Hace solo unos meses, el especialista en sistemas de almacenamiento SanDisk anunció el lanzamiento de sus SSDs «de bolsillo» SanDisk Extreme 500, un pequeño dispositivo de almacenamiento masivo USB 3.0 basado en tecnología de dispositivo de estado sólido que proporciona una gran capacidad ya que está disponible en modelos de 120, 240 y 480 GB, elevado rendimiento gracias a los chips de memoria NAND Flash y la interfaz USB 3.0, y ocupando muy poco espacio.
Así pues, los SanDisk Extreme 500 son SSDs portátiles que caben en el bolsillo y que proporcionan hasta cuatro veces más rendimiento que un disco duro externo mecánico USB 3.0 convencional. Permiten por ello transferir archivos grandes en meros segundos, o muchos bibliotecas multimedia completas en minutos, gracias a que proporcionan una velocidad teórica de hasta 415 MB/s, una velocidad a la que los discos duros externos convencionales no pueden ni soñar alcanzar. Además, están diseñados para durar, ya que carecen de partes móviles que podrían estropearse por golpes o caidas, y están protegidos por una carcasa de plástico ABS de color negro muy resistente.
Si eres un usuario que necesita un dispositivo de almacenamiento externo con frecuencia, sin duda deberías plantearte el adquirir un SSD USB 3.0 como este SanDisk Extreme 500, pues además de ocupar muy poco espacio y, lógicamente, no necesitar mas que la interfaz USB 3.0 para funcionar, son muy resistentes, rápidos, no se calientan y además incluyen, en el caso de este dispositivo de SanDisk, herramientas para proteger los datos (gracias al software SanDisk Secure Access con cifrado AES de 128 bits). En definitiva, es un dispositivo todoterreno para llevar a cualquier parte y obtener una gran capacidad y el máximo rendimiento.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS.
Tomadas de la página web del fabricante.
Tenemos entre manos como podéis ver un dispositivo que apenas ocupa 75 x 75 x 10 mm, un tamaño inferior a, por ejemplo, un paquete de tabaco y que pesa tan solo 79 gramos sin contar el cable. Tiene la ventaja, como buen dispositivo de estado sólido, de tener una gran tolerancia a golpes y caídas (según las especificaciones de SanDisk soporta hasta 800G a 0.5 m/s, pero ya os digo yo que un dispositivo de este tipo soporta todas las caídas desde la mesa al suelo que sean sin inmutarse, como mucho se romperá el plástico protector de fuera pero no afectará al funcionamiento de la unidad).
ANÁLISIS EXTERNO.
SanDisk ha embalado el Extreme 500 en una caja de cartón blando que se abre en forma de libro y nos permite ver el dispositivo a través de una ventana de plástico transparente. Ya en la portada vemos una imagen del dispositivo, no obstante, y se incluye en ésta simplemente información sobre el fabricante, el modelo, y la capacidad del aparato, en este caso 240 GB.
En esta cara interna que se abre en forma de libro encontramos simplemente información relativa al diseño, si bien en la parte derecha hay un simple croquis que nos indica las partes del dispositivo que consisten, básicamente, en dónde está ubicado el puerto USB 3.0.
Es en la parte trasera y en uno de los laterales donde encontramos la información técnica, especificando en varios idiomas las características técnicas y el contenido del paquete. El otro lateral representa una mera imagen del lateral del dispositivo para que podamos ver sin sacarlo de la caja lo fino que es.
En el interior de este embalaje de cartón blando encontramos el SanDisk Extreme 500 perfectamente protegido por otra estructura de cartón blando. En su interior tan solo encontramos un breve manual de instrucciones (ya ves tú, conectar y a funcionar) y el cable USB 3.0 para conectarlo al equipo.
Aquí tenéis por fin el SanDisk Extreme 500. Realmente es muy ligero y pequeño, tamaño «bolsillo» literalmente. Tiene una estructura rugosa fabricada con plástico ABS, una inserción metálica en una de las esquinas para poder ponerlo, por ejemplo, en un llavero, y el puerto USB 3.0 protegido por una pieza de plástico blando en la esquina opuesta. En la zona superior tan solo encontramos el logotipo del fabricante en diagonal y color rojo, mientras que en la parte inferior vemos una inserción de goma anti deslizante que abarca todo el perímetro del dispositivo y una etiqueta identificativa.
Aquí podéis ver con detalle el puerto de conexión USB 3.0.
TESTEO.
Como prometía el fabricante, nada más conectar el dispositivo a un puerto USB 3.0 del ordenador, éste lo detecta y podemos comenzar a trabajar con él. De fábrica, SanDisk incluye el software SecureAccess que nos permitirá cifrar el contenido de la unidad ya en el almacenamiento del dispositivo.
