Cuando compras un SSD para sustituir tu disco duro mecánico, o simplemente cuando quieres cambiar tu SSD por otro de mayor capacidad, es un fastidio tener que formatear el PC e instalarlo todo desde cero. Por suerte, hay varios métodos para no tener que hacerlo y que consisten en clonar el disco duro, así que a continuación vamos a enseñarte uno de ellos que, además, es gratuito.
La llegada de las unidades de estado sólido ha sido una de las mayores revoluciones en los últimos años en cuanto al almacenamiento en el PC. Su principal ventaja es su velocidad de acceso en comparación con un disco duro convencional. Ya sea en el tiempo de acceder a los datos como en la transferencia. Lo que hace que para ciertas aplicaciones el uso de un SSD signifique un aumento de rendimiento considerable y nos lleve algo más de tiempo completar la tarea que nos hemos propuesto.
Es por eso que la mejor forma de cambiar de uno a otro y que apenas pierdas tiempo en tener que instalarlo todo, desde el sistema operativo a las aplicaciones sin olvidarnos de todos los archivos y documentos personales, es realizar un clonado, que deja el nuevo SSD tal cual estaba el modelo anterior, por lo que al final de todo el proceso no dará la sensación de que hemos cambiado de componente y que todo sigue como hasta ahora.
Clonar un disco duro o SSD, ¿por hardware o software?
Por suerte o por desgracia, cuando no estamos clonando un disco duro por hardware tenemos que utilizar algún programa. Muchos de ellos tienen interfaz en Windows, pero al final muchas veces dan problemas o las funciones avanzadas solo son accesibles cuando compras la versión de pago completa. Para este tutorial vamos a buscar la manera más económica de hacerlo, con software gratuito, y en la que no necesitaremos nada adicional, salvo un pendrive USB.
En este tutorial encontrarás paso a paso lo que tienes que hacer para poder clonar un disco duro en otro (sea disco duro mecánico o SSD, sin importar su interfaz). Si sigues estos pasos al pie de la letra, en pocos minutos podrás sustituir tu vieja unidad por la nueva y te lo encontrarás todo tal cual lo tenías, sin tener que reinstalar nada ni realizar configuraciones adicionales. Por lo que te ahorraras una gran cantidad de tiempo a la hora de utilizar un nuevo PC o tras haber restaurado uno ya existente y haber cambiaod de una tecnología en desuso por otra que es la que se está imponiendo en el mercado.
Aunque nos vamos a centrar en una herramienta muy concreta, en el caso de que no te sientas cómoda con ella siempre podrás recurrir a otras que también son efectivas pero menos populares. Recuerda que aquéllas que se manejan a nivel del símbolo del sistema suelen ser más efectivas que las habituales de Windows que, según las versiones o modelos de hardware que vayas a utilizar, podría provocar pequeñas incompatbilidades. En nuestro caso, todo lo que os explicamos ha sido testado y funciona para la operación que os queremos mostrar.
Qué necesitas para clonar el disco duro a un SSD
Esto es todo lo que vamos a necesitar para el proceso de clonado, teniendo en cuenta que lo que pretendemos hacer es pasar los datos de un disco duro a un SSD, pero, obviamente, también sirve para hacerlo de un SSD a otro, como por ejemplo para pasar de uno con del tipo SATA a un M.2:
- El disco duro de origen, donde tienes todo instalado.
- El disco duro o SSD de destino, que debe estar vacío y con una capacidad igual o mayor que la del viejo.
- Un pendrive USB de 2 GB como mínimo formateado en formato exFAT o NTFS.
Es posible que estés buscando volcar un disco duro que originalmente era para un PC de escritorio en un portátil, en ese caso te recomendamos que compres uno de los adaptadores para discos duros internos y lo conectes ahí. Nos estamos refiriendo a las cajas que transforman los HDD internos en externos.
Asumimos que debes tener ambos discos (el nuevo y el viejo) conectados al PC, ya sea internamente por SATA, mediante un adaptador USB o con la interfaz M.2. Es indiferente para todo el proceso de clonado de información de una unidad a otra.
