Estamos ante uno de los principales fabricantes de cajas del mundo, bueno y de fuentes de alimentación, memorias, discos SSD y un sin fin de hardware. Pero en este caso vamos a hablar de la Graphite 730T que es la caja de la última serie de cajas de Corsair. Sin duda muy parecida a su hermana mayor, la 760T, podemos decir que aporta un ahorro de entorno a 50€ a cambio de quitar algunos detalles que para algunos pueden ser importantes y para otros no lo serán tanto como es el caso del regulador de revoluciones de los ventiladores. Aunque ahora no venimos a hablar de su hermana mayor.
En cuanto a las especificaciones, antes de entrar a analizar en detalle esta nueva caja de Corsair vamos a acceder a su página web y ver, a grandes rasgos, que es lo que nos proporciona esta nueva caja.
ANÁLISIS EXTERNO
Comenzamos con el embalaje como es habitual y vemos que Corsair es fiel a su manera de dar formato al embalaje de sus torres con las cajas en color marrón en el que prima la sencillez por encima de todo. En cuanto a los motivos que adornan la caja continúa realizando un pequeño esquema de la caja dividida en sus diferentes partes como hace habitualmente y en el que priman las características de la caja en cuestión. A parte de ilustrarnos con un esquema de la caja nos trata, como hemos dicho, de explicar las principales características en diferentes idiomas. Podrá gustar o no, habrá fabricantes que adornen con más motivos y colores sus embalajes pero si algo está claro, es que Corsair prima la sencillez y la practicidad en aras de que el cliente sepa lo que está comprando.
La verdad es que la caja no llegó en un estado muy bueno como podéis observar, por eso muchas veces le damos más importancia a las protecciones con los que viene el paquete que al propio embalaje en sí. La gran mayoría de usuarios deshecha el embalaje una vez recibida la mercancía pero, lo que si es muy importante, es que el propio contenido venga en perfecto estado. Dos grandes planchas de foam flanquean los laterales de la caja para asegurar que irá bien protegida durante el transporte y para asegurar que viaja inmovilizada. Por si fuera poco la propia caja en sí iba protegida por una bolsa de fieltro negro. Corsair tiene mucha experiencia en el embalaje de sus productos y con esta caja hizo gala de ello. Perfecto.
Lo primero que hicimos al quitar las planchas y abrir la bolsa fue comprobar la integridad en la que se encontraba la caja. Como suponíamos llegó en un estado perfecto. Y comenzamos con el
EXTERIOR DE LA CAJA
Comenzamos con el análisis externo de la caja comprobando que después del transporte nos ha llegado en perfecto estado. Una de las cosas que hacen buenos los equipos de Corsair es su seriedad en el embalaje que permiten al usuario estar tranquilo a la hora de la recepción de su hardware.
Como siempre queremos conocer de primera mano las dimensiones de la caja, que aunque nos las muestra la web de Corsair cuando nos habla de sus especificaciones, pero no está de más comprobarlo de primera mano. Como podéis observar el ancho y el profundo de la caja son casi idénticos.
Comenzamos con los laterales de la caja en las que podemos ver que son totalmente iguales excepto por las rejillas que presenta el lateral donde va instalada la placa, como es obvio, con el fin de conseguir un flujo de aire óptimo de la caja. Obviamente en el lateral de la parte derecha de la caja no encontramos esas rejillas teniendo en cuenta que en esa zona no es necesario y la tapa es totalmente sólida. Quizás la única pega que le podamos poner al lateral de la izquierda es que las rejillas que ha hecho el fabricante no están preparadas para poder instalar un ventilador de 120 mm. Por lo demás podrá o no gustar su estética pero parece que está bien diseñada.
Aquí ya vemos la primera diferencia de la 730T con su hermana mayor, la 760T, que presenta el lateral de la izquierda prácticamente completo con una ventana para poder observar el interior de la caja. Pero vamos a centrarnos en la caja que nos ha cedido Corsair.
Pasamos a conocer un poco mejor la parte frontal de nuestra caja y de un vistazo rápido ya podemos ver que tiene los huecos preparados para hasta tres unidades ópticas de 5,25″. Un número más que de sobra teniendo en cuenta que este tipo de unidades está cada vez más en desuso. Desde ahí hacia abajo encontramos una rejilla antipolvo que deja ver por detrás los dos grandes ventiladores de 140 mm que Corsair incluye de serie. A destacar que la rejilla es muy fácil de extraer para poder limpiarla en cualquier momento, sin que nos dé ningún tipo de pereza.
