Intel Project Athena: así mejorarán los diseños y la eficiencia de los portátiles gaming para 2020

Intel presenta oficialmente uno de sus proyectos más completos de cara a mejorar el entorno y ecosistema de los portátiles actuales mediante la presentación de lo que han llamado Intel Project Athena. Dicho proyecto basará su investigación en tres centros distintos, estando estos en: Taipei, Shanghai y Folsom (California) donde comenzarán a operar en junio de este año y terminarán su estudio en algún punto de 2020.
Intel se toma en serio al sector portátil: más de 500 miembros asistieron al evento
Es bien sabido que Intel tiene como segundo baluarte de mercado a los PCs portátiles, donde hasta ahora AMD no ha hecho casi mella y donde este panorama puede empezar a cambiar con las nuevas APU Ryzen 3000 y quizás con la inclusión de alguna CPU Matisse en notebook (ya hay rumores sueltos).
Por ello, parece que Intel quiere mover ficha rápidamente, donde Josh Newman, vicepresidente de Intel y gerente general de Segmentos de innovación, afirmó que los Open Labs que se incluyen dentro del Project Athena son un paso crítico para permitir una colaboración más extensa y cotidiana con el ecosistema de componentes, para así elevar continuamente el nivel de innovación en la plataforma.
¿Qué significa esto? Pues es sencillo, los de Swan quieren acelerar el desarrollo y crear una mayor eficiencia en el proceso de selección de componentes para sus clientes OEM, permitiendo un ciclo continuo de ajustes y pruebas basadas en cargas de trabajo reales y modelos de uso.
Es decir, quieren facilitar el trabajo de betatester y ofrecer componentes y configuraciones ya optimizadas para que sus clientes solo tengan que diseñar sus productos en base a unas especificaciones cerradas de antemano.
Esto lógicamente es muy interesante para sus clientes, no por nada fueron 500 de ellos, ya que debería aportar una mejor optimización y eficiencia a los productos que salgan en 2020 y al mismo tiempo recortar tiempo que podría ser empleado en otras áreas de I+D dentro de cada compañía.
La innovación de Intel pasa por comprender cómo las personas usan sus dispositivos
Los Open Labs se centrarán precisamente en eso: un enfoque innovador basado en la investigación de cómo usamos sus dispositivos, donde los científicos sociales tendrán un papel muy importante y donde serán pieza clave de unión con los ingenieros.
La intención de Intel es optimizar y ser eficiente, cada componente brinda una experiencia de usuario, como por ejemplo la batería, la potencia del procesador o la calidad de la pantalla. Si se consigue mejorar en cada apartado, la experiencia de usuario será más satisfactoria y por lo tanto se crearán mejores portátiles.
Para ello, los Open Labs trabajarán con los proveedores de hardware independientes (IHV), donde estos tendrán la oportunidad de enviar piezas para la evaluación de cumplimiento. Además, los OEM también pueden nominar a otros proveedores de componentes para su participación en el proyecto.
Cada uno de los tres laboratorios confirmados tendrá una serie de ingenieros experimentados que probarán, ajustarán y realizarán recomendaciones para mejorar las capacidades de los dispositivos, como potencia, rendimiento, audio, pantalla, SSD y más. Después de la evaluación, se pondrá a disposición de los OEM una lista de componentes optimizados para su consideración a lo largo de los ciclos de desarrollo del producto y donde en pocas semanas ya podrán empezar a enviar componentes a dichos laboratorios de Intel.