USB de arranque
De todas las aplicaciones disponibles actualmente en el mercado, tanto gratuitas como de pago, la aplicación que vamos a utilizar para clonar y comprobar que el proceso se ha realizado correctamente es Clonezilla, una aplicación de código abierto que podemos descargar desde su página web y posteriormente, crear una unidad de arranque con Rufus. De esta forma generamos una potente herramienta capaz de transferir bit a bit cada dato contenido en un viejo HDD hasta las celdas de almacenamiento de los SDD más modernos.
Si nuestros conocimientos de software son limitados, podemos utilizar la herramienta Tuxboot, una herramienta que se encargará de descargar la última versión de Clonezilla y de crear el dispositivo de arranque necesitamos para hacer el proceso. Tuxboot está disponible para su descarga a través de este enlace a su página web en versiones para Windows y Linux. Tanto Tuxboot como Clonezilla ocupan muy poco espacio por lo que el proceso apenas nos llevará algo menos de 5 minutos.
Si queremos utilizar Tuxboot para descargar y crear el medio USB con Clonezila, tan solo debemos seguir las instrucciones que os mostramos a continuación:
- Una vez que lo tengamos descargado lo ejecutamos (no hace falta instalar).
- En la parte superior seleccionamos en «On-Line distribution» clonezilla_live_stable y current, que son los parámetros que vienen por defecto.
- En la parte inferior, seleccionamos USB Drive en Type y en Drive seleccionamos la letra de la unidad donde tengamos el pendrive USB conectado (lógicamente deberemos conectarlo antes).
¿Por qué no puedo clonar un disco duro a SSD desde Windows?
Si te estás preguntado porque es necesario crear un USB para poder clonar un disco duro la respuesta es muy simple. Cuando queremos clonar un disco duro, queremos copiar todos los archivos que se encuentran en el disco duro, es decir, hacer una copia exacta.
La única forma de poder hacer este proceso es iniciando el equipo sin utilizar la unidad de almacenamiento principal, es decir, la que tiene la copia de Windows que queremos clonar, por eso es necesario utilizar un USB de arranque con un sistema operativo que incluye, en este caso Clonezilla, un programa para clonar un disco duro a SSD gratis.
Si arrancamos el PC con el sistema operativo que queremos clonar, la mayoría de los archivos que lo componen están bloqueados por el sistema y no tenemos la posibilidad de copiarlos ya que se encuentran abiertos y mucho menos borrarlos. Si copiamos el directorio Windows a otra unidad, lo único que estamos haciendo es copiar los archivos físicos de Windows, no todo el conjunto de aplicaciones y servicios que son necesarios para poder iniciar el equipo.
Si bien es cierto que en el mercado existes muchas aplicaciones que nos permite clonar discos duros con una interfaz de usuario similar a Windows, realmente no lo es. Estas aplicaciones son de pago y están orientadas a usuarios que quieren complicarse la vida utilizando aplicaciones con una interfaz de usuario menos intuitiva como es el caso de Clonezilla. Sin embargo, si tenemos paciencia y siguiendo los pasos que os mostramos a continuación, clonar el disco duro con sistema operativo es coser y cantar.
Cómo clonar un disco duro
No tenemos que hacer nada más, una vez que el proceso anterior termine, ya tendremos Clonezilla en el pendrive USB listo para funcionar. Por lo que ya tenemos la herramienta que vamos a utilizar para proceder al proceso de clonado de la información, el cual os explicamos a continuación y que os aconsejamos que sigáis al pie de la letra para evitar errores o problemas en la transferencia de todos los datos.
- Con el pendrive USB conectado, reiniciamos y pulsamos F10/F12 (depende de la placa base) para seleccionar el dispositivo de arranque, y lógicamente le indicamos al sistema que debe arrancar desde el pendrive con Clonezilla. Cuando cargue, nos saldrá el siguiente menú.
- Aquí debemos seleccionar la primera opción, Clonezilla live, y esperar a que cargue el sistema operativo.
- A continuación, aparecerá una nueva ventana en la que debemos seleccionar el idioma.
- Tras hacerlo y aceptar, saldrá otra pidiéndonos el mapa del teclado. En esta segunda pantalla no cambiamos nada y simplemente pulsamos la tecla ENTER del teclado para continuar.