Terminamos el análisis de la parte frontal de la caja haciendo un repaso a los conectores que presenta la caja. De izquierda a derecha, como podéis observar, las conexiones para auriculares, dos puertos USB 2.0, 2 Puertos USB 3.0 y los botones de reset y de power.
Pasamos a la parte trasera de la caja que no presenta nada especialmente destacable. La fuente de alimentación en la parte inferior, los nueve slots de expansión, los dos orificios para poder incorporar una refrigeración líquida y un tercer ventilador de 140 mm que Corsair incluye de serie.
Lo que no me ha parecido muy normal es que los dos orificios para refrigeración liquida no presenten las típicas arandelas de goma para proteger los tubos que pasan por esa zona y hayan optado por utilizar unos orificios troquelados para poder hacer el agujero solo si se necesita. No pongo en duda que sea una idea original y mucha gente no usa estos orificios pero no me parece una buena iniciativa pensando en aquellos que sí quieran hacer uso de dichos orificios y tengan que pasar los tubos sin ningún tipo de goma que proteja a los mismos poniéndolos en contacto directamente con la chapa.
Terminamos el análisis externo de la caja como siempre con una vista cenital y una vista de la parte inferior de la caja. La parte superior tiene posibilidad de instalar hasta tres ventiladores de 120 mm y la tapa es extraible siguiendo el modelo habitual de las cajas de hoy en día que optan por modos de fijar las tapas con un simple sistema de imanes. Sin duda es sencilla de quitar y poner pero también es verdad que es más susceptible de caerse por descuido. En este sentido habrá gente que defienda este sistema, de hecho es la tendencia de todos los fabricantes de cajas, y otros que prefieran el sistema tradicional de fijar la tapa con un tornillo en la parte trasera de la caja.
La parte inferior de la caja finalmente presenta dos grandes soportes que levantan la caja hasta 4 cm desde el suelo para mejorar la entrada de aire desde el suelo. Desde nuestro punto de vista, aunque ya lo hemos podido ver en alguna caja, nos parece una idea excelente. Para ello la caja se eleva, como os hemos dicho, sobre dos grandes soportes, que podéis ver en las imágenes de más abajo y consigue su estabilidad gracias a cuatro tacos de goma que consiguen su cometido de una manera perfecta. Además, en el lado de instalación de la PSU, Corsair ha decidido poner un filtro anti polvo extraible con gran facilidad simplemente tirando de él desde la parte trasera de la caja. Justo al lado de ese filtro, un hueco para un ventilador de 12 cm, aunque desde mi punto de vista sin mucha lógica, porque dicho hueco obligaría a quitar una de las jaulas de discos duros como veremos más adelante.
EL INTERIOR DE LA CAJA
Y por fin pasamos a analizar el interior de la caja para lo cual lo primero que hicimos es abrirla. La apertura nos recuerda mucho al estilo de otras cajas legendarias como la Cosmos S2 de Cooler Master. Como todo, tiene sus detractores y sus defensores. A mi particularmente, que paso el tiempo abriéndola y cerrándola, me parece una gran idea.
Tanto el sistema de apertura y cierre de los laterales como las bisagras que presentan dichos laterales son de una calidad espectacular, con lo que Corsair garantiza que aunque se haga un uso intensivo de las puertas va a ser muy complicado que el sistema falle.
Pero vamos a conocer un poco mejor el interior de nuestra caja. Y para ello que mejor que empezar con una vista general del interior antes de comenzar a analizar las diferentes partes.
Empezamos con la pequeña caja marrón de cartón que viene en la jaula de discos de la derecha. En ella encontramos los accesorios que trae consigo la 730T. Accesorios es decir algo, porque tan solo vienen unas pequeñas bolsas con los tornillos necesarios para poder montar nuestro PC y cuatro bridas de pequeño tamaño. Desde luego Corsair ha sido totalmente espartano en cuanto a detalles, pero al menos ha tenido el detalle de dejarnos los tornillos en color negro.
El gran hueco para poder manipular y quitar el disipador del procesador sin necesidad de quitar la placa (incluso con backplate) y los cinco grandes orificios con su correspondiente recubrimiento de goma son las señas de identidad de la bandeja de la placa. Aún recuerdo cuando adquirí la Corsair Obsidian 800D hace ya tiempo y vi por primera vez aquellos orificios hechos en la bandeja con su recubrimiento de goma. Para mi ha sido uno de los grandes avances en cuanto a la gestión de cables.
