Estamos viendo como la inteligencia artificial se está colando en todos los segmentos a una gran velocidad. Microsoft ha integrado Copilot dentro de sus sistemas operativos, para ayudar al usuario. El próximo gran desembarco de la inteligencia artificial apunta al gaming, cambiando esta industria tal y como la conocemos en la actualidad en diferentes aspectos fundamentales.
Vemos como Intel y AMD están lanzando procesadores que incluyen núcleos para la inteligencia artificial. Poco sabemos aún qué usos tendrán más allá de Copilot, pero algo podemos empezar a intuir. Ajustes de frecuencia automáticos o mejor gestión de la carga en el procesador podrían ser algunos de los usos. Además de estos aspectos, su uso podría extenderse a los videojuegos.
Los videojuegos se volverán «inteligentes»
Hemos visto como NVIDIA ha presentado la tecnología ACE (Avatar Cloud Engine) que da vida a los NPC de los juegos. Pasan de ser figurantes, con frases y acciones repetitivas, a ser más intuitivos e ingeniosos. Esto es, básicamente, dar una nueva funcionalidad a los juegos que puede generar una experiencia más rica.
El permitir que estos se muevan «libremente» por el escenario amplía la experiencia. Pasarás de saber donde encontrarlo a tener que buscarlo, por ejemplo, en una zona determinada. Además, ya no tendrán una frase o frases fijas, irán variante. No hay nada más cargante que un NPC que siempre dice las mismas frases.
Para los desarrolladores del juego esto es genial, ya que permite ampliar las posibilidades del juego. Además, un mismo NPC puede sugerirte diferentes misiones o acciones según en la etapa del juego en la que te encuentres. Poca gracia tiene realizar una misión de buscar un objeto que cuando empiezas es difícil, pero que cuando llevas ya media partida, se vuelve muy simple.
Además, podría llevar a tener mapas generativos que varíen en extensión y características según el nivel que tengamos. Se adapta el número de enemigos con que nos topamos o la dificultad de las misiones. También podríamos ver variaciones en las recompensas según como hayamos conseguido superar todos los obstáculos. Al final, se trata de hacer el juego mucho más atractivo.
Son una enorme cantidad de bondades las que puede traer la IA al mundo de los videojuegos. Cambios importantes para una industria que vemos, en muchos casos, atascada en sagas recurrentes y repetitivas con escasa innovación.
Aunque, lleva algún tiempo presente en los videojuegos
Ciertamente, la inteligencia artificial se usa desde hace tiempo y ha cambiado la manera de jugar. NVIDIA DLSS se basa, precisamente, en la inteligencia artificial para conseguir mayor cantidad de FPS en juegos. Lo que hace es escalar las imágenes desde una resolución inferior mediante IA para obtener imágenes nítidas.
No solo eso, NVIDIA también lo utiliza en el Ray Tracing. Para este caso, no se calculan todos los trazados de los rayos de luz y su impacto en los objetos, sino una parte. Basándose en esas interacciones de la luz, se simula como serían el resto de interacciones con el resto de objetos. Se hace así, ya que calcular todos los impactos de los rayos es extremadamente complejo y tendría un coste computacional enorme.
La era de la IA en los juegos está empezando y el futuro se muestra muy interesante.