Uno de los mayores disgustos que puede tener cualquier usuario y en especial un gamer es que uno de sus componentes o productos se rompa o esté fallando. Es realmente complicado de gestionar un escenario así, puesto que como cada vez son más caros se les presupone mayor calidad. Si estamos en este escenario con algún componente de ASUS, ¿cómo podemos tramitar su garantía?
No se lo deseamos a nadie y seguro que cualquier fabricante tampoco, pero por desgracia y como pasa en todos los sectores tecnológicos «las cosas se rompen». Sea por defecto de fabricación, por un problema eléctrico o incluso por un uso no adecuado, la realidad es que por mucho que la tecnología mejora siempre hay alguna unidad que pide ser reemplazada.
Por ello, vamos en este artículo vamos a conocer el modo de proceder para reemplazar un producto ASUS mediante su garantía, la cual por supuesto tiene una serie de requisitos indispensables.
¿Qué requisitos cumplir para tramitar un RMA?
Como toda empresa ASUS tiene una serie de pasos y pautas a seguir, y aunque hay un punto en común todo empieza con una particularización. Esta particularización tiene que ver con la factura, su fecha y sobre todo con el tipo de producto que tenemos con mal funcionamiento, ya que las garantías varían según esto y es imposible abarcarlas por la cantidad de tipos de productos que tiene ASUS en el mercado.
Así que en primer lugar lo que tenemos que hacer es precisamente tener la factura del producto en sí misma, puesto que va a ser requerimiento en pasos más adelantados, y en segundo lugar y con la fecha de la compra en la factura, determinar cuanta garantía ofrece ASUS para dicho producto.
Distintos tipos de cobertura
No es lo mismo la garantía de un USB Wireless que la de una fuente de alimentación, por ejemplo. Suponiendo entonces que cumplimos con los requisitos, que tenemos la factura, que el producto todavía está en garantía con ASUS por fecha y que tenemos al menos su embalaje (requisito también importante a día de hoy, no suelen tramitar sin él) y accesorios, ya que la marca pide que esto sea así en la gran mayoría de los casos.
Aquí hay que abrir un pequeño paréntesis y diferenciar entre garantía y reparación. Podríamos pensar que las diferencias son evidentes, pero para muchos no lo es tanto, ya que la garantía es limitada y la reparación no implica garantía alguna.
Es decir, la garantía limitada tiene un plazo máximo y unas condiciones que cada producto debe cumplir y que las fija ASUS, para lo cual tendremos que irnos directamente a la página web de nuestro producto, pinchar en «soporte» y luego ya en garantía (normalmente está en la derecha de la pantalla).
La reparación en cambio es un servicio que se ofrece en dos circunstancias y solo en ciertos productos: el error o problema no es cubierto por la garantía o bien no hay ya garantía porque expiró temporalmente hablando y queremos igualmente que ASUS nos repare el producto.
¿Hay algún caso en el que puedan denegar la reparación o garantía?
Es probable que una de las mayores dudas que tengamos a la hora de solicitar una garantía o una reparación esté en la forma en la que la compañía se hace cargo de ellas, ya que existen ocasiones en las que dependiendo de lo que haya sucedido y de la marca que sea decidan que no es algo que entre dentro de sus políticas. Esto es algo que como bien podemos imaginar sucede con todas las empresas que venden hardware y productos electrónicos, pero hay algunas marcas que tienen unas políticas bastante más estrictas que otras a la hora de tramitar cualquier tipo de garantía.
Como bien podemos imaginar, esto implica que hay una serie de motivos por los que cierta empresa puede denegar la garantía y que principalmente suele tener que ver con la forma en la que el producto haya dejado de funcionar. En el caso de que la marca determine que está roto y/o no funciona correctamente por el hecho de que el usuario lo haya manipulado intencionalmente de una forma que haya causado un daño que requiere solicitar una garantía, pueden indicar una vez se envía el producto que no entra dentro de lo que cubre dicha garantía y por lo tanto devolverlo tal y como estaba.
