No podemos negar que hoy en día el sector de los videojuegos está apostando especialmente por los juegos online, tanto cooperativo como competitivo, y especialmente por los juegos tipo Battle Royale. Tras el éxito de juegos como PUBG o Fortnite, la mayoría de las desarrolladoras de videojuegos están buscando llevar a un nuevo nivel sus modos de juego online creando novedosas formas de juego y añadiendo modos que, hasta ahora, no habían llamado la atención de las desarrolladoras, como los Battle Royale, modalidad que ahora mismo tiene casi cualquier juego online. Sin embargo, para poder disfrutar al máximo de los juegos es necesario tener una buena conexión en casa y con los servidores remotos, algo en lo que un VPN puede ayudarnos.
Muchos usuarios piensan que usar una VPN para jugar es una idea absurda, e incluso contraproducente, dado que aumentaría el ping de conexión con el servidor, seguramente perderíamos velocidad y, además, perderíamos rendimiento al tener que cifrar y descifrar todos los datos que enviamos a través de la red. Y los usuarios que piensan esto tienen razón, ya que en teoría el funcionamiento de una red VPN funciona así, y siempre debería haber pérdida de rendimiento, velocidad y un aumento de ping al tener que pasar por un servidor intermedio.
Sin embargo, la teoría no siempre se aplica, y, además de poder mejorar la velocidad y el ping de nuestra conexión en determinados escenarios, una VPN nos brinda otra serie de ventajas que nos pueden ser muy útiles a la hora de jugar por Internet.
Cómo ayuda una buena conexión VPN a jugar online
Los jugadores más sibaritas tienen en mente que un solo milisegundo de diferencia en el ping puede ser la diferencia entre ganar y perder. Y podría serlo, aunque debemos tener en cuenta que estamos hablando de la milésima parte de un segundo y, en la práctica, es algo inapreciable.
Si nos conectamos a una VPN en vez de enviar nuestro tráfico directamente al servidor del juego lo estamos enviando a un servidor intermedio, el servidor del VPN, y desde ahí se reenvía al servidor del juego. Al tener que hacer escala, normalmente el ping aumenta, aunque puede ser que en alguna situación concreta incluso baje. Por ejemplo, si nuestro operador nos tiene asignada una mala ruta para los paquetes (por ejemplo, algunos operadores españoles envían todo el tráfico fuera de España a través de Francia) y el servidor VPN es capaz de establecer una ruta más directa con el servidor, el ping que podemos obtener podría llegar a ser menor al enviar los paquetes por una ruta mejor a pesar de pasar por el servidor intermedio.
De todas formas, aunque la VPN nos empeore el ping, lo servidores de juego hoy en día cuentan con funciones para intentar que todos los usuarios tengan un ping similar para que nadie juegue con ventaja. Si una persona tiene el servidor al lado de cada y tiene 5 ms de ping, y nosotros pasando por una VPN conseguimos 50 ms, al final ambos jugaríamos con 50 ms para estar en igualdad de condiciones. Si no el gaming internacional sería imposible.
Además del ping, un VPN nos va a ayudar a saltarnos cualquier tipo de restricción geográfica a la que podamos enfrentarnos. Aunque en España no tenemos (por suerte) censura a la hora de acceder a determinados contenidos, puede que alguna empresa impida que España pueda conectarse a determinados servidores. En ese caso, el servidor VPN ocultará nuestra ubicación para poder conectarnos como si estuviéramos en otro lugar.
Por últimos este tipo de conexiones cuentan con medidas de seguridad adicionales que, si nos conectáramos a Internet de normal no tendríamos. Por ejemplo, un problema al que se enfrentan muchos jugadores a través de Internet es a los ataques DDoS, ataques que algunos jugadores lanzan sobre otros para ralentizar su conexión y conseguir la ventaja. Si nos conectamos a través de una VPN entonces estos ataques no nos harán nada. Además, al iniciar sesión en el servidor de juego lo estaremos haciendo de forma segura gracias al cifrado de extremo a extremo.
Qué debemos buscar en un VPN para jugar online
A la hora de elegir un buen VPN debemos tener en cuenta varias características según el uso que vayamos a hacer de él. Hay servidores centrados en la privacidad, otros centrados en la velocidad para descargar de redes P2P, otros para jugar, etc.
NordVPN es un VPN para Windows que busca un poco adaptarse a las necesidades de cualquier usuario. En cuanto a privacidad, este servidor cuenta con un cifrado militar que protege los datos de extremo a extremo, además de permitirnos pagar en criptomonedas para conseguir un mayor anonimato.
Este VPN cuenta con una red de más de 5000 servidores repartidos entre 60 países que nos garantizan una conexión rápida además de ofrecernos una mayor variedad de opciones a la hora de elegir por qué país queremos salir. Además, a diferencia de otros, este VPN no nos aplica ningún tipo de límite de velocidad ni ancho de banda, por lo que podremos jugar y navegar todo lo que queramos, desde el dispositivo que queramos, sin preocuparnos de agotar nuestro tráfico.