La historia al igual que el tiempo pone a cada uno en su lugar. No hay que hacer nada, solamente sentarse a esperar con un bol de palomitas y disfrutar del espectáculo tranquilamente desde el sofá. Pero de los errores se aprende y tanto Intel como AMD lo han hecho a base de bien en sus procesadores, pero para ello, han tenido que analizar sus CPUs más desastrosas, las cuales vamos a repasar echando la vista atrás mediante una lista de sus peores CPUs de la historia.
Las peores CPU de la historia de Intel y AMD
Absolutamente ningún fabricante está libre de problemas, fiascos e incluso desastres, y compañías del calado de Intel o AMD no son una excepción. Dicen que de los errores se aprende y esto es un hecho en la industria del hardware, en la que tanto AMD como Intel han tenido algunos modelos concretos y series enteras de procesadores cuyo lanzamiento se convirtió en una auténtico quebradero de cabeza para el fabricante… vamos a ver los más destacados de todos ellos a continuación.
Intel Pentium 4 (Prescott)
La fama nubló a Intel y AMD les pasó por la izquierda y levantó las pegatinas en la sede de los azules, algo parecido a lo que está pasando de nuevo hoy, aunque en aquel tiempo fue en mucha mayor medida. Con una pipeline de 40 stages y un nodo fabricado en 90 nm, Intel intentó competir contra su rival con una arquitectura bastante precaria en rendimiento por ciclo y con un motor de predicción que era un desastre, puesto que ralentizaba los datos en toda la pipeline.
Su nodo era realmente deficiente en cuanto a fugas de energía, no por nada se le terminó llamando coloquialmente PressHOT, lo que sumado a las altas frecuencias que necesitaba la compañía hizo de estos procesadores una opción más que mala que ni el marketing agresivo de aquella época pudo tapar.
Intel Pentium 4 (Smithfield)
Si los Prescott fueron un problema para la marca, la necesidad de sacar a tiempo una opción de doble núcleo solo podía enturbiar más el hecho de que el nodo y la arquitectura eran un desastre.
Intel incluyó dos die Prescott en un único PCB que se comunicaban por FSB, lo cual supuso el incrementar el valor del mismo hasta los 800 MHz y rebajar las frecuencias hasta los 3,2 GHz de la versión Extreme Edition.
Lógicamente fueron unas buenas «estufas» que de nuevo el marketing tuvo que tapar hasta la llegada de los más frescos Cedar Mill a 65 nm.
Intel Itanium
Los grandes cambios no suelen gustar en la industria e Intel Itanium pretendía precisamente esto. Con una mayor complejidad en su hardware, el compilador llegó para formar parte primigenia del rendimiento de la arquitectura al poder permitir ejecutar instrucciones en paralelo.
Como siempre ocurre, el hardware va por delante del software, en este caso por mucho, y los programadores no pudieron adaptarse a esta nueva ola de procesadores que se pronosticó, reemplazarían a X86 al completo.
Intel dejó de dar soporte y de construir sus últimos procesadores el año pasado, así que hizo todo lo posible durante 18 años para cambiar el concepto de procesador en ámbitos fuera del uso empresarial.
Intel Pentium Pro
A nivel arquitectural el Intel Pentium Pro fue un éxito ya que tanto el Pentium II como el Pentiium III se basaron en su arquitectura, pero en el tiempo en el que fue lanzado fue un fiasco comercial enorme.
El motivo de ello es que en pleno 1996 las aplicaciones de 16 bits se seguian utilizando y su rendimiento era mucho peor que el de los Pentium normales para ese tipo de programas, lo que llevo que su adopción no fuese la esperada y se quedase como un procesador para un nicho. Debido a que el Pentium II no era más que un Pentium Pro que solventaba los problemas de este, era más barato y añadía las instrucciones MMX, el Pentium Pro paso a la historia como un fracaso comercial para Intel.
AMD Bulldozer
La historia de Bulldozer ha traído cola hasta nuestros días, donde una demanda fue resuelta el año pasado y condenó a AMD a pagar regalías a ciertos usuarios por publicidad engañosa. El intento de AMD con sus núcleos fue bueno, pero la ejecución de los mismos fue horrible.
Intentaron impulsar dies más pequeños con clocks más altos que compartiesen recursos en sus unidades de enteros, lo que reducía el espacio físico gracias a incluir un menor número de transistores que el hecho de añadir INT Cores independientes por módulos.
Fue un fiasco total que casi mata a AMD y que propició por otro lado un cambio completo de arquitectura para finalmente lanzar Zen. Solo hay que recordar el FX-8170 a 4,5 GHz para pensar que el calor del sur no es tal si lo comparamos con este u otros procesadores de la gama, por no hablar del FX-9590 Filedriver con 220 vatios de TDP, perfecto para los países nórdicos.
Quizás el mayor error de AMD fue persistir en lanzar nuevos modelos con leves mejoras sabiendo que los desterraría por muchos años viendo lo que estaba lanzando Intel. Como decimos, fue el mayor error de su historia y casi le cuesta la desaparición del panorama mundial.
AMD APUs serie E
En un intento absurdo de competir con Intel y sus ATOM (capítulo aparte para estos últimos) AMD lanzó unas APU basadas en la serie E (E2-9000 por ejemplo) donde visto que no podían competir en CPU hicieron lo propio con la iGPU, donde claramente superaban a su rival.
El problema es que el diseño de la iGPU comprometió demasiado el de la CPU y resultaron ser unas APU que no cumplían ni con el mínimo exigible para mover Windows, no hablemos de Windows 10 por supuesto.
Este rendimiento tan lamentable se extendió algunas generaciones, hasta que Intel terminó de descartar a ATOM como una opción para el mercado de bajo consumo y AMD hizo lo propio en un intento absurdo de competir con una arquitectura que era muy deficiente.