Hace un par de días, en la GDC Microsoft presentó DirectX 12, la próxima versión de la API gráfica de la compañía, probablemente la más usada hasta el momento. Una de las principales características de DirectX 12 es la abstracción de nivel bajo, lo que ayudará a que los desarrolladores de juegos tengan un mejor acceso al hardware de gráficos con una mejor utilización de la CPU.
Sin embargo, esto no es lo único que aportará esta nueva versión, y para obtener toda la gama de características que vendrán con la nueva API, se hará necesario nuevo hardware, al igual que con las iteraciones anteriores de DirectX. Dos de las características que se han revelado para el nuevo hardware son nuevos modos de mezcla y rasterización conservadora, pero de acuerdo a Microsoft, todavía quedan algunas funciones más por revelar.
Será interesante ver cuánto tiempo les lleva a los desarrolladores de juegos para poner en práctica las características de DirectX 12, ya que DirectX 11 fue lanzado junto con Windows 7 en 2009 pero hicieron falta varios años para que se aprovecharan de forma generalizada las funciones de aquella versión, lo cual pudo ser debido a la falta de soporte para DirectX 11 en consolas de la época, lo que no será un problema en este caso, Xbox One será compatible con DirectX 12.
A finales de este año se dará a conocer una preview de la nueva API y conoceremos todas sus funciones.