Un año más la marca líder en periféricos gaming en España, Ozone Gaming, participó en la feria más importante del mundo del hardware informático, el Computex de Taipei 2016, mostrando por primera vez al mundo su nueva generación de productos Gaming en su propia suite en el Hotel Grand Hyatt donde los asistentes al evento pudieron ser los primeros en conocer y experimentar en exclusiva los nuevos periféricos de la marca. En el día de hoy os presentamos nuestro análisis de uno de los productos estrella que Ozone Gaming enseñó en el Computex, los auriculares 5.1 Ozone Rage Z90.
Los nuevos Rage Z90 5.1 Surround Pro Gaming Headsets con tecnología de sonido envolvente 5.1 real y con un diseño ligero gracias a sus auriculares con espuma viscoelástica con memoria, son una combinación de comodidad e inmersión perfecta para las intensas sesiones de juego de las que disfrutan todos los Gamers, profesionales o no. Dotados con una diadema reforzada con metal ligero, los Rage Z90 incluyen, además, un micrófono desmontable con tecnología de notificación de silenciado por iluminación y controlador de audio en línea con control de volumen independiente y base magnética proporcionar una comodidad excepcional durante horas ilimitadas de juego y una experiencia de sonido totalmente personalizable.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS.
Tomadas de la web del fabricante.
Vamos a matizar algunas de las cosas mostradas en las características, empezando por el peso pues puede parecer que esos 543 gramos nos van a terminar destrozando el cuello por el peso. Los auriculares no pesan tanto, esos 543 gramos corresponden a auriculares incluyendo la consola de control y el cable. En sí, el dispositivo repercute unos 350 gramos sobre nuestra cabeza, quedando en la media de lo que suelen pesar auriculares de éste tamaño.
También hay que mencionar que aunque Ozone dice que el sonido es 5.1 real, jamás podrá serlo cuando los auriculares tienen conector USB. El sistema funciona de la siguiente manera: en cada una de las orejeras, los Rage Z90 incorporan cuatro altavoces, tres de ellos con imanes de neodimio de 40 mm de diámetro cada uno, y un subwoofer pasivo para crear el efecto de sonido frontal, lateral y trasero. Después, mediante el software, se crea el efecto de sonido posicional. Es en su consola de control en la que los auriculares integran la tarjeta de sonido del sistema, que como hemos indicado se conecta por USB a nuestro ordenador. Así pues, digamos que en teoría sí que tienen sonido 5.1 real, pero necesitan el driver para convertir el sonido (es decir, no tienen los habituales tres minijacks de los sistemas de sonido 5.1 real).
Además, incorporan un micrófono de quita y pon con condensador omnidireccional y reducción activa de ruido, iluminación LED en las orejeras e incluso en el micro, en éste caso para indicarnos cuándo lo tenemos activo (luz encendida) y cuando silenciado (luz apagada). Una novedad es que Ozone ha integrado controles de volumen independientes para el sonido frontal, lateral, trasero y de bajos (subwoofer) en la consola de control incorporada en el cable. Más tarde la vemos en detalle.
ANÁLISIS EXTERNO.
Ozone ha utilizado una caja de grandes dimensiones y peso para proteger la integridad de los Rage Z90. En la cubierta exterior podemos ver una imagen del dispositivo con sus principales características resumidas en forma de icono en la forma exterior, dejando para la parte trasera un completo croquis resumiendo las principales facultades del aparato. En los laterales de ésta cubierta podemos ver imágenes de los Z90.
Tras retirar la cubierta nos encontramos con una caja de cartón negro muy rígido que asegura que aunque el paquete se golpee durante el transporte, el producto no sufrirá ningún daño.
Aquí tenéis los Ozone Rage Z90 todavía en su caja, enseñándonos tanto los auriculares en sí como la consola de control.
Vamos a ver como siempre primero los accesorios. En éste caso el fabricante incluye una guía de uso rápido, el micrófono de quita y pon, y una base magnética sobre la que podremos colocar la consola de control sobre la mesa para tenerla siempre a mano.
El micrófono tiene la varilla flexible, con una terminación en plástico blanco que se iluminará cuando esté encendido. Termina en un conector minijack de 3.5 mm de dos polos con un tope de plástico para asegurar que no se mueva o se caiga cuando esté conectado (es decir, para enchufar el micrófono hay que apretar el minijack y luego girar para que quede encajado).
Vamos ahora sí a ver los auriculares. Tienen un tamaño bastante considerable, y ya a primera vista nos da la impresión de tener una excelente calidad de construcción.
