Hace un par de años se anunciaba que NVIDIA quería adquirir la empresa ARM por 40.000 millones de dólares. Antes de ese momento, parece que a nadie le importaba ARM, pero luego salieron muchas empresas a posicionarse en contra. Tras frustrarse la operación, ahora se plantean entrar como principal inversor.
Debes saber que ARM no produce procesadores, vamos, que no fabrica nada. Entonces, ¿por qué vale tantísimo dinero? La empresa diseña procesadores mayormente, aunque también diseña tarjetas gráficas, controladoras y otras soluciones. Posteriormente, «alquila» estas licencias a terceras empresas que pueden personalizar el diseño.
Tienes que saber que ARM tiene como clientes a Qualcomm, Samsung, Apple y otras muchísimas empresas. Hablamos de un negocio brutal sin necesidad de fabricar absolutamente nada.
Nuevo capítulo en una historia eterna
La idea de NVIDIA era entrar en la compañía por dos motivos: poder desarrollar servidores propios sin necesidad de soluciones de Intel y AMD; y, por otro lado, potenciar el punto débil de ARM, que son sus tarjetas gráficas.
Reino Unido tumbó la operación de NVIDIA al considerar que podría suponer el inicio de un monopolio y podría perjudicar a la industria. Al no permitirse la operación, ya no tenía sentido seguir en el proceso, ya que el resto de reguladores antimonopolio tumbarían la operación.
Tras el revés, SoftBank, banco inversor propietario de ARM, ha lanzado una oferta inicial pública (IPO, por sus siglas en inglés). Han invitado a NVIDIA a ser inversores ancla de esta operación. Básicamente, vendrían a ser un inversor mayoritario, quedándose con una gran participación.
Financial Times dice que han invitado desde SoftBank a NVIDIA a formar parte activa del negocio, quedando como principales inversores de la IPO. Al parecer, la oferta inicial de la compañía se mueve en los 35.000-40.000 millones de dólares. Cifra que inicialmente iba a pagar la compañía por hacerse con la propiedad.
Pero SoftBank lo considera ridículo y estaría pidiendo una inversión de entre 70.000-80.000 millones de dólares. Supone el doble de la inversión inicial prevista por parte de NVIDIA. Lo más probable es que entren como principales inversores de ARM.
¿Por qué NVIDIA insiste en esta operación?
Uno de los principales motivos es que la compañía quiere desarrollar sus propios servidores. Actualmente, las soluciones profesionales para Data Centers, IA y Deep Learning depende de procesadores Intel y AMD. La compañía considera estos procesadores como «basura» al ser altamente ineficientes energéticamente.
La idea sería desarrollar procesadores propios para sus servidores basados en la arquitectura ARM. Esto permitiría hacer procesadores a medida de sus necesidades y mejorar mucho la eficiencia.
Una de las promesas de NVIDIA cuando dijo querer adquirir ARM, era potenciar las tarjetas gráficas Mali que acompañan a sus procesadores. Es el gran punto débil de las soluciones de la compañía. Prometieron integrar sus tecnologías y sus soluciones, incluso, llevar el Ray Tracing y DLSS a los smartphones.
Destacar que ARM necesita de la inversión de NVIDIA, pero esta segunda necesita más a la empresa británica. Los planes de la compañía de Jensen Huang pasan por abandonar a Intel de una vez por todas, siguiendo los pasos de Apple y Oracle.
Veremos qué pasa, pero queda caso NVIDIA-ARM para rato.