A todos nos gustaría tener una Steam Deck en nuestros manos, ya que jugar a nuestros juegos favoritos de Steam desde cualquier lugar es cuanto menos su atractivo. Sin embargo, y de cara a la segunda remesa, parece ser que han recortado la interfaz SSD NVMe de la Steam Deck a PCIe x2 en vez de x4. ¿A qué se debe esta decisión de Valve para su PC en forma de consola portátil? ¿Afectará al rendimiento o más bien se trata de una mejora encubierta?
Cuando analizamos el hardware de la Steam Deck, una de las cosas que comentamos era que el uso de un SSD NVMe del tipo M.2 2230 nos parecía una exageración. El motivo principal no es otro que tal velocidad de transferencia tiene unos consumos que son contraproducentes de cara a la batería del dispositivo y en especial de todo el diseño térmico. Pues bien, parece ser que Valve ha solucionado este problema y de una manera que nadie se esperaba.
Valve recorta el SSD de su Steam Deck a PCIe x2
Pues sí, ahora la velocidad de transferencia con el SSD NVMe, para los modelos que lo tengan, será la mitad en las nuevas remesas de la Steam Deck. Y esto no es un rumor o una elucubración por nuestra parte. Es oficial por parte de Valve, dado que han actualizado las especificaciones en la página web del producto.
Antes de que os echéis las manos, sobra la cabeza por el recorte, dejad que os digamos que en el caso del PC no hay ningún juego que aproveche las capacidades de las unidades de estado sólido a velocidades tan altas. La API DirectStorage no se ha usado en ningún juego que haya salido en Steam hasta el momento. Dicho de otra manera, los juegos no van a ver un recorte, un rendimiento por ello. Dado que la mayoría de ellos están pensados para funcionar sin problemas en un disco duro, el cual a su vez es más lento que un SSD SATA.
¿Por qué Valve habría hecho este recorte? La respuesta desde nuestro punto de vista se encuentra en esos almacenamientos de memoria flash en un chip que han aparecido en los últimos tiempos. Los cuales tienen un coste menor que los SSD NVMe, se pueden cablear vía PCIe de x2 en la Steam Deck y generan menos calor que un M.2 al estar diseñados para dispositivos móviles. No olvidemos de que Valve no recomienda cambiar la unidad de almacenamiento interna a sus usuarios. Por lo que no deja de ser un cambio para abaratar costes y reducir batería.
Una antesala a lo que vendrá después
No hay duda que el uso de las unidades de estado sólido marcaran un antes y un después en los videojuegos, pero es necesario que los juegos estén diseñados para ello. Especialmente a la hora de programar el volcado de datos a la RAM. Por el momento, y esto incluye las consolas, no hay ningún juego que aprovecha dicha tecnología. En PC por el hecho que las herramientas para implementarlo son de reciente aparición, en consolas por el hecho de que nos encontramos en un periodo intergeneracional donde los juegos se piensan para PS4 y Xbox One. Es decir, para disco duro
Cuando los juegos que requieran si o si un SSD NVMe para funcionar se encuentren en el mercado, entonces será cuando una Steam V2 tendrá sentido. Por el momento no nos podemos olvidar que el modelo base, que es el que han de tomar los desarrolladores como referencia, tiene una unidad eMMC de 64 GB, por no decir que muchos juegos se cargan desde MicroSD. Las cuales no dejan de ser interfaces un poco más rápidas que el disco magnético que se ha usado durante décadas en nuestros ordenadores.
¿Cómo puedo asegurarme de que mi modelo usa el viejo SSD?
La respuesta es simple, no puedes. Dado que no puedes ir a una tienda física y mirar con lupa el número de serie en la caja, ya que la distribución viene directamente desde Valve y son ellos los que deciden que remesa vas a recibir. La única manera sería abrir tu consola, pero en todo caso, dado que no vas a ver una pérdida de rendimiento en los juegos con el cambio, tampoco deberías preocuparte por ello. Eso si, nos gustaría saber si vamos a ver un aumento en la vida de la batería con los nuevos modelos o al menos un calentamiento interno menor, lo cual no dejan de ser también mejoras.