Una de las primeras ideas que se nos viene a la cabeza al ver el interior de esta caja es el gran espacio interior para poder trabajar sin problema e incluso poder montar una refrigeración líquida sin dificultades. Y haciendo gala de ese gran espacio interior encontramos la zona para la instalación de la fuente de alimentación donde podremos instalar sin dificultad cualquier fuente de alimentación incluso las más largas. Recordemos, como se puede observar en la foto, que la zona donde descansa la PSU dispone de un filtro anti polvo que es muy fácil de extraer tirando simplemente de él desde la parte trasera de la caja.
Si continuamos hacia arriba podemos ver las ranuras de expansión que llevan tornillos de gran tamaño para poder ser manipuladas con facilidad. Justo encima el ventilador de 140 mm del que os hablábamos cuando tratábamos el aspecto externo y que viene de serie en la caja.
Si seguimos el orden de las agujas del reloj en nuestro paseo por el interior de la caja podemos ver la parte superior de la caja que está enrejada y permite la instalación de hasta tres ventiladores de 140 mm. Y a la derecha justo debajo podemos encontrar la bandeja que da acceso a las tres bahías para unidades de 5,25″ en las que destaca el sistema ya usado en la mayor parte de las cajas actuales para poder anclar la unidad óptica sin necesidad de atornillarla al chasis.
Seguimos bajando y nos encontramos con los dos grandes ventiladores de 140 mm. Un gran espacio que no solo da sensación de amplitud, sino que nos hace prever que la refrigeración de la caja puede ser espectacular.
Terminamos con la parte de donde se ve la placa con las dos jaulas para discos de 3,5″ acompañadas de sus bandejas y preparadas tanto para discos de 2,5″ como de 3,5″ hasta un total de seis. Por supuesto, dichas bandejas son extraibles y darían opción a montar un radiador de 240 mm en el suelo de la caja sin ninguna dificultad.
Os dejamos algún detalle de las bandejas de las que os hablamos para esos discos aunque no tienen nada especial que destacar.
Pasamos con celeridad a la parte posterior de la caja
y podemos comprobar que el hueco para la gestión de cables no es espectacular pero sí más que de sobra para poder dejar los cables sin ninguna complicación a la hora de cerrar la caja.
Una de las originalidades de la caja se encuentra en el lateral posterior, que estamos viendo, y que deja ver hasta cuatro bahías para otras tantas unidades de 2,5″. Un sitio ideal para esconder, por ejemplo, nuestro disco de estado sólido.
EL MONTAJE
Si una palabra define a la instalación de un PC en esta caja es la palabra sencillez. Ya no solo por el amplio espacio que deja para trabajar, sino también por las facilidades que Corsair ha implementado en esta caja y hacen que, los rincones donde la mayor parte se hace difícil trabajar, no cueste nada hacerlo. Lo primero ha sido instalar la placa base. Para poner a prueba a la Corsair 730T, hemos querido usar una E-ATX como es la ASUS Maximus V Extreme, y el resultado ha sido el siguiente:
Si os fijáis, lo primero que hemos hecho para facilitarnos el trabajo ha sido quitar la jaula de discos de la izquierda. Tan sencillo como quitar cuatro tornillos desde la parte de abajo de la caja y la jaula sale sola. Como podéis observar, hemos tenido espacio por todas partes para poder trabajar sin necesidad de complicarnos la vida a la hora de meter las manos bien sea para atornillar la placa o bien sea conectar los principales cables de corriente.
Una de las cosas que más me ha gustado es el espacio que Corsair deja entre la parte superior de la caja (el techo) y la zona donde queda la parte posterior de la placa. Normalmente es una zona de difícil acceso y siempre se hace harto complicado el conectar el cable de potencia de la CPU. En este caso nuestra placa usa dos cables (el típico de ocho pines y otro de cuatro pines) pues bien, la facilidad con la que hemos podido meter la mano para poder conectarlos ha sido absoluta. Además, lo veremos cuando veamos la parte posterior de la caja, Corsair ha hecho tres pequeñas aberturas de forma estratégica para poder pasar estos cables. Simplemente genial.
