Como sabéis, con la llegada de la división Corsair Gaming el fabricante dejó en la estacada a la conocida serie Vengeance de productos con la intención de diferenciar claramente qué dispositivos están orientados al Gaming y cuáles forman parte de la marca Corsair tradicional. Ya analizamos el primero de los productos de esta nueva división Gaming, el teclado K70 RGB en el mismo día en el que salió, y en el día de hoy os presentamos nuestro análisis de otro teclado pero un tanto diferente, el Corsair STRAFE, un teclado mecánico cuya principal misión es la de proporcionarle al usuario la experiencia única que dan los teclados mecánicos con todo lo que necesita para el campo de batalla pero a un precio bastante inferior a los teclados de gama alta con interruptores mecánicos.
No obstante, que el Corsair STRAFE un precio inferior a la gama alta del fabricante (actualmente se puede encontrar en tiendas de españa a unos 125 euros) no quiere decir que no lo sea, pues cuenta con todo el cuidado y la calidad que Corsair siempre pone en sus productos, empezando en este caso por los interruptores instalados en el STRAFE: los Cherry MX tradicionales (en este caso está disponible en Cherry MX Red y Cherry MX Brown, pero el que analizamos nosotros es el MX Red). Así pues Corsair ha recurrido a la marca de confianza de siempre, en lugar de fabricar mecanismos Kailh modificados por ellos mismos como hacen otros fabricantes como Razer, por ejemplo.
Además, una de las facultades del Corsair STRAFE es que incorpora un generoso juego de capuchas para las teclas específicas para Gaming, de color gris, rugosas para que no «resbalen» los dedos al pulsar y con cierta inclinación para que resulten más cómodas al uso. Lógicamente como hablamos de un periférico Gaming, éstas capuchas adicionales son las de la zona WASD y circundantes.
Como siempre, esperamos que nuestro análisis os guste y que os resulte de utilidad.