Es una costumbre muy instaurada en los últimos años que, cuando un juego de deportes está a punto de caducar para darle el testigo a la edición del año siguiente, el desarrollador suele ponerlo gratis tanto en su propio servicio –si es que lo tiene– como en el de otros, a modo de cebo para que aquellos usuarios que todavía no lo han probado, lo hagan y se suban a la rueda de la franquicia. Y NBA 2K23 no ha sido una excepción.
Y en esas estamos, con los FIFA 23 y NBA 2K23 de turno terminando ya su vida útil toda vez que a finales del verano tendremos una nueva versión, mejorada, con gráficos más avanzados, movimientos, mecánicas de juego y, por supuesto, equipos, estrellas rutilantes, campos y estadios y el ambiente de las ligas profesionales actualizado a lo que exigen los fans. Aunque en el caso del juego de baloncesto, 2K se ha encontrado con un problema que no esperaba.
El boicot más tonto del mundo
Vivimos en el mundo de las redes sociales y eso significa que siempre hay alguien que se va a quejar de algo, por muy absurdo que le pueda parecer a la mayoría. Y eso es justo lo que está pasando con NBA 2K23, que ha llegado para convertirse en un juego gratis para todos los usuarios de PlayStation Plus. Sobre el papel, nada debería parecernos mal, ¿o tal vez creéis que no?
Efectivamente, la liebre ha saltado en un hilo de Reddit donde los fans se han arremolinado alrededor de una petición de boicot a NBA 2K23 y han comenzado a pedir a todos los demás usuarios que hagan lo mismo que ellos, que no es otra cosa que no bajárselo desde la PlayStation Store en señal de protesta por algo que consideran… ¿una ofensa? Lo cierto es que no sabríamos exactamente cómo encasillar este movimiento… ¿los antigigas?
El caso es que todo viene provocado porque alguien debió pensar que bajarse 143GB es una barbaridad, una injusticia, un absurdo, un loqueseosocurra y entonces determinó que era mejor boicotear a NBA 2K23 acusándolo de ocupar mucho espacio en disco. Tanta fue la indignación que poco a poco el iniciador de esta revolución ha ido acumulando seguidores que están imitando su postura.
¿Son muchos 143 gigas?
Seguramente cada uno percibiremos como mucho o poco esos 143GB en función de muchos factores, pero de lo que no hay duda es de que NBA 2K23 no es, precisamente, de los más pesados. Los hay mucho más bestias en ese aspecto, como Red Dead Redemption 2 que supera los 150, Assassin’s Creed Valhalla que ya flirtea con los 180 o Star Wars Jedi Survivor que supera esa cantidad tranquilamente desde el día de lanzamiento.
Comentarios del estilo “¡¿143 GB?! Al diablo[ …] Recuerdo cuando NBA 2K21 pesaba 80GB y FIFA 19 solo 40 o algo así. Esto se nos ha ido de las manos” no dejan en buen lugar a quien los hace y da una idea de cómo se mueven las opiniones en redes sociales, donde todos tenemos nuestro pequeñito altavoz. El problema es cuando a alguien se le hace más caso de lo que debería.
Realmente, son muchos los juegos que ya rondan los 100 GB de espacio ocupado en disco y, como hemos mencionado hace un momento, los superan y con creces. Por lo tanto, al final si un juego te gusta y quieres probarlo -máxime cuando como es el caso, lo ponen gratis-, ¿qué te impide hacerlo? ¿La opinión de un grupo de anónimos de Internet?
¡Bajad NBA 2K23 y jugadlo! ¡Al carajo con el disco duro! Además, tanto en PC como en consolas tienes muchas alternativas para ampliar la capacidad del dispositivo si ves que te estás quedando corto, y en la actualidad son bastante económicos y no suponen un desembolso demasiado grande.