Un SAI es un sistema de alimentación ininterrumpida (de ahí su nombre, que en realidad son siglas), que en el caso de los PC nos permite poder seguir trabajando -o jugando, o haciendo lo que estuviéramos haciendo- durante un cierto periodo de tiempo cuando hay un corte eléctrico, a la vez que nos protege de sobretensiones y demás posibles problemas eléctricos. Pero ¿cómo funciona un SAI? ¿sabías que hay más de un tipo? Te contamos cómo funciona un SAI, y qué tipo es el mejor de todos.
Agregar un SAI a nuestro PC es sin duda una muy buena idea, especialmente si sueles sufrir cortes eléctricos en tu casa (sea porque la instalación eléctrica es vieja, está en mal estado, hay muchas tormentas, etc.). Nos dará un tiempo de autonomía suficiente para ir a levantar el automático si ha habido un corte de luz puntual, o a guardar lo que estuviéramos haciendo y apagar el equipo de forma controlada en todo caso para salvaguardar su integridad si se prevé que la luz no va a volver al poco tiempo. Además, por norma general también protegen al equipo contra sobretensiones y filtran la energía para que llegue más limpia.
No obstante, no todos los SAI son iguales, y su funcionamiento depende del tipo que sean. Por este motivo es importante conocer los tipos de SAI que existen y cómo funciona cada uno de ellos para que puedas saber cuál es el que más te conviene dependiendo de las necesidades que tengas. Si es tu caso, a continuación, te vamos a contar todo lo que necesitas saber antes de inclinarte hacia uno u otro tipo.
Cómo funciona un SAI para PC
En lo que a los usuarios respecta, el modo de echar a funcionar un SAI es muy sencillo: lo conectaremos a la toma eléctrica de pared y luego conectaremos nuestros equipos al SAI, no tiene mayor misterio y nos permite evitar muchos sustos que nos puede llegar a dar un apagón inesperado.
Este dispositivo tiene una batería interna, que será la encargada de proporcionar energía a los equipos enchufados cuando se va la luz, pero normalmente funcionan en modo bypass, lo que significa que estaremos recibiendo la energía directamente de la pared sin que el SAI intervenga y, a través de un relé, el SAI detectará en milisegundos cuándo se corta la luz, haciendo que entre en funcionamiento la batería y así los equipos conectados seguirán funcionando.
Para explicarlo con un ejemplo, imagina que el SAI tiene un proceso interno que está siempre mirando si le llega electricidad desde el enchufe. En cuanto detecta que la electricidad del enchufe se ha cortado (se va la luz), hace que entre en funcionamiento la batería tan rápidamente que los equipos enchufados pueden seguir encendidos, en ese momento utilizando la batería del dispositivo como fuente de alimentación en lugar del enchufe de la pared. Cuando «vuelve la luz», los equipos enchufados volverán a funcionar utilizando ésta y, al mismo tiempo, la batería del SAI comenzará a cargarse de nuevo.
Como seguramente ya supondréis, el funcionamiento del SAI depende en gran medida de cómo sea su electrónica interna, y es que como os vamos a contar a continuación hay diferentes tipos de SAI y su funcionamiento difiere dependiendo de esto.
Tipos de SAI y cómo funciona cada uno
Tal y como hemos mencionado antes, existen diferentes tipos de SAI, y aunque la finalidad de todos es la de mantener los equipos enchufados encendidos cuando se va la luz, su funcionamiento es diferente y esto significa que cada tipo puede ser mejor para ciertas finalidades que otros.
Standby
Este es el tipo más básico y más económico, y su funcionamiento es en esencia como lo hemos explicado antes. Cuando la potencia de entrada cae (se va la luz) o el voltaje sube demasiado (pico de tensión), el relé del SAI hace que la corriente deje de ir directa a los equipos conectados y pase por la batería en su lugar (el relé es lo que hace que los SAI produzcan un ruido de «clac» al cambiar a modo batería).
Claro que la batería produce corriente continua, y las fuentes de alimentación de los equipos están preparadas para recibir corriente alterna (al fin y al cabo, un PC conectado a la corriente está recibiendo corriente alterna y la fuente de alimentación es la que la convierte a continua), así que los SAI tienen primero un conversor de AC/DC antes de la batería, y otro conversor DC/AC después para entregar corriente alterna.
Line interactive
Este es un tipo de SAI intermedio, por llamarlo de alguna manera. Incorpora una tecnología que permite al dispositivo corregir fluctuaciones de energía menores (bajo voltajes y sobre voltajes) sin necesidad de pasar a modo batería. Además, este tipo de SAI tiene un autotransformador que regula estos bajo voltajes y sobre voltajes para seguir usando su energía y que no se termine transformando en calor.
Este es el tipo de SAI más extendido en electrónica de consumo, y es el que más se vende y utiliza para PCs, ya que al regular directamente el voltaje que va hacia nuestro ordenador permite evitar que los componentes se dañen por cualquiera de los motivos que pueden causar tanto un pico como una bajada de tensión, por lo que suele ser la mejor solución para aquellas personas que tienen cortes de luz frecuentes o apagones.
Double conversion (Online)
Este es el tipo de SAI más avanzado, y su utilización generalmente se basa en equipos muy delicados y entornos industriales, aunque muchos SAI de gama alta para el consumidor de a pie también tienen este sistema. Su funcionamiento es muy distinto a los anteriores, dado que convierte toda la energía que entra a corriente continua, y luego la vuelve a convertir a corriente alterna, haciendo que la señal que sale del SAI sea prácticamente perfecta.