Obviamente la empresa tiene formas de conocer si esto es así, para los portátiles por ejemplo en el caso de que rompamos el precinto de garantía que tienen, ya sea para cambiar la unidad de almacenamiento o incluso la RAM, esta quedará automáticamente anulada. Esto solo se aplica en el caso de que como bien hemos dicho se rompa el precinto, por lo que si el ordenador dejase de funcionar sin haberlo manipulado por un defecto de fábrica o incluso por un fallo accidental del usuario, en la mayoría de las ocasiones siempre la tramitarán para reemplazarlo por una unidad que funcione correctamente.
Cómo tramitar la garantía de un producto ASUS
A continuación te indicamos de todas las formas que tienes para tramitar el servicio de la marca.
Primera opción, por correo electrónico
Pues hay varias vías para hacerlo. La primera y más sencilla es contactar con ellos por correo electrónico, donde para ello tenemos que ir a la web del producto y hacer clic en soporte, dentro del menú superior que ASUS tiene y tal y como se muestra en la imagen inferior.
Una vez dentro, lo que tendremos que hacer es dirigirnos dentro del submenú que ASUS nos muestra al apartado garantía:
Tras pulsar lo que veremos, por norma general (las políticas de garantía no están escritas en todos los productos o tipos de productos curiosamente, lo que dificulta saber cuánta garantía tiene el producto en cuestión) es el apartado de la política para la garantía.
Debemos asegurarnos que cumplimos con todos los requisitos, ya que si no es así seguir hacia delante es una pérdida de tiempo para que al final ASUS desestime el RMA y termine cobrándonos los portes de ida y vuelta. Si estamos seguros de cumplir los requisitos aquí se nos mostrará el contacto por correo electrónico, justamente a la izquierda de la pantalla:
Una vez clickemos en él lo que tendremos será una nueva web con un aspecto igual o similar al siguiente:
Aquí tendremos que rellenar nuestros datos personales, tras lo cual nos pedirá justo más abajo el número de serie del producto. En este punto hay dos opciones:
- La primera es crearnos una cuenta en ASUS, registrar el producto metiendo todos sus datos para que luego nos aparezca en la lista, el problema es que esto es solo útil si tenemos muchos productos ASUS, porque haciendo esto previamente cuando haya que tramitar el RMA ya está registrado.
- La segunda es meter los datos manualmente porque va a ser algo puntual porque no tenemos muchos productos ASUS.
Normalmente un usuario normal opta por la opción dos porque es algo puntual y un solo producto, pero para acelerar el proceso registrar el producto previamente es una buena idea.
Este último paso es sencillo, puesto que solo tenemos que elegir un tópico, describir el error, subir la factura en uno de los formatos que se especifican, introducir el código de verificación y aceptar las políticas de ASUS.
Segunda opción, por teléfono
Más tarde podremos darle al botón de enviar y en unos días ASUS contactará con nosotros vía email para llevar cada caso en particular. Si este método nos resulta realmente complicado o engorroso siempre nos queda la opción de llamar por teléfono al número que ASUS facilita en España:
- Teléfono de atención al cliente de ASUS: 902 570 488
Realmente tendremos que hacer lo mismo que hemos hecho en los pasos anteriores, solo que tendremos que esperar a que nos atienda un agente y con ello perder algo más de tiempo, aunque será más directa la tramitación como tal. Hay que tener en cuenta que el horario de atención al cliente es de lunes a viernes de 9 de la mañana a 18 de la tarde.
Tercera opción, con tu cuenta personal de ASUS
Existe un tercer método para tramitar un RMA con ASUS, pero la única diferencia con lo descrito arriba es que se hace dentro de la cuenta personal de cada uno, pero es alargar un paso más todo, puesto que lo que se hace es mandarnos a la página del producto para iniciar todo el proceso que hemos visto hasta ahora.