En los laterales Ozone ha dispuesto una rejilla metálica que ayudará a que entre aire para crear el efecto del subwoofer pasivo. La estructura es de plástico con metal por dentro, haciendo que sean bastante rígidos, si bien es ligeramente endeble por lo que permitirá un pequeño margen de maniobra para adaptarse a los diferentes tipos de cabeza.
Aquí podéis ver más de cerca ésta rejilla lateral.
Las orejeras tienen una generosa cantidad de espuma viscoelástica bajo una capa de piel sintética, asegurando así una gran comodidad sin importar si tenemos orejas grandes, pequeñas o medianas.
En el interior el fabricante ha dispuesto una capa de tela transpirable entre los altavoces del dispositivo y donde tendremos la oreja, lo que combinado con la rejilla exterior permitirá cierta transpiración a pesar de tener un diseño circumaural abierto.
En la zona superior el fabricante ha dispuesto dos piezas almohadilladas para reducir la sensación de peso sobre la cabeza, maximizando así la sensación de comodidad.
Por la parte superior tenemos una pieza de plástico con efecto soft-touch muy agradable al tacto.
Una pieza metálica en los laterales nos indica la zona de extensión de los auriculares.
Lógicamente se pueden hacer más grandes o más pequeños para poder adaptarlos al tamaño de nuestra cabeza.
En general, Ozone ha construido los Rage Z90 con una gran robustez y buena calidad de materiales. Se nota que el diseño exterior ha sido cuidado con mimo.
Vamos a ver ahora la parte del cable. Éste sale de una de las orejeras con una pieza de goma endeble para asegurar que el cable no sufra aunque nos movamos mucho.
En ésta misma orejera tenemos el minijack de 3.5mm hembra para insertar el micrófono.
El cable no está mallado, mide casi 3 metros de longitud en total, y sí que cuenta con un filtro EMI unos centímetros antes del conector USB 2.0 bañado en oro para asegurar que no habrá interferencias en el sonido causadas por electricidad estática.
En el cable tenemos la consola de control que como decíamos al principio también integra la tarjeta de sonido del dispositivo. En ésta nos encontramos en un lado con una rueda analógica para controlar el volumen, con el botón de silenciado de los auriculares en el centro. A la derecha de ésta, tenemos una tapa transparente bajo la que se encuentran tres controles deslizantes para poder modificar la intensidad de sonido de los diferentes altavoces internos de los Z90.
En un lateral tenemos un botón para silenciar el micrófono rápidamente.
Y en el lateral contrario encontramos un interruptor que permite encender y apagar la iluminación del aparato.
Hablando de iluminación, en la propia consola hay dispuesto un LED de color rojo que nos indica si están o no funcionando los auriculares.
En cuanto los conectamos a un puerto USB del PC, los auriculares se iluminan tanto en los seis puntos de cada orejera mas el logo de Ozone, como en el micrófono si lo tenemos sin silenciar.
Visto el dispositivo, es hora de ponerlo a prueba, ¿no?
TESTEO.
Los Ozone Rage 90 tienen, como decíamos al principio, un software propio que es necesario descargar de la web del fabricante e instalar si queremos poder disfrutar de todo su potencial.
El software.
El fabricante ha creado un software que aunque aparece bastante recargado con todas sus características en solo tres pestañas, es bastante intuitivo y sencillo de utilizar. En la primera pestaña, llamada «Main» (principal), tenemos unas barras deslizantes que nos permitirán controlar el volumen de los diferentes altavoces internos, de manera independiente igual que desde la consola de control física, pero pudiendo hacerlo de manera individual en el auricular izquierdo y derecho.
También permite seleccionar si queremos que los auriculares funcionen en modo estéreo (2 canales), cuadrafónico (4 canales) o envolvente 5.1 (6 canales), así como seleccionar la tasa de muestreo tanto de auriculares como de micrófono.
La siguiente pestaña consiste en un ecualizador que viene ya con 12 perfiles preconfigurados y que nos permite crear los nuestros propios.
En la tercera y última pestaña del software podemos controlar las funciones avanzadas de los auriculares, tales como:
- Dynamic Bass: incrementa la capacidad de reproducir bajos con el subwoofer pasivo, pudiendo incluso seleccionar el nivel con barra deslizante.
- Cut-off frequency: incrementa o reduce el sonido posicional virtual.
- Audo enhance: mejora la calidad de sonido cuando utilizamos audio comprimido (mp3 por ejemplo).
