Era cuestión de tiempo que la biotecnología llegara al mundo de la informática en forma de productos que cualquier usuario pueda adquirir sin tener que desembolsar grandes cantidades de dinero, aunque esta todavía tiene mucho camino por recorrer si realmente quiere convertirse en una alternativa en el futuro, especialmente, si hablamos de almacenamiento de datos.
La empresa Biomemory con sede en Francia, acaba de lanzar su primer producto, 3 años después de su fundación en 2021. Estamos hablando de la Biomemory DNA Card, el primer dispositivo de esta compañía que llega al mercado y que permite almacenar datos en moléculas de ADN sintético.
No es la primera vez que se habla de utiliza ADN para almacenar información. En 2019, la Universidad de Washington y Microsoft mostraron un proyecto de cómo se puede almacenar información en ADN sintético. A finales de 2023, varios científicos chinos publicaron una investigación en la revista Nature acerca de cómo utilizar el ADN sintético para agilizar los procesos de computación.
Almacenar datos en ADN sintético
Volviendo al proyecto de Biomemory, la principal y, de momento, única gran ventaja que ofrece este sistema de almacenamiento que utiliza AND sintético es la duración, ya que tiene una vida útil de 150 años, aunque si se almacena en condiciones constante de temperatura y humedad, podría alargarse la duración unos cuantos años más.
Hasta aquí todo lo bueno que nos ofrece este sistema de almacenamiento ya que tiene más puntos negativos que positivos, al menos en este momento. El primer punto negativo que nos encontramos en la Biomemory DNA Card es la capacidad de almacenamiento, una capacidad de almacenamiento de 1 KB, es decir de 1.024 caracteres. Teniendo en cuenta las necesidades de almacenamiento actuales, nos cuesta muchísimo pensar cuál es el uso que se le puede dar a esta tarjeta de memoria.
El segundo punto negativo de esta tarjeta es que para almacenar los datos, necesita de como mínimo 8 horas. Toda la información se almacena de forma codificada y no es posible modificarla por parte del usuario sino que debemos enviarla nuevamente al fabricante para que realice una nueva codificación de los datos.
El tercer punto negativo, en base a la cantidad de espacio de almacenamiento que nos ofrece, es el precio. Según afirma Biomemory, la Biomemory DNA Card llegará al mercado a finales de 2024 y lo habrá a un precio de venta al público de 1.000 dólares e incluirá dos tarjetas. Si estamos interesados en este proyecto, podemos apuntarnos desde su página web pulsando en este enlace.
Este es el primer paso para utilizar ADN para almacenar información, ya que, según afirma la empresa, para 2026 tiene previsto lanza Biomemory Prime, un sistema de almacenamiento mediante ADN capaz de almacenar hasta 100 petabytes de información y que está diseñado para centros de datos (ahora imaginad el precio que tendrá).
Este formato de almacenamiento consume mucha menos energía que cualquier unidad de almacenamiento SSD del mercado por lo que si Biomemory Prime ve finalmente la luz, supondrá una importante reducción en el consumo de energía de los centros de datos, centros de datos que, en algunos casos, consumen más energía que varias ciudades enteras.
Lo que está claro es que esta tecnología todavía se encuentra dando sus primeros pasos y tiene mucho camino por recorrer aunque desde Biomemory parece que lo tienen todo encaminado si, según afirman, son capaces de ofrecer almacenamiento de hasta 100 petabytes para 2026.