La placa base incluye un elemento vital como es la BIOS, que realiza una detección inicial de los componentes conectados, verificando su funcionamiento. Una de las características de esta es que permite personalizar o ajustar diferentes parámetros. Es posible que queramos resetear la BIOS para restaurar la configuración de fábrica y, para ello, debemos hacer un Clear CMOS. Te explicaremos todo lo que debes saber al respecto.
Antes debes saber que la BIOS podríamos decir que es una especie de sistema operativo muy simplificado. Este firmware se almacena en una memoria RAM CMOS que es de tipo EEPROM. Dicho tipo de memorias son no volátiles, por eso requieren de una pila o batería para evitar que cada vez que apagamos el PC esta recupere los valores de fábrica y se borre por completo, por lo que es necesaria energía para mantener la información guardada y salvada, ya que esta parte del sistema será la encargada de decirle al ordenador cómo debe arrancar, con qué parámetros, desde qué unidades de almacenamiento o soportes físicos, etc.
Si recordáis, los viejos cartuchos de videojuegos de los 90 tenían un lugar específico para guardar partidas que podía borrarse con el paso del tiempo porque la pila que llevaba en su interior se agotaba. Aunque hay bastantes diferencias con estas BIOS de PC, el tipo de funcionamiento es prácticamente el mismo y mientras esta área se mantiene alimentada con alguna fuente de energía, es capaz de retenr toda la información almacenada, de lo contrario terminan por borrarse.
¿Para qué sirve un Clear CMOS?
Sirve sencillamente para recuperar los parámetros de BIOS establecidos por el fabricante. Esto elimina todos los ajustes que hayamos realizado en el proceso de arranque de nuestro PC, incluyendo los posibles errores que hayan lastrado el rendimiento del ordenador o aquellos cambios que, directamente, hacen imposible arrancarlo con normalidad. Así que es un procedimiento que, lo mismo, tendréis que llevar a cabo alguna que otra vez mientras os dure el PC en vuestro poder.
Normalmente este proceso se debe realizar de forma exclusiva para resolver ciertos problemas que se pueden contar con los dedos de una mano. No es algo que necesitemos hacer cada vez que el PC nos dé un problema y sí para esos instantes en los que se requiere llamar al primo de Zumosol para aplicar un arreglo de choque. Así que no hay que acordarse de Santa Bárbara solo cuando truena, y se recomienda que llevemos un pequeño control de esta zona del PC con tareas periódicas de mantenimiento. De todas formas, estos son los principales casos:
- Una mala actualización de la BIOS, que ha generado algún problema durante la instalación.
- La BIOS se ha bloqueado, impidiendo realizar ajustes varios como modificar el orden de arranque de las unidades de almacenamiento.
- Estamos realizando pruebas de overclocking al procesador y/o memoria RAM y por error, el equipo no arranca. Un error bastante normal y que se corrige haciendo una restauración de la CMOS.
- Los perfiles XMP están dando problemas o no está cogiendo correctamente la configuración establecida.
- Problemas de rendimiento o perdida de la configuración en las unidades SSD M.2 NVMe.
- Configuración de CSM (Compatibility Support Module). Algunas placas base Intel requieren de habilitar este parámetro ya que pueden no mostrar imagen en gráficas AMD RX 6000 y RX 5000.
Otros casos en los que necesitemos un borrado CMOS tiene que ver con el momento en el que decidimos vender nuestro equipo de segunda mano o ceder a un familiar y/o amigo. También puede utilizarse este sistema para borrar la contraseña de la BIOS si la hemos olvidado, ya que de dejarla impediríamos al nuevo usuario poder entrar a cambiar lo que desee y le estaríamos dando un equipo que no es plenamente funcional y, ante ciertas averías, no tendría manera de corregir nada. Y claro, eso no es lo que querría ese futuro comprador, que querrá acceso total a la BIOS para toquetear lo que sea que haga en todos sus ordenadores.
Consejos antes de hacer un reset a la BIOS
Es importante que tengas en consideración estos aspectos antes de empezar el proceso. Debes verificar y comprobar los siguientes aspectos que te sugerimos, sobre todo si no quieres perder información importante del ordenador, ni información personal que tengas guardada dentro del PC tras un uso continuado de muchos años:
- Verifica que tienes acceso a la BIOS y que puedes resetearla desde este punto. Si no consigues entrar en al panel, pasa a los diferentes procesos físicos.
- Devolver la BIOS a los valores de fabrica suele ser rápido (entre 15-20 segundos) pero las prisas son malas. Lee el manual del fabricante, que te dirá cuanto tiempo debes hacer el proceso y alárgalo un poco más, que cuesta poco.
- Realiza una copia de seguridad de los datos. Normalmente este proceso no afecta en nada a las unidades de almacenamiento, pero ser precavido nunca sobra.
- Si emite una serie de pitidos, el problema no es de la BIOS, hay un fallo en el hardware. Una de las funciones de esta es verificar que el resto de componentes conectados a la placa base funciona bien. Cuando detecta un error, emite unos pitidos que nos indican cual es el problema.
¿Cómo hacer un Clear CMOS?
Aunque este proceso pueda dar un poco de miedo, realmente es un proceso sencillo y seguro. Hacer un Clear CMOS o un reset a la BIOS es un proceso rápido y hay varias maneras de hacerlo de una forma sencilla y, lo más importante, no van a afectar al PC y a la parte de Windows mientras no toquemos más allá de lo normal. Que son dos o tres cositas que casi siempre tienen que ver con el arranque o desactivar ciertos componentes (gráficas integradas, tarjetas de red, etc.).