Los SAI que usan esta tecnología operan, por tanto, bajo corriente continua un 100% del tiempo y cuando se va la luz no hay ningún relé que entre en acción, simplemente la energía solo la emite la batería que está siempre conectada. Por este motivo, también protege contra sobre tensiones, bajo tensiones, cortocircuito y todos los posibles problemas eléctricos que pueda haber. Con esto entenderéis que son los más caros de todos, pero también los mejores, por lo que, en caso de necesitar soluciones industriales, o si simplemente queremos proteger nuestros dispositivos sin importar el precio, son la mejor opción.
Qué tipo de SAI es mejor y cómo reconocerlo
Tras lo explicado anteriormente, ya sabéis cómo funciona un SAI y que los mejores son los Online, aunque como decíamos son bastante caros y más orientados a entornos industriales, laboratorios, etc. donde se conectan a ellos equipos extremadamente caros. Lo normal es que casi todos los SAI que podemos comprar para PC sean del tipo «line interactive», que son muy buenos igualmente para el tipo de uso para el que han sido diseñados.
Los que deberíamos evitar, al menos para equipos como el PC o en general dispositivos que requieren una gran cantidad de energía, son los Standby, puesto que son los más básicos y los que menos protección nos ofrecen, estos son perfectamente válidos para otro tipo de menesteres, como por ejemplo para el router.
El cómo reconocerlos es más complicado porque los fabricantes no suelen indicarlo, y solo accediendo a la información técnica podremos saberlo a ciencia cierta. Básicamente, si veis que un SAI indica que es de tipo Standby, ya sabéis que es el peor de los tres tipos (pero no por ello es malo), y si es online sabréis que es de los mejores. Por cierto, que muchos fabricantes tratan los line interactive como in-line, que suena más comercial (y parece que dice online, ya de paso), y tal y como hemos indicado antes son los más habituales de ver en tiendas.
¿Merece la pena comprar un SAI?
Cuando pensamos en todos los componentes que tiene nuestro ordenador, es normal que se nos pase por la cabeza si nos puede llegar a merecer la pena tener que invertir cierta cantidad de dinero en protegerlos, ya que es probable que no tengamos los problemas comunes por los que alguien puede comprarse un SAI. Es normal que dependiendo de nuestras necesidades veamos con mayor o menor necesidad el hecho de terminar comprando un dispositivo de este tipo, pero dentro de la experiencia que podemos tener cada uno, es probable que veamos como altamente necesario hacerse con uno de estos.
Es extraño no haber sufrido nunca un corte de luz, dependiendo del país y la zona donde viva cada persona es probable que suceda con mayor o menor frecuencia, pero es altamente probable que todos hayamos vivido uno mínimo una vez, algo que ya nos hace plantearnos, si vuelve a suceder, ¿estará nuestro PC protegido? En un principio esta es la primera pregunta que solemos hacernos a la hora de pensar en si merece la pena o no, pero hay muchos otros factores que puede que no tengan que ver directamente con un corte de luz, sino que pueden ser otro tipo de cosas mucho más comunes.
Las subidas y bajadas de tensión, por ejemplo, son algo normal si la zona en la que vivimos suele haber muchas tormentas, pero también puede suceder por un deterioro en las líneas o cables que transportan la energía hasta nuestro domicilio. Sea cual sea el motivo, teniendo en cuenta que podemos encontrar sistemas de este tipo por menos de 100€ que son capaces de aguantar más de dos años, por lo general siempre es altamente recomendable que nos hagamos con uno, principalmente por un motivo, nunca sabemos lo que puede pasar, y si tenemos que decidir entre gastarnos 70-100€ para mantener la seguridad durante dos años o arriesgarnos a tener que gastar miles de euros en un PC nuevo, está claro que la primera opción es la mejor.
Mejores SAI para PC
En el mercado podemos encontrar un gran número de fabricantes y modelos de SAI, sin embargo, no todos son válidos para mantener el PC en funcionamiento cuando se presenta un corte de luz. A la hora de comprar un SAI la potencia que es capaz de suministrar en lo primero que debemos ver, una potencia que debe ser igual o superior a la que ofrece la fuente de alimentación de nuestro PC.
Si la fuente de alimentación es capaz de ofrecer 550W, el SAI debe ofrecer, como mínimo esa potencia. Si bien es cierto que las fuentes de alimentación únicamente trabajan a pleno rendimiento ofreciendo su máxima potencia cuando se están realizando tareas pesadas, nunca está de más ir sobre seguro.
También debemos comprobar cuánto tiempo es capaz de ofrecer esa potencia ya que dependerá el tiempo que vamos a tener para apagar el equipo de forma segura. Con estos dos factores principales en mente, a continuación, os mostramos cuáles son las mejores opciones disponibles actualmente en el mercado.
Woxter UPS 800
Se esta tiene una autonomía que varía entre 8 y 15 minutos y es capaz de ofrecer una potencia de hasta 480W. Incorpora dos tomas Schuko para conectar tanto el PC como el monitor y tiene un tiempo de carga completa de 8 horas.
Este mismo fabricante, también ofrece un modelo con 720W de potencia capaz de mantener el equipo encendido entre 20 y 30 minutos.
Uno de los SAI más vendido y con mejor valoración por parte de los clientes es del fabricante Green Cell. Este fabricante tiene varios modelos con potencia desde 360W hasta 1400W. Incluye una pantalla LCD donde se muestra la capacidad de batería y la potencia de entrada y salida que está suministrando.
El modelo de 480W dispone de dos salidas Schuko al igual que el modelo de 700W. Si buscamos un mayor número de enchufes, tendremos que recurrir al modelo que ofrece 900W en adelante, ya que dispone de 4 enchufes Schuko.