Hoy en día y pese a que la tecnología aumenta el rendimiento y disminuye el consumo seguimos viendo memorias RAM con disipador, mientras que en servidores normalmente van «desnudas», lo que levanta de nuevo el debate al tener ya en el mercado las DDR5. ¿Son necesarios o recomendables los disipadores de memoria RAM para estas en pleno 2022?
Pues es un tema casi cíclico que va tomando matices dependiendo de la tecnología que implementen las DRAM y el JEDEC, pero de nuevo salta a la palestra porque los cambios con DDR5 son más que notables realmente. Lógicamente hacer alusión a un disipador implica que tenemos que hablar de calor, así que vamos a ello.
El consumo de las memorias y el calor generado
Con DDR4 todo iba más o menos en la línea de sus predecesoras, de manera que a día de hoy podemos encontrar módulos a 2.133 MHz con voltajes bajos y sin disipador sin que ello suponga un problema como tal, pero… Con DDR5 no será así y DDR6 es una incógnita todavía.
DDR4 mantenía el controlador y regulador de voltaje de la misma en la placa base, lo cual es un incordio desde el punto de vista electrónico por las fugas, pérdidas y gestión del voltaje y el amperaje, así como su estabilidad.
La ventaja es que los módulos solo tenían que disipar el calor que generan sus DRAM y estas dependiendo de la velocidad y el voltaje cogerían más temperatura o menos, por lo que los módulos de alto rendimiento se ven obligados a usar disipación pasiva o incluso activa en ciertos casos, mientras que otros no necesitaban nada de esto.
Entonces, ¿por qué la DDR5 no ha tenido una versión sin disipador contando con un menor voltaje? Porque los cambios eléctricos se lo impiden.
La DDR5 y la obligatoriedad del disipador para la memoria RAM
Hemos dejado a un lado el entorno de servidor porque se rige por otras pautas donde prima más la estabilidad, la capacidad, la frecuencia y el consumo que el rendimiento en sí, que también lo necesitan y en mayor medida, pero no a costa de disparar el calor generado. Por lo tanto, su ratio y balanza es distinto al de escritorio.
En PC la DDR5 va a enfrentar el dilema de tener un PMIC en el propio módulo que gestione todo lo que tiene que ver con la energía. En parte y no siendo solamente la única causa el voltaje se ha visto reducido y la frecuencia ha aumentado. Pero aunque esto es positivo y nos indica que el disipador podría sobrar nada más lejos de la realidad.
El PMIC es un componente que incluye un circuito de voltaje y regulación propio en cada módulo y este genera un consumo elevado que luego traduce a los 1,1V de rigor o más si fuese necesario. Genera mucho calor y este tiene que ser disipador para que la estabilidad y entrega del voltaje y amperaje no se vea mermada y por lo tanto este efecto se ve incrementado a medida que aumentamos velocidades y reducimos o mantenemos latencias.
Entonces, ¿disipador sí o no? ¿Es recomendable? Pues sí, es recomendable, no le va a hacer ningún mal a tus memorias en caso de no tenerlas y si miramos a módulos de gama alta estos deben de tenerlos instalados para no superar el umbral de los 60º C, donde las DRAM comienzan a sufrir.