Desde el propio menú de la BIOS
El primer proceso es el más sencillo y está considerado el más seguro. Simplemente debemos acceder a la propio BIOS del sistema pulsando la tecla correspondiente. Normalmente se puede acceder pulsando «F2» o bien «Suprimir», aunque hay otros métodos para entrar en la BIOS.
Cuando estemos dentro, debemos ir a la última de las pestañas. Aquí encontraremos un parámetro que es «Load Setup Defaults» o «Clear BIOS settings», aunque puede recibir otro nombre. Si pasamos por encima, nos debería aparecer un texto que nos indique que efectivamente este sirve para restaurar la configuración de fábrica.
Tocar los jumpers también funciona (a veces)
Algunas placas base siguen incluyen los clásicos jumpers que permiten realizar un Clear CMOS (CLRMOS). El jumper está colocado de manera distinta por la placa, es decir, no está en el mismo sitio en todas. Lo ideal para no perder demasiado tiempo es irnos al manual de nuestro modelo y ver el diagrama de la placa para localizarlo fácilmente, así evitamos el peligro de acabar tocando los jumpers de otra parte del sistema y acabamos jorobando algo que funcionaba sin errores.
Por norma general y como es costumbre, el jumper está haciendo contacto entre dos pines en posición OFF. Solo deberemos cambiarlo de posición para que coja el pin libre y el central para realizar el proceso. Se recomienda que antes de mover el jumper de posición desconectemos del botón trasero de la fuente de alimentación el PC o quitar el cable de alimentación, por seguridad.
Tras (normalmente) 10 o 15 segundos (dependiendo del fabricante y modelo) la BIOS habrá perdido la información almacenada. Ahora podremos volver a colocar el jumper en su posición original y la corriente a la fuente. Encendemos el PC y entramos de nuevo en la BIOS para verificar que todo está de serie.
Quitar la pila, la solución clásica
Una de las soluciones más sencillas y rápidas que existe es quitar la pila o batería de la placa base. Antes de hacer este proceso, debemos quitar la corriente de nuestro sistema. Podemos apagar la fuente de alimentación desde el interruptor o bien quitar el cable de corriente. Siempre que vayamos a manipular el sistema físicamente, por seguridad, es importante cortar la corriente. Aun así, en muchas ocasiones queda electricidad estática debido al tipo de componentes y energía que necesitan los mismos, por lo que no está de más esperar unos minutos antes de manipular el ordenador o hacerlo con guantes.
Posteriormente, con un destornillador plano haremos presión en la junta de soporte de la pila, entre esta y el soporte que incluye. Esto hará que la pile salte literalmente de su sujeción y podremos retirarla. Tendremos que esperar un poco para que la corriente sea nula debido a lo dicho anteriormente, la electricidad estática que queda en ella puede mantenerla con vida durante un tiempo, algo que podemos ver de forma fácil en las televisiones. Cuando quitamos el cable de la corriente, el piloto rojo suele durar unos segundos, ya que mantiene energía en su interior, y eso que la luz producida consume mucho más que la necesaria por la BIOS y la pila, por lo que, no la quites y la pongas inmediatamente o puede que el truco no funcione.
Una vez pasado un tiempo prudencial (no hace falta más de 1 minuto), procederemos a colocarla de la misma manera que estaba. Ahora solo tendremos que encender el ordenador y posiblemente la fecha y hora del mismo se haya reseteado, eso es buena señal, la BIOS también, por lo que tendremos los mismos valores de fábrica que cuando lo encendimos por primera vez.
Botón en la parte trasera de la placa base
Las placas base de gama media y alta, en muchos casos, incluyen un botón específico para este proceso. Dicho botón recibe el nombre de I/O Shield. Este lo que hace es devolver la BIOS UEFI a la configuración original. Un proceso mucho más rápido y sencillo, pero que no es accesible a todo el mundo.
Normalmente este botón está en la parte trasera, donde están los puertos de entrada y salida que quedan detrás del PC. Es importante leer el manual antes de usarlo, ya que suele requerirse un tiempo de pulsación para hacer efectivo el proceso de Clear CMOS. También es importante, porque la posición y el diseño de este botón cambia según el fabricante, incluso, puede cambiar entre diferentes modelos de placas base.
¿Qué hacer después de un Clear CMOS?
Nada en realidad. Conectamos el ordenador a la corriente y lo encendemos. El PC debería encender sin mayores problemas, ya que es un proceso sencillo y que no debe dar problemas. Recordad que cualquier ajuste realizado en el arranque lo hemos borrado de manera definitiva.
En definitiva, podremos usar el ordenador con completa normalidad aunque, eso sí, no hará falta recordar la importancia de este componente y los peligros de andar tocando en él. Un fallo en algún proceso y podríamos tener que enfrentarnos a un proceso de recuperación que es más complejo y tiene sus riesgos, sobre todo si no somos demasiado expertos. Así que ante la duda… recurrid a un servicio técnico o un especialista.
Y por supuesto, si usáis el ordenador con un parámetro de la BIOS retocado, no tenéis más que acceder a ella para cambiarlo y dejarlo como lo teníais antes de completar ese reinicio completo aunque aquí lo complicado no es el proceso para devolverlo a su estado original, sino con el paso del tiempo acordamos de qué es lo que tocamos y lo que no. Porque la memoria es limitada y temrinamos por olvidarnos si no lo apuntamos en algún sitio.