Los últimos rumores apuntan a que tarde o temprano veremos una nueva Xbox Series, ya sea para competir con una eventual PS5 Pro o ir en solitario. Sin embargo, está claro que la obsesión de Microsoft en estos momentos es la IA y esta influenciará enormemente el porfolio de productos de la compañía, incluyendo el de la división de videojuegos. ¿Qué podemos esperar del nuevo sistema?
El lanzamiento de nuevas consolas, ya sean versiones de tamaño y coste reducido, iteraciones más potentes de las ya actuales o simplemente saltos generacionales que hagan un borrón y cuenta nueva, son la norma de la industria desde los tiempos de la primera Atari. Aunque no lo parezca, el tiempo vuela y ya han pasado más de dos años desde el lanzamiento de las Xbox Series. Por lo que toca hablar de como será la próxima apuesta de Microsoft.
¿Una nueva Xbox Series en camino?
En las últimas horas, se han filtrado imágenes del stand de Microsoft en la conferencia de desarrolladores de videojuegos, la GDC. Donde se puede ver un montaje informativo de todos los modelos de Xbox hasta la fecha y lo que sorprende es el hecho de que esto no termina con las Xbox Series, sino que parece ser que existe un modelo más allá. Si bien debemos asumir que habrá más consolas en el futuro, el hecho de que Microsoft reconozca su existencia es significativo. Es más, los de Redmond ya en el pasado presentaron sus nuevas consolas con un año de antelación con nombres como Project Scorpio, Xbox One X, y Project Scarlett, Xbox Series X.
En la imagen llama poderosamente la atención el hecho de que no aparezca la Xbox Series S, si bien no es la consola insignia, esto nos hace pensar que la siguiente iteración será la consola más potente que habrá lanzado Microsoft hasta la fecha. Al mismo tiempo, la tecnología de AMD desde que terminaron su actual consola ha evolucionado lo suficiente como para plantearse una versión mejorada del actual sistema y que a su vez sea compatible con todos los juegos de la plataforma.
Las APU Ryzen 7040 como plano para el chip de la nueva Xbox
Buena parte de la tecnología usada en Xbox Series X vino de los chips Ryzen 4000 de AMD para PC, al menos en lo que a la parte de la CPU y la comunicación central del procesador. Otras cosas son propias de la consola, como es el caso de una GPU integrada de gran tamaño y memoria GDDR6 en un bus de 320 bits.
Obviamente, no van a desarrollar estos elementos de nuevo cuando ya los tienen hechos para PC y los pueden usar perfectamente en Xbox.
- El chip central de la nueva Xbox podría construirse bajo el nodo de 4 nm de TSMC, el mismo que emplean los procesadores para portátiles de AMD y las NVIDIA RTX 40. Esto le permitiría a Microsoft utilizar sin cambios ciertos elementos en la nueva Xbox Series.
- Los dos clústeres de 4 núcleos cada uno con arquitectura Zen 2 pasarían ser uno solo bajo arquitectura Zen 4 con la misma configuración en número de cores.
- La parte central del chip y encargada de la comunicación será la de los Ryzen 6000 en adelante, lo que permitirá reducir el consumo medio del chip y alcanzar mayores velocidades de reloj o bien conseguir las mismas generando menos calor. Este cambio ya lo hemos visto en los chips Oberon Plus de los últimos modelos de PS5.
No sabemos si Microsoft recortará esta vez el tamaño del chip, hasta el momento se ha mantenido en los 360 mm², pero el coste por mm² de los chips ha ido aumentando y es posible que a Microsoft le salga rentable realizar una reducción al tamaño del mismo.
Con hardware especializado en la IA y RDNA 3
El bloque Ryzen AI, el cual es una pequeña NPU que permite descargar a la CPU y la GPU de ciertas tareas ligeras pensadas para el Deep Learning y el Machine Learning podría incluirse en la nueva Xbox. Este bloque iría completamente aparte de los cambios que AMD habría hecho en la GPU y que serían producto del uso de la arquitectura RDNA 3.
Desconocemos la cantidad de núcleos de la GPU que vamos a ver en la siguiente Xbox, si es una consola mucho mejor que la actual Xbox Series X ha de tener una cifra igual o mayor a 52 núcleos. Eso sí, el uso de la arquitectura RDNA 3 le permitirá llegar a 24 TFLOPS de potencia en coma flotante de 32 bits, en el caso de que mantenga núcleos y velocidades, pero especialmente le dará la capacidad de poder ejecutar instrucciones del tipo WMMA que son esenciales para algoritmos de Deep Learning.
Mejores capacidades para el Ray Tracing
Al mismo tiempo, RDNA 3 le dará a la consola capacidades mejoradas para el trazado de rayos, al adoptar las mejoras en ese aspecto de la nueva arquitectura en la nueva consola, pero esto forzará a los desarrolladores a crear parches especializados para la nueva arquitectura. En todo caso, el impacto sobre la tasa de frames por segundo del Ray Tracing será mucho menor en la nueva Xbox Series.
Otra de las mejoras que podemos ver en este aspecto es una mayor cantidad de RAM, la Xbox Series X podría tener perfectamente 20 GB de RAM, pero tiene 16 GB por el hecho que combina chips de 1 y 2 GB de memoria. Desconocemos las densidades de memoria VRAM que habrá disponibles para 2024, no creemos que use GDDR7 por el hecho que para 2024 se guardará para tarjetas gráficas tope de gama que puedan soportar su coste inicial. En todo caso, tener memoria extra para almacenar el árbol BVH que es necesario para el Ray Tracing lo vemos como un añadido que no le costará nada a Microsoft.