Además, de fábrica viene formateado en formato exFAT, que nos permitirá utilizar el SSD externo tanto en dispositivos Windows como Mac y Linux.
Pruebas sintéticas
Aunque sea un dispositivo externo que se conecta a nuestro equipo mediante USB 3.0, hemos querido analizar este SanDisk Extreme 500 como si fuera un SSD, utilizando toda nuestra batería de benchmarks para tal efecto, de manera que podamos tener una imagen real de cuál es el rendimiento que nos ofrece.
Aida64
Mediante el test de lectura de Aida64 podemos saber a ciencia cierta cuáles son las tasas de lectura que nos proporciona el dispositivo de SanDisk bajo cualquier circunstancia, ya se con archivos pequeños (lo que «peor llevan» los SSDs) como archivos grandes (8 MB y más), así como su tiempo de acceso. Recordad con respecto a esto último que estamos ante un dispositivo conectado mediante USB 3.0 y que, por lo tanto, no podemos esperar tiempos de acceso tan ínfimos como con un SSD conectado directamente a un puerto SATA del equipo.
Como podéis ver, el SanDisk Extreme 500 nos entrega unas tasas de lectura que se aproximan a los 290 MB/s reales, bastante lejos de los 415 MB/s que prometía el fabricante pero aun así, el doble que cualquier disco duro mecánico. Además y contra todo pronóstico, el tiempo de acceso ha sido tan pequeño como 0.1 ms, igual que un SSD interno.
CrystalDisk Mark
Este benchmark nos va a mostrar la tasa de lectura y escritura del dispositivo también utilizando diferentes tipos de archivos. La tasa más fiable y que cumplirá en la mayoría de ocasiones es lógicamente la secuencial (primeros valores).
Aquí vemos unos datos de rendimiento de 320 MB/s de lectura, un poco mejor que con Aida64, y 139.9 MB/s de escritura. De nuevo por debajo de lo prometido por el fabricante, pero es que ya sabéis que el dato que proporcionan corresponde al máximo registrado y nunca dicen bajo qué benchmark (por eso utilizamos varios).
ATTO Disk Benchmark
En esta prueba vamos a ver el rendimiento de lectura y escritura que entrega la unidad bajo diferentes tipos de archivo, comenzando por archivos de solo 0.5 KB (512 bytes) hasta archivos de 8 MB.
Una vez más nos encontramos con que, a partir de archivos de 512 KB, la velocidad de lectura y escritura ronda los mismos datos que arrojó CrystalDisk Mark, es decir, en torno a 320 MB/s de lectura y 130 MB/s de escritura.
AS SSD Benchmark.
Esta prueba consta de tres partes. En la primera volvemos a tener una prueba parecida a CrystalDisk Mark, que nos proporciona información relativa a la velocidad de lectura y escritura secuencial y con archivos pequeños.
En esta segunda prueba lo que vemos es el tiempo que tarda en copiar desde el SSD del sistema hasta el SanDisk Extreme 500 y vice versa diferentes tipos de archivos. Por un lado una imagen ISO de gran volumen, por otro un programa con muchos archivos pequeños y por último lo que se tardaría en copiar un juego, con varios archivos grandes y muchos pequeños.
La última prueba consiste en ver cómo se lleva la unidad con archivos no comprimibles.
Como podéis ver, en todas las pruebas el SanDisk Extreme 500 nos ha entregado un rendimiento bastante parecido tanto en lectura como en escritura, y lamentablemente queda bastante lejos de lo especificado por el fabricante.
CONCLUSIÓN.
A decir verdad tengo que confesar que esperaba un rendimiento más elevado de este SanDisk Extreme 500, a pesar de que éste siga siendo más del doble de lo que un disco duro externo USB 3.0 normal podría llegar a entregarnos. Por ello tampoco quiero ofuscar con esto otras de las muchas virtudes que nos puede proporcionar un dispositivo de esta índole, y es que tendremos un disco duro de estado sólido externo de gran capacidad y que podemos llevar en cualquier parte cómodamente con un rendimiento muy elevado, con el añadido de que es compatible prácticamente con cualquier cosa que tenga un puerto USB 3.0, y que SanDisk nos proporciona de manera gratuita un software que permite cifrar el contenido.
PROS:
- Pequeño tamaño y muy ligero.
- Muy resistente.
- Elevada compatibilidad.
- No se calienta.
- Rendimiento muy decente.
CONTRAS:
- El rendimiento está por debajo de lo prometido por el fabricante.
- Precio (en este momento 139€ en tiendas online de España, aunque el precio que nos ha pasado el fabricante es de 121.99 euros).
Por todo esto, creemos que el SanDisk Extreme 500 se merece nuestro galardón de Oro y nuestras recomendaciones por su rendimiento y su diseño.