Cuando Microsoft dijo que orientaría Windows 10 para ser el «sistema operativo para gobernarnos a todos» (los dispositivos) iba en serio, y prueba de ello es que está convirtiendo, paulatinamente, la intefaz de Xbox One en la de Windows 10. A partir de Enero tendremos completa la transición.
Con la actualización que Microsoft lanzó al menú principal de Xbox One el pasado mes de Noviembre, se añadieron nuevas características a la misma, incluyendo integración con Twitter, soporte para Internet Explorer y varias mejoras de rendimiento en la interfaz. Estéticamente, también introdujeron la posibilidad de poner fondos de escritorio personalizados, lo que aunado a la disposición en cuadrados hace que cada vez se parezca más a la interfaz de Windows.
Microsoft pretende unificar todos los dispositivos bajo el abrazo de Windows 10, y no cabe duda de que la Xbox One no será una excepción. Lo que no nos esperábamos es que fuera el «conejillo de indias» para esta transición, y menos todavía que pudiéramos verlo tan pronto, ya que parece ser que a partir de Enero las Xbox One recibirán una nueva actualización que cambiará completamente el aspecto estético y funcional de la interfaz, convirtiendo al menos estéticamente el sistema operativo en Windows 10.