- SL-N: normaliza el nivel de sonido. Ésto es muy útil cuando estamos escuchando por ejemplo una película con el audio descompensado (sonido ambiente demasiado alto y diálogos demasiado bajos). Permite además hacerlo de manera dinámica seleccionando nivel alto (música) y bajo (diálogos).
- Incoming voice definition: el software detecta programas de voz como Skype o TeamSpeak e incrementa la definición de la voz de nuestros interlocutores. También permite reducir el ruido ambiente.
- Voice FX: por último nos permite cambiar nuestra voz, creando cuatro efectos (Monstruo, masculino, femenino y dibujos animados).
Ergonomía.
Tal y como ya notábamos cuando estábamos viendo los auriculares por fuera, los Rage Z90 nos han resultado un tanto rígidos. No habría estado de más haber incorporado la posibilidad de girar ligeramente las orejeras de manera horizontal además de vertical, pues cuanto más abierta esté la diadema más presionan contra la cara. Dejando ésto de lado, tras unos minutos con los auriculares puestos ya prácticamente te olvidas de que los llevas puestos, resultan bastante cómodos en uso.
Muchas veces he dicho que no me gusta tener una consola de control en el cable, pero gracias a que Ozone incorpora una base magnética sobre la que colocar la consola, los controles quedan muy a mano encima de la mesa, por lo que ésto no es para nada una pega sino todo lo contrario. Es infinitamente mejor que el habitual control en medio del cable que a veces cuesta encontrar.
Pruebas en juegos.
Como auriculares Gaming que son, es de obligación probarlos en juegos. En éste caso hemos probado los Z90 en dos juegos diferentes: League of Legends, que tiene sonido nativo estéreo, y Star Wars: Battlefront que cuenta con su propio motor de audio envolvente. En el primer caso los Z90 han entregado un sonido correcto, tanto en modo 2.1 como 5.1 (en LOL no hay sonido posicional). En el Battlefront por contra el sonido envolvente de los Z90 ha hecho su trabajo de manera satisfactoria, permitiéndonos escuchar a enemigos que se nos acercan por detrás gracias al audio posicional. El posicionamiento de sonido es bastante exacto, dándonos una gran ventaja en un juego de este tipo.
Pruebas en música y películas.
Generalmente la música siempre es estéreo y se desaconseja tener sonido envolvente activado pues puede causar distorsión. Tengo varias cosas que decir en éste apartado: por una parte se nota bastante la capacidad de los Rage Z90 de mejorar la calidad del audio comprimido, y por otra echo bastante de menos el poder activar y desactivar el sonido estéreo / envolvente desde la consola de control, pues «fastidia» bastante tener que abrir el software para hacerlo cada vez que queramos cambiar.
En películas la cosa cambia. Como siempre hemos utilizado la película The Amazing Spiderman en blu-ray, película con sonido 5.1 real. En éste caso los Z90 se han comportado de manera espectacular, haciendo que los efectos envolventes de la película nos hicieran girar la cabeza igual que en los juegos cuando parece que algo nos va a atropellar desde detrás. Muy bien en éste apartado.
CONCLUSIÓN.
Si no me equivoco, éstos Rage Z90 son los primeros auriculares de Ozone con sonido 5.1 real, y el resultado ha sido excelente. No solo tienen una calidad de construcción y de materiales sobresaliente, sino que el sonido que entregan es de gran calidad y con un audio posicional bastante exacto. Además, el tener una consola de control tan completa y que permite colocarla sobre la mesa hace que nos podamos olvidar de los auriculares durante las sesiones de juego, siempre una ventaja.
La única contra que tengo que mencionar es que no me han resultado cómodos desde el principio. Sí que son bastante cómodos gracias a esas almohadillas viscoelásticas que incorpora, y he de decir que a pesar de utilizar piel sintética en su construcción no hacen sudar las orejas, pero echo de menos algo de holgura horizontal para adaptarse mejor a la forma de la cabeza.
PROS:
- Excelente calidad de sonido.
- Audio posicional.
- Software completo y fácil de utilizar.
- Estupenda calidad de construcción y elección de materiales.
- Embalaje sobresaliente.
- Micrófono de quita y pon y con indicador luminiso de funcionamiento.
- Consola de control completa con soporte magnético para colocar sobre la mesa.
CONTRAS:
- La ergonomía mejoraría mucho con algo de holgura horizontal.
Por todo esto, los Ozone Rage Z90 se merecen tanto nuestro galardón de Oro como nuestras recomendaciones tanto por su rendimiento como por su relación calidad / precio.