Cómo eliminar el ruido de tu respiración y los ventiladores en el micrófono

Una de las cosas más molestas cuando estás hablando con alguien es escuchar su respiración o el sonido continuo de algún ventilador o ruido que, aunque no son muy molestos, el hecho de tenerlos ahí de forma permanente acaba volviendo loco a cualquiera. Por eso, hoy vamos a ver unas sencillas formas de evitar que esto ocurra y conseguir la mayor calidad de audio reduciendo el ruido que se cuela en el micrófono.
Hay varias maneras de reducir el ruido que «se cuela» en el micrófono, tanto por «hardware» en el sentido de añadir accesorios o colocar el micrófono en una posición determinada, como por software, añadiendo una aplicación intermedia que te ayude a filtrar el ruido. Vamos a ver, en todo caso, qué es lo que podemos hacer al respecto.
Pero, antes de nada, es importante tener en cuenta que podemos utilizar diferentes herramientas y métodos para mejorar la calidad del audio, sin embargo, no podemos hacer milagros. Con esto lo que queremos decir es que, lo primero que debemos tener en cuenta es aislarnos, en la medida de lo posible, de cualquier ruido de nuestro entorno, cerrando tanto las puertas como las ventanas para reducir el ruido que procesa tanto del exterior como del interior de la casa.
Instala un filtro anti viento en el micrófono
La primera manera es muy sencilla y consiste en simplemente utilizar un filtro anti viento en nuestros micrófonos, también llamado deadcat (por su parecido a un gato muerto). Existen muchos filtros y no debes confundir la función de cada uno. Este se diferencia muy bien del resto por estar lleno de pelos, es el que ves normalmente en televisión, sobre todo en entrevistas por la calle. Te dejo ahora un ejemplo de un buen modelo que puedes adquirir en Amazon y seguro que sabes a cuáles me refiero.
Son bastante económicos y se adaptan a la mayoría de los micrófonos. Solo tendrás que comprarlo, acoplarlo a él y listo. La mayoría de los sonidos que no provengan de tu boca no serán escuchados por el resto de las personas. Tienes muchos modelos en Amazon, aunque podrás encontrarlos en cualquier tienda de música o incluso bazar chino.
Así mismo también existen otros filtros, de espuma, son algo menos eficaces, pero también más bonitos. Eso sí, en este caso es importante que compres uno que sea compatible con tu micrófono, ya que, si no queda bien adaptado, no estarás consiguiendo el objetivo deseado.
Te decimos que no debes confundirlo porque mucha gente piensa que el filtro anti pop es un filtro anti viento, cuando no es así. Los filtros anti pop, conocidos en la industria como «galleta», son esos paneles circulares que muchas veces vemos frente al micrófono (algunos micrófonos lo llevan internamente, eso sí), y que sirven como su nombre sugiere para eliminar ese ruido de «pop» que hacemos al abrir la boca para comenzar a hablar.
Coloca el micro adecuadamente
Aunque parezca una tontería, mucha gente tiene este problema precisamente porque no sabe colocar bien su micrófono. Piensan que cuanto más cerca estén de él mejor los escucharás, y precisamente es todo lo contrario. Hay que dejar una distancia de al menos 10 centímetros si usamos uno de mesa, y 3-4 si tenemos uno integrado en unos auriculares.
Piensa que unos AirPods lo llevan en tus orejas, y, sin embargo, te escuchan perfectamente y además sin oír tu respiración, pues haz lo mismo y sepáralo de tu boca, todos te lo agradecerán.
Así mismo sino pones tu micrófono directamente en la posición recta a tu boca, evitarás que, al hablar, el viento le llegue a él, produciendo sonido, por tanto, si tienes opción, haz que este no esté en el camino directo de tu respiración, ladéalo un poco y evitarás parte del problema sin necesidad de nada más.
De todas formas, esto se puede probar de una forma muy sencilla, utiliza un programa para grabar tu voz, y hazlo en diferentes posiciones, luego escucha todas las grabaciones y solo tendrás que comprobar cuál te gusta más y dejar así la distancia a él.