Incluso puesta la placa, la fuente ha sido muy sencilla de instalar. Normalmente suelo poner primero la fuente pero con esta caja ha probado a hacerlo al revés y no he encontrado ninguna dificultad. También es cierto que la Corsair AX850 que he puesto tiene un tamaño bastante comedido y no se caracteriza precisamente por su tamaño grande. Aún así, podéis observar el tamaño que hay entre la fuente y la segunda jaula de discos para poder colocar los cables cuando la fuente ya esta montada. Si os fijáis, una vez que hemos quitado la jaula de la izquierda tenemos espacio para instalar en el suelo de la caja un ventilador de 120 mm.
Cierto es que de momento no hemos querido instalar nada más porque el plato fuerte de la refrigeración de la CPU será objeto de un detallado análisis que podréis ver dentro de muy poco tiempo.
Pasamos rapidamente a la parte posterior de la caja para ver como ha quedado la gestión de cable y para ver la sencillez de la instalación de nuestro disco SSD.
Simplemente espectacular. Los cables más gordos de la instalación entran y permiten cerrar la caja con una facilidad muy grande. De la instalación de nuestro disco de estado sólido ya ni hablamos. Tan solo se ha hecho necesario empujar el mismo hacia adentro dentro de la ranura y ha entrado solo. Además al final de su recorrido con un pequeño «clack» hemos podido comprobar que ha quedado perfectamente anclado. Además los conectores quedan en una zona perfecta para llegar con los cables.
Pero ¿Y que ocurre con la abertura que ha hecho Corsair en la caja para trabajar con un posible cambio de disipador futuro sin necesidad de quitar la placa? bien es cierto que ya la gran mayor parte de las cajas facilita «teóricamente» el acceso al disipador en el 90% de las ocasiones pero no es menos cierto que en muchas ocasiones la abertura está tan mal hecha que no coincide dicha abertura con los cuatro agujeros de la placa para instalar el backplate del disipador. ¿Qué ocurre con la Corsair 730t? Aquí tenemos el resultado. Hemos quitado de en medio los cables con una brida y el resultado es el siguiente:
Perfecto. Los cuatro agujeros de la placa están totalmente a nuestro alcance para realizar un cambio de backplate. Si os fijáis en la parte superior de la foto de arriba podéis observar los tres agujeros que Corsair ha hecho para poder pasar cables como son los de alimentación de la CPU y otros cables como los de algún ventilador de la zona superior. Muy bien pensado. En la foto de abajo lo podéis ver más claro:
El siguiente paso sería instalar el disipador del procesador, pero eso es otra historia porque el próximo análisis de Corsair se encargará de eso.
CONCLUSIÓN
Estamos sin duda ante una caja con una gran calidad de materiales, y que a simple vista parece una caja más. Sin duda, una de las principales características de Corsair es su austeridad a la hora de diseñar cajas. Sin duda es un fabricante que huye de las estridencias propias de otros fabricantes más «osados» y apuesta por diseños sencillos pero elegantes. La verdad es que la línea Corsair es una línea que tiene sus detractores amantes de dotar a sus PCs de un toque original pero también tiene sus defensores, como es mi caso, para los cuales nuestro PC es parte de nuestra casa y como tal transmite nuestra forma de ser.
Otra cosa es la evolución. Cuando hablamos de evoluciones dentro del mundo de las cajas lo primero que nos viene a la cabeza es la dificultad en la innovación pues podríamos decir que todo (o casi todo) ya está inventado. Muchos fabricantes, por lo general, se limitan a realizar cambios estéticos a los cuales les llaman evolución. No es el caso de Corsair. Con esta caja, y sin querer hacer cambios espectaculares han conseguido dotar a esta serie de un sin fin de ventajas que han significado un paso más en la facilidad de montaje y en la sencillez a la hora de montar un PC. Para mi, estas evoluciones es lo que buscamos la gran mayoría de los usuarios finales y en ese punto sí creo que Corsair ha conseguido evolucionar su producto. Una caja con un precio de en torno a 150€ consigue aunar sencillez, estética, silencio y refrigeración todo en uno.
PROS
- Gran amplitud interior que dota a la caja de una gran sencillez en el montaje
- Gran gestión de cables
- Sistema de puertas con bisagra muy cómodas
- Un buen número de filtros anti polvo muy fáciles de extraer para su limpieza
- Tres ventiladores de 140 mm de serie
- Calidad en los materiales y un diseño sobrio pero elegante
- Sistema de cierre de las bahías de 5,25″ sin tornillos
CONTRAS
- Quizás el sistema de puertas con bisagra puede ser incómodo cuando no se tiene espacio en los laterales