- En la siguiente ventana que aparece, simplemente le decimos Iniciar Clonezilla.
- Ahora el software nos preguntará qué queremos hacer. Hay que seleccionar la segunda opción, que es clonar de dispositivo a dispositivo. La primera opción es para hacer una copia desde una imagen de disco, pero no es lo que queremos, ya que pretendemos clonar el disco duro.
- Ahora nos preguntará si queremos acceder a las opciones por defecto o usar el modo experto. Podemos decirle que inicie en el modo principiante, sin embargo, vamos a seleccionar el modo experto para ver qué opciones se nos ofrecen.
- En el siguiente paso, debemos seleccionar el disco de origen, donde tenemos actualmente nuestros datos. Hay que asegurarse de que seleccionamos el disco duro adecuado. En el paso que va justo después, nos pide el disco de destino, y ahí debemos seleccionar el disco duro nuevo o SSD.
- Ahora nos aparecerá la pantalla de opciones avanzadas (para ello hemos seleccionado el modo experto). Lo más recomendable es dejar los valores por defecto, o a lo sumo seleccionar la última opción (-v) para ver información detallada.
- Ya queda poco. Ahora el software nos pregunta si queremos hacer una comprobación de la copia cuando termine. Si seleccionamos que sí, tened en cuenta que el proceso tardará mucho más en completarse. A vuestra elección queda.
- Ahora nos preguntará sobre la tabla de particiones. Lo ideal aquí es marcar la opción de usar la misma tabla de particiones que el disco de origen para evitar corrupción de datos al hacer el clonado del disco.
- A continuación nos mostrará un resumen de todo lo que va a hacer, así como una advertencia porque los datos que tengamos en el disco duro de destino se perderán, ya que vamos a clonar el disco de origen encima. Hay que responder que sí, y para ello introducimos una «y» y pulsamos ENTER.
- Solo queda un paso. Ahora nos pregunta si queremos clonar también el gestor de arranque del disco origen al destino. De igual manera, pulsamos «y» y ENTER.
- Hecho esto, comenzará el clonado del disco duro y únicamente tendremos que esperar a que termine.
Una vez finalice, Clonezilla nos invitará a comprobar que el proceso de clonado se ha realizado correctamente, un proceso que nunca está de más hacer, ya que nos permitirá comprobar que todo el contenido se ha copiado de una unidad a otro, realizando el proceso correctamente y sin ningún tipo de fallo. De todos modos, es recomendable conservar la unidad de origen durante unos días por si echáramos en falta algún que otro archivo para poder recuperarlo.
¿Deben tener el mismo espacio el HDD y el SSD?
Es importante decir que Clonezilla nos permite clonar una unidad en otra, aunque los tamaños no sean iguales. Es decir, podemos copiar todo el contenido de un HDD de 1TB en un SSD de 2 o 4TB sin problemas, por lo que no solo tenemos la misma unidad de siempre, sino que le añadimos un extra de espacio por utilizar en el futuro.
Eso sí, ese proceso no es posible hacerlo si pasamos de un HDD de 2TB a un SSD de 1TB. Siempre que la unidad de destino sea mayor, el procedimiento nos va a funcionar sin que nos reporte errores antes del comienzo del clonado.
Cuando la unidad de origen es menor que la unidad de destino, como hemos comentado más arriba, no vamos a tener ningún problema en realizar el proceso. Sin embargo, una vez finalizado, cuando conectemos la unidad al equipo donde se encontraba en HDD, veremos el espacio total de la unidad SSD no es el mismo que tenía antes de realizar el proceso.
Si la unidad de destino tiene 2 TB de espacio, pero el disco duro de donde hemos clonado la información tiene 1 TB, Windows nos mostrará, después de realizar el proceso, que la capacidad total del SSD es de 1 TB, cuando en realidad son 2 TB. ¿Dónde está el espacio que falta? El espacio que falta de denomina espacio no asignado.