Utilizar un brazo articulado
A tenor de lo anterior, si tu micrófono es de sobremesa puede resultar complicado colocarlo adecuadamente, especialmente en el eje vertical. Por suerte, la gran mayoría de micrófonos tienen una tuerca de 1/4 estándar que permite instalarlas en un trípode o en un brazo articulado, que de hecho sería lo ideal porque al ponerlo «volando» en lugar de encima de la mesa no solo lo puedes alejar del PC u otras fuentes de ruido, sino que ayudarás a que no se cuelen vibraciones.
Lo ideal en este escenario es complementar el brazo articulado con un soporte «de araña», que consiste en que el micrófono queda colgando en unas gomas para absorber todavía más las vibraciones. Muchas veces puedes incluso comprarlos juntos.
Elige bien el micrófono
En el mercado podemos encontrar principalmente dos tipos de micrófonos: omnidireccionales y unidireccionales. Mientras que los micrófonos unidireccionales están diseñados para captar el sonido desde una zona concreta del micrófono, los micrófonos omnidireccionales están diseñados para captar todo el sonido del entorno, añadiendo sonido de ambiente que, en este caso en concreto, no es necesario.
Si necesitamos un micrófono para captar nuestra voz únicamente y no queremos que el entorno haga presencia, debemos limitar nuestra compra a un micrófono unidireccional. Este tipo de micrófonos no suele ser más caro que los omnidireccionales, sin embargo, ofrecerá una menor presencia del ruido ambiente, ya sea los ventiladores del PC, de la calle o cualquier otro.
Reducir el ruido mediante software
Por último, sin necesidad de tener que gastar dinero en filtros ni utilizar otros métodos, tienes uno totalmente gratuito que funciona de una forma muy eficiente y que podrás realizar en unos pocos pasos. Se trata del programa Voicemeeter. Con él solamente tocando un parámetro que te dejaremos a continuación en una imagen, conseguirás una reducción del ruido ambiente, incluida tu respiración y sonidos de viento general. Una gran manera de evitar todo esto en solo unos minutos.
No hará falta que subas más de uno o dos puntos. Dependerá de tu micrófono y el ruido que produzcas, pero con tocar poco será más que suficiente. Realiza alguna prueba y ajústalo como mejor creas. Notarás una gran mejora desde el primer momento. La modificación es instantánea, por lo que podrías realizarlo durante una llamada con algún amigo y que sea el quien te diga en que momento te escucha mejor, ya que a nosotros mismos es más difícil evaluarnos.
Estas serían las 3 formas más comunes y eficaces para reducir ese molesto ruido de respiración y viento que se produce normalmente en nuestra habitación. Son sencilla y económicas y conseguirás una gran mejora, te lo aseguro. Todos con los que hables te lo agradecerán. Puedes optar por gastar dinero o hacerlo de forma gratuita, aunque si combinas las tres opciones, conseguirás una calidad de audio a nivel profesional.
Si tu periférico es de una marca reconocida, utiliza su propio software
Muchos de las marcas de periféricos actualmente ofrecen soporte mediante software para configurar como queramos nuestro ratón, teclado, auriculares o incluso micrófono, ya que suelen tener programas específicos que permiten a los usuarios modificar por completo cada uno de sus dispositivos. Podemos tomar como ejemplo los periféricos de Logitech, y es que una gran parte de ellos son compatibles con la aplicación de Logitech G Hub, que cuenta a su vez con la implementación necesaria para personalizar una gran cantidad de micrófonos de mesa de la propia marca, e incluso los de los propios auriculares.
Este software nos permitirá acceder a una serie de elementos que no tenemos de normal, como pueden ser los ecualizadores y demás, permitiéndonos a su vez descargar perfiles configurados por otras personas en caso de que no tengamos la experiencia o el tiempo para buscar la configuración perfecta. En este caso, tan solo tendremos que encontrar si la marca de nuestro micrófono ofrece una solución similar y descargárnosla para poder configurar al máximo este periférico.
