A la hora de conectar unos altavoces a la tarjeta de sonido de tu PC verás que, al menos en la parte de la placa base del PC, tienes varias opciones: puedes utilizar los mini Jack de 3.5 mm habituales que proporcionan conexión analógica de toda la vida, o puedes utilizar la salida de audio óptica S/PDIF, que proporciona audio digital. En este artículo te vamos a contar qué diferencias vas a poder percibir entre ambas en términos de rendimiento y calidad de sonido, y por qué deberías animarte a utilizar la salida óptica siempre que puedas.
Hoy en día y con contadas excepciones, todas las placas base del mercado que tienen tarjeta de sonido integrada cuentan con salida digital S/PDIF. Podrás ver que cuando el equipo está encendido y si esta salida no está en uso, a pesar de que la mayoría tiene una pequeña tapa abatible con bisagra sale una luz roja, y eso es porque tu equipo está preparado para utilizarla tanto a nivel de hardware como de software. Así que si quieres conseguir un extra de calidad de sonido, te vamos a contar cómo aprovechar este conector que es uno de los grandes desconocidos de la parte posterior de tu PC.
¿Qué es la salida de audio óptica y qué implica?
Realmente, la salida de audio óptica se llama S/PDIF (aunque algunos la llaman SPDIF directamente) por el protocolo S/P-DIF, que corresponde al formato de interfaz digital Sony/Philips, y su conector es TOSLINK; en esencia, en lugar de utilizar cobre para transmitir la señal, ésta se transmite literalmente por un cable de fibra óptica, y con esto una analógica bastante exacta es si comparamos las antiguas conexiones ADSL de cobre con la fibra óptica que ahora sirve Internet a la mayoría de hogares del país.
Precisamente, todas las salidas de audio ópticas de las tarjetas de sonido de PC suelen tener una pequeña tapa que se puede abatir hacia dentro cuando insertamos el conector TOSLINK, y esto es para que no le entre polvo ni otro tipo de suciedad cuando no está en uso dado que al ser una conexión óptica, la suciedad o el polvo podrían entorpecer e incluso llegar a anular la señal cuando metemos el cable. Es por eso que resulta super importante que hasta el instante último antes de conectar esa nueva línea de salida, ni lo toquéis no lo retiréis.
Por lo tanto, la diferencia entre la salida de audio minijack de toda la vida y la salida de audio óptica en el PC es esencialmente el método de conexión (o de comunicación para ser más precisos) y el cable que se utiliza. Obviamente, si diera igual utilizar una conexión que otra no habría motivo para utilizar la salida óptica por encima de la analógica, ¿verdad? Pero como ya supondréis, emplear la salida óptica tiene ciertas ventajas y esas son las que os vamos a contar ahora.
¿Por qué priorizar el uso de la salida óptica?
Como ya supondréis, una interfaz digital de fibra óptica tiene mucho más ancho de banda que una interfaz analógica con cable de cobre, y eso se traduce en que con un solo cable digital podremos transmitir audio multicanal. Dicho de otra manera, con un solo cable podemos integrar la señal para audio envolvente 5.1 y formatos como Dolby True Surround o DTS, mientras que hacer eso en digital requiere una cantidad de cableado mucho mayor que, además, puede tener pérdida de señal.
Y respecto a la pérdida de señal, es donde encontramos otra de sus principales ventajas: al ser una salida de audio digital a través de fibra óptica, o funciona o no funciona, pero no hay «medias tintas», es decir, que cuando funciona lo hace al máximo de sus posibilidades siempre, al contrario que la señal analógica que puede sufrir interferencias o degradación dependiendo de las condiciones ambientales. A efectos prácticos, comparar las salidas de audio analógicas con mini Jack con la salida de audio óptica S/PDIF en un PC es como pasar de una conexión de vídeo VGA a una HDMI. Dar el salto del viejo mundo analógico a otros completamente digital en el que la información se mueve de un extremo a otro sin pérididas. Con todo lo que eso supone.
¿Es mejor utilizar audio digital o analógico en el PC?
En todos los ámbitos (y no solo hablando del audio), lo digital se diferencia de lo analógico por la continuidad: en un sistema digital los cambios siempre son drásticos, porque se pasa de unos a ceros (sistema binario), que significa que o pasa corriente o no pasa corriente, o funciona o no funciona, o es blanco o es negro. Sin embargo, la señal analógica permite que los cambios se produzcan de una manera progresiva y gradual, manteniendo la continuidad en todo momento, lo que no puede evitar que sufra cortes, nterferencias y que las señales vayan y vengan perdiendo ganando calidad con cada incidencia (o no) que se produce.
Ahora podemos pensar que entonces es mejor el audio analógico que el digital porque notaremos mejor los cambios de tono, pero la realidad es bien diferente porque esto no depende del tipo de conexión que tengas, sino de cómo se haya codificado el audio. Piensa que al fin y al cabo estamos hablando de conexiones en un PC y provenga de donde provenga, si el emisor de la señal es el PC esta es digital y por lo tanto dependerá de la calidad de ésta la calidad que percibamos después.
En otras palabras, la calidad del audio no va a mejorar porque utilices una salida óptica digital ya que la calidad no depende de esto sino del bitrate y demás de la pista de audio que se reproduce; sin embargo, lo que sí puedes notar utilizando esta salida de audio es que no habrá interferencias ni degradación de la señal, puesto que al ser digital tal y como hemos explicado antes o funciona o no funciona, no hay medias tintas.
De todas formas, lo anterior es válido para la señal, el cómo la transportamos, pero no en la parte de cómo reproducimos esa información. Obviamente, dependiendo del equipo que tengamos para escuchar ese audio, así obtendremos más o menos calidad, lo que está íntimamente ligado a lo que nos cuesta: cuanto más caro, por regla general, obtenemos una fidelidad mayor sobre la fuente, mientras que al reducir el presupuesto lo hacemos para alejarnos de esa calidad que podemos esperar.
Conclusiones finales
Por lo tanto, y respondiendo ya a la pregunta del titular: sí que es mejor utilizar la salida de audio óptica S/PDIF de tu PC siempre y cuando tus altavoces o equipo de sonido cuenten con esta entrada. Realmente, todo son ventajas, ya que aunque no vas a ganar calidad, tampoco vas a sufrir pérdida de ésta, por el hecho de que no habrá ni interferencias ni degradación, y además tendrás la comodidad de poder centralizar todo el audio del equipo con un solo cable independientemente del número de altavoces que tengas (obviamente si luego tienes 5 altavoces más un subwoofer, éstos sí que tendrán cada uno su propio cable, pero la diferencia es que no tendrás que conectar todos al PC, sino solo uno de ellos).
Por lo tanto, nuestra recomendación es que siempre que te sea posible, escojas la salida de audio óptica digital por encima de la analógica por mini Jack, ya que evitarás problemas y la conexión será bastante más cómoda. Aparte de dar una mejor calidad de sonido y permitir configuraciones mucho más complejas aunque, eso sí, vas a necesitar de un hardware de reproducción específico que sea capaz de recibir esa señal y hacerla sonar con la calidad y el volumen que merece. Y eso suele suponer un extra a la hora de invertir en los componentes que forman parte de nuestro ordenador.
Aunque si tienes claro que te merece la pena ese gasto extra, entonces mucho mejor, porque rápidamente serás capaz de comprobar lo mucho que ganas con este simple cambio en la elección de la salida de audio del PC y que te va a reportar. no tanto una mayor calidad que la que has venido disfrutando con tus viejos speakers de dos vías, como una garantía de estar reproducioendo sonido digital.