Hace un año desde que Pat Gelsinger volvió a la que fue la empresa de su vida, Intel. Tras estos largos días y tras coger a un gigante moribundo que estaba siendo dominado por su rival, el ahora CEO de la maquinaria azul ha lanzado un comunicado felicitando este 2022, repasando entre tanto muchos puntos clave y lanzando un mensaje muy claro: están de nuevo por delante y no volverán a estar nunca más detrás. ¿Optimismo futuro y desmesurado o realidad?
No se le tiene que quitar mérito a Bob Swan sobre lo que Intel ha lanzado al mercado. Normalmente atribuimos los logros al actual CEO que está en vigor, pero tampoco hay que olvidar que las estrategias comerciales, de productos y sobre todo arquitecturas y procesos litográficos son cosa de años vista, y aquí hay que felicitar a Intel. No obstante, ¿conseguirá estar por delante siempre?
Intel: Alder Lake está por delante, AMD «en el retrovisor»
El símil usado por Pat Gelsinger hace referencia muy acertadamente al mundo de la automoción, el cual está en claro auge ahora con los motores eléctricos y la necesidad de nuevos y mejorados sistemas de gestión, control y distribución de la electrónica así como del infoentretenimiento. Lo declarado es tan claro como tajante:
«Alder Lake. De repente… ¡Boom! Estamos de vuelta. AMD se ha quedado en el espejo retrovisor para los clientes del mercado de consumo y nunca más estarán en el parabrisas; simplemente estamos liderando el mercado«.
Es verdad que Intel está ahora mismo por delante y por bastante con las CPU Alder Lake, pero también es cierto que en HEDT está totalmente ausente y ha dejado campar a sus anchas a los Threadripper, mientras que en servidores se espera como agua de mayo a Sapphire Rapids para ser siquiera una opción real en el mercado.
¿Puede volver Intel a ser la empresa dominante?
Si algo ha caracterizado los batacazos de Intel es precisamente su reacción agresiva frente a AMD. Esto lo estamos viviendo en directo ahora mismo con Alder Lake y si miramos los roadmaps sin duda lo vamos a ver en breve con Raptor Lake y la cantidad de procesadores/arquitecturas que van a lanzar al mercado en apenas 3 años vista.
La gama baja de Alder Lake es el primer paso, la alta domina sin duda y es la punta de lanza, pero es abajo donde Intel está haciendo mucho daño a AMD. Sus productos no son simplemente más rápidos, es que son más baratos, integran muchas mejoras interesantes y cuentan con el factor tiempo, ya que AMD no va a presentar nada hasta Zen 4 por lo que las ventas las está devorando el gigante azul.
Cuando los de Lisa Su lancen sus nuevos procesadores Intel ya tiene preparada la respuesta con Raptor Lake y es más que probable que sean, al menos, competitivos si no estén por encima. Eso por no hablar de la estrategia IDM 2.0 que ya vimos en su momento y que en silencio está arrastrando clientes desde Samsung y TSMC.
Un plan global que parece ser un golpe maestro al mercado en casi todos sus puntos y que el año que viene será consumado. Intel tiene todo este 2022 para demostrar que, efectivamente, no volverá a estar por detrás de AMD.