A través de un nuevo proyecto en Kickstarter, Peachy Printer pretende convertirse en la impresora (y escáner) 3D más barata del mercado, tanto por el coste de la impresora en sí como de los materiales empleados para sus impresiones. Con un precio de 100 dólares, ya lleva recaudados más de medio millón en su campaña, superando en más de 10 veces el objetivo inicial de 50.000 dólares.
Peachy Printer tiene como objetivo solucionar el mayor problema de las impresoras 3D del mercado actual: el precio. Se diferencia de las demás en que utiliza un proceso fotolitográfico para imprimir, lo que significa que en lugar de crear un objeto desde cero, lo que hace es que emplea un láser para modificar el material bruto de producción, el cual por cierto también es una novedad: resina. La elección de esta tecnología hace que el coste de fabricación de Peachy Printer sea mucho más reducido que las impresoras 3D «normales» que crean objetos partiendo de la nada y añadiendo material, ya que es mucho más sencillo que un láser simplemente se dedique a moldear un producto bruto de resina.
Otro aspecto destacado es que Peachy Printer también hace las veces de escáner 3D, por lo que es capaz de escanear objetos reales para convertirlos en modelos 3D y de esta manera poder imprimir copias después, o incluso sacar modelos 3D en el ordenador utilizando una cámara.
El proceso de impresión es el siguiente:
- Se escanea un objeto real o se crea un modelado en 3D directamente desde Blender en un ordenador.
- El software de Peachy Printer procesa el modelo, lo interpreta como ondas de sonido y lo lanza al dispositivo.
- Los espejos comienzan a moverse para lograr que la proyección del láser realice la forma deseada sobre la resina.
Otro aspecto destacado de Peachy Printer es que es un proyecto de código abierto, así que los desarrolladores pueden acceder y modificar lo que quieran, incluyendo el hardware.