Este problema se presenta siempre que realizamos un proceso de clonado y cuando la unidad de origen no tiene el mismo tamaño que la unidad de destina. No es un problema de la aplicación que hemos utilizado, que en este caso ha sido Clonezilla. Durante el proceso de clonado, la aplicación clona las particiones dejando el resto del espacio disponible sin uso y que conocemos como espacio no asignado.
Para recuperar es espacio que se ha perdido, lo único que debemos hacer es acceder al Administrador de discos pulsando con el botón derecho del ratón en icono de Windows. Aquí se mostrará la unidad donde tenemos el disco duro clonado ocupando la mitad del espacio mientras que el resto está no asignado, tal y como podemos ver en la siguiente imagen.
Para recuperarlo, situamos el ratón encima y pulsamos el botón derecho del ratón para seleccionar la opción Crear nuevo volumen simple. En este momento, se creará una nueva unidad de almacenamiento en el equipo con ese espacio.
Otra opción, si solo queremos utilizar una unidad, es seleccionar la opción Extender volumen, para tener en una sola unidad, todo el espacio de almacenamiento disponible.
¿Cuánto tiempo se tarda?
El tiempo necesario para clonar un disco duro o unidad SSD, depende de varios factores, siendo el principal y el que más afecta a la velocidad, tanto el tipo de unidad de origen como de destino. Si estamos copiando un disco duro mecánico a un disco duro mecánico, el tiempo necesario para realizar la clonación varía dependiendo de la cantidad de GBs que se encuentren almacenados en su interior.
Si vamos a clonar un HDD a un SSD (el procedimiento más habitual) el tiempo será considerablemente más pequeño, ya que la velocidad de escritura de estas unidades es superior a las unidades disco duro mecánicos. Si ambas unidades son SSD, el tiempo se reducirá aun más, siendo este el método más rápido a la hora copiar unidades de almacenamiento, siempre y cuando el número de GBs a copiar siempre sea el mismo.
Lo importante aquí es no tener ninguna prisa ya que no queremos que se produzca ningún tipo de error durante el proceso de copiado, ya que, de lo contrario, podemos perder algún dato importante y vernos obligados a reiniciar el proceso de copiado desde cero.
Últimos pasos
Una vez que finalice nos instará a apagar el sistema y cambiar un disco duro por otro, y es lo que deberemos hacer: apagamos el PC, quitamos el disco duro viejo y ponemos el nuevo en su lugar, a ser posible conectado en el mismo puerto SATA para que la BIOS lo detecte a la primera. De esta manera, podremos arrancar el sistema con el disco nuevo y con exactamente lo mismo que teníamos en el viejo.
Esta técnica también es perfecta para todos aquellos usuarios que tengan varios PC clónicos, de manera que, si por ejemplo alguien tiene dos PC, puede configurar uno, clonar el dispositivo de almacenamiento de este e instalar la unidad clonada en el otro; así, podrá tener exactamente lo mismo guardado/instalado en los dos PC sin ningún tipo de problema tanto en lo que se refiere a apps, juegos, herramientas o lo que sea que necesitemos para trabajar o divertirnos.
Evidentemente, y ya visto el proceso, Clonezilla es solo uno de los muchos programas que podemos usar para estos menesteres, pero es quizás el más interesante por ser el menos intrusivo en el proceso y es relativamente sencillo. Como alternativas a este, por si te interesa investigarlas, tenemos desde Idrive hasta Acronis, pasando por opciones para Windows como Macrium Reflect Free.
En todos los casos confirma que esos programas –los que tú encuentras– tienes esta función de clonado que es la que nos interesa para hoy, y si no es el caso, te recomendamos no experimentar demasiado.
Cualquiera que escojamos es válida, pero hay que saber proceder con ellas en sus diferentes formas para evitarnos problemas con los datos que queremos mover y que, en caso de no tener un respaldo, podríamos provocar un desastre perdiéndolo todo. Así que máximo cuidado.
De última manera y de forma más rudimentaria… siempre podrás conectar los dos discos a un PC con suficiente espacio y pasar todo de uno al otro como si se tratase de pendrives o de datos que tienes en tu escritorio. O incluso subir a la nube todo en uno y conectar luego el otro para bajarlo. Son métodos más simples pero que también pueden resultar de mucha utilidad.