Una de las polémicas más candentes de los últimos días es la de PS5 y el metal líquido. Dónde hemos podido ver fanáticos de ambos lados lanzando exageraciones negativas, por un lado, y balones fuera por otro. Es por ello que hemos decidido usar nuestro conocimiento para poner el punto sobre la «i» y aclarar una serie de conceptos con las consolas de nueva generación.
Hay un tipo de persona que abunda en la red de redes: maestro liendre que de todo sabe y que de nada entiende. Si a esto le sumamos que las personas pueden ser fácilmente influenciables, nos podemos encontrar comentarios erróneos repetidos por todas las redes sociales, videos de YouTube y hasta artículos con cierto nivel de desinformación. Si a esto le sumamos que el mundo de las consolas se destaca por el fanatismo de marca y una animadversión más bien típica de clubes deportivo, entonces se acaba produciendo un efecto en el que de manera involuntaria, o no, la cosa se llena de noticias falsas.
Es por ello que creemos que hemos creído importante aclarar de forma fácil y accesible la polémica de la PS5 y el metal líquido, desde el punto de vista totalmente objetivo. Para que podáis entender sin problemas a que se debe su implementación en la consola. Al mismo tiempo os hablaremos de otros problemas asociados con la Xbox Series X de Microsoft. No como elemento compensatorio, sino para prevenir a sus usuarios.
¿Por qué la PS5 utiliza metal líquido?
Una consola de videojuegos es algo muy complejo, se trata de un producto compuesto por centenares de piezas distintas, las cuales se han de pedir de antemano con contratos multimillonarios a los diferentes proveedores que en muchos casos tienen incluso que preparar las fábricas. No hablamos solo los chips que se encuentran en la circuitería, sino también elementos como la carcasa, los elementos de refrigeración y todo lo que rodea al sistema.
Dado que las consolas usan chips diseñados a medida, estos no solamente requieren una especificación de su tamaño, sino también de la temperatura a la que han de operar. Es por ello que lo primero que se diseña es la carcasa y el sistema de refrigeración. De esta manera los ingenieros saben la distribución de los componentes y pueden buscar la mayor potencia posible bajo esas condiciones y que al mismo tiempo dure el producto.
Una mejora de última hora para mayor rendimiento en PS5
Ahora bien, imaginemos que hemos decidido subir la velocidad de reloj levemente a nuestro chip principal de la consola. Ya tenemos a todos nuestros proveedores y sus fábricas en marcha. Si queremos mejorar la capacidad de refrigeración de la consola tenemos entonces dos opciones:
- Tirar todo el proyecto hacia atrás, perder dinero y tiempo en el lanzamiento y hacer que nuestra rival nos coma parte de la cuota de mercado en el proceso.
- Utilizar un elemento que no interrumpa el proceso de lanzamiento y nos permita solucionar el problema.
Esta más que claro que SONY por motivos más que lógicos ha optado por la segunda opción, y de ahí el uso del metal líquido en PS5, que consiste en una pasta térmica de aleación de galio sobre el procesador central. Es una solución elegante al problema y les ha permitido no tener que retrasar la consola.
SONY, al contrario de Microsoft, opto por un chip más pequeño, lo que llevado que su consola tenga menos núcleos en la gráfica. Es por ello que para compensar desde SONY decidieron tirar de una mayor velocidad de reloj. Pero esta es variable y sabemos que el punto máximo son los 2.23 GHz. La idea del metal líquido en PS5 no es otra que reducir la temperatura de unión y evitar que la consola alcance el Hot Spot. De tal manera que alcance su velocidad de Boost durante un tiempo más largo.
¿El motivo detrás de usar metal líquido en PS5? Posiblemente, una decisión de última hora para qué llegará a una potencia en TFLOPS en dos cifras y no en una. Se trata de un tema de percepción sobre los datos.
La acumulación de polvo es más preocupante
No hay nada peor que la acumulación de polvo en un ordenador, y seamos francos, una consola es un ordenador altamente especializado. El problema de las nuevas consolas, en especial Xbox Series X y PS5, que sus rejillas de ventilación son tan grandes que entra polvo en grandes cantidades. ¿Y qué ocurre con este fenómeno? Pues que aumenta la temperatura dentro de la caja y con ello las posibilidades de sobrecalentamiento aumentan con el tiempo. También nos preocupa el hecho de que los chips del SSD NVMe en PS5 estén soldados a la placa, ya que estos tienen una cantidad de ciclos de escritura fijos.
Una torre de PC es fácil de limpiar, pero si abrimos una consola inmediatamente ya se nos anula la garantía. No obstante, en el caso de PS5 la podemos abrir para limpiarle el polvo acumulado. Se trata del mismo proceso que cuando tienes que instalar el SSD NVMe externo. Eso sí, procura no mover de lugar cosas como el disipador o desmontar el ventilador, ya que entonces sí que te vas a quedar sin garantía y puede que no la sepas montar.
Conclusiones
Como conclusión, no olvidemos que los chips de hoy en día tienen mecanismos para evitar el sobrecalentamiento y no llegar a superar ciertas temperaturas límite. Para solventar el problema del metal líquido en PS5 en SONY lo tienen tan fácil como una actualización de la consola que reduzca las temperaturas máximas. Posiblemente, perderemos algunas decenas de MHz de velocidad pico, pero a cambio el sistema será más fiable y SONY no tendrá que realizar todo el laborioso y costoso proceso de las reparaciones y el cambio de consolas.
Por lo que no, no te preocupes, tu consola no principio no está en peligro y sinceramente, después del problema de las tres luces rojas en Xbox 360, no creemos que ninguna empresa de consolas de videojuegos quieran perder miles de millones de dólares y prestigio. En todo caso te recomendamos que utilices tu consola PS5 en un lugar donde está se encuentre bien ventilada.