimizaría también notablemente el rozamiento y el desgaste). Los detalles técnicos exactos todavía no están demasiado claros, pero algunos medios ya están definiendo este sistema como «Hall Effect», o efecto Hall.
Para explicar esto de una forma sencilla, os diremos que un joystick con efecto Hall utiliza campos magnéticos para detectar el movimiento sin que haya ningún contacto físico, y en resumidas cuentas lo que sucede es lo que os hemos explicado hace un momento: sin contacto físico no hay rozamiento y por lo tanto tampoco desgaste. Eso sí, debemos tener en cuenta que por el momento todavía no existe ningún mando original de consola que haya implementado esta tecnología y, por lo tanto, no podemos saber si es algo que de verdad funciona bien para evitar el drifting.
Algo que sí que parece bastante claro es que a pesar de la patente, Nintendo no va a lanzar una nueva versión de los Joy-con con esta tecnología, al menos no para su consola Switch actual. Es algo que obviamente se guardará para la próxima Super Switch, Switch 2 o como sea que al final la llamen, ya que de hecho sería un atractivo bastante notorio para incitar a su compra.