En todos los casos, es importante que tengas a mano la documentación que te detallamos más arriba, ya que es a partir de que la aportemos que comenzará todo el proceso. De lo contrario, podríamos encontrarnos con algunos obstáculos a la hora de solicitar que nos arreglen un producto que todavía se encuentra dentro del periodo de garantía pero que lleva como tal más de dos años en el mercado desde su primer lanzamiento. Si el hardware no tiene, como modelo, esos 24 meses todavía desde que llegó a las tiendas, tendremos mucho más fácil que la garantía se tramite rápidamente porque no ese proceso de análisis quedará a un lado y se aplicara de forma, prácticamente, automática.
Cuarta opción, prueba a tramitar la garantía desde la página que lo compraste
A la hora de tramitar una garantía, siempre podemos tener en cuenta que existen vendedores que nos pueden ofrecer un servicio de cambio o devolución en caso de que el producto se dañe o deje de funcionar por diversas causas, un plazo que dependiendo del producto suele variar. Por lo general, de primeras siempre tendremos la opción de poder conseguir un reembolso o devolución los primeros treinta días después de la compra, pero es normal que los productos que compremos duren bastante más que un mes, por lo que tendríamos que comprobar qué políticas ofrece el vendedor sobre este tipo de cambios.
Hay páginas, por ejemplo PcComponentes, que suelen ofrecer una garantía que va a parte de la del propio fabricante, pero que no dura demasiado y suele cubrir los defectos de fábrica que puede tener el producto que hayamos comprado, así como las causas accidentales por las que se ha podido estropear, permitiéndonos devolver o reemplazar lo que hayamos comprado. Pero esto obviamente como hemos indicado, suele tener plazos relativamente cortos, que no suelen llegar a superar el año o dos años, pero que aun así pueden cubrir en muchos casos la reparación o reemplazo del producto.
Si hemos comprado el producto en Amazon, no vamos a tener ningún problema en ponernos en contacto con ellos, indicar cuál es problema que tiene el producto. En la mayoría de los casos, Amazon directamente se hace cargo de devolvernos el dinero del producto, sin enviarlo para su reparación, siempre y cuando nos encontremos en los 3 años de garantía que se aplican a todos los productos comprados a partir del 1 de enero de 2022. La gestión de las incidencias con productos de Amazon lo convierte en una de las mejores opciones a la hora de comprar cualquier producto, ya que no es necesario ponernos en contacto con el fabricante en ningún momento, fabricante que, generalmente, procura darnos largas sin darnos una solución al problema.
Por otra parte, siempre podemos optar por añadir las garantías opcionales que nos ofrecen los vendedores a la hora de comprarlo, pero esto suele ser contraproducente porque la mayoría de las veces estas suelen durar lo mismo que las del fabricante, por lo que no suele ser una buena idea optar por ellas. Teniendo en cuenta que además suelen tener un importe equivalente al precio del producto que hayamos comprado, algo que puede sumar bastante precio a lo que nos ha costado de base, y que en muchas ocasiones no vamos a utilizar.
Cómo enviar un producto en garantía
Si vamos a devolver un producto a través de Amazon debemos utilizar el embalaje original, siempre y cuando todavía lo tengamos a mano, ya que, si finalmente se arregla, este producto puede volver nuevamente al mercado como reacondicionado. Pero si queremos enviar un producto a reparar, no debemos utilizar el embalaje original.
Tampoco debemos incluir ni cables ni accesorios con los que este viniera. Cuando el producto llega al servicio técnico y lo reparan, no se molestan en buscar el embalaje original y los cables o accesorios con los que llegara ya que no necesarios. En su lugar, utilizan cajas de cartón para devolver el producto al cliente. Si hemos cometido el error de enviar un producto a reparar con accesorios, lo más probable es que no los recibamos de vuelta y podemos perder todo el tiempo del mundo para intentar que los devuelvan sin éxito.