La eficiencia es uno de los factores más importantes para una fuente de alimentación de PC, pues representa la cantidad de energía que se desperdicia en forma de calor -con los problemas que eso conlleva- y el coste de más que estaremos pagando por la electricidad. A este respecto la tecnología ha avanzado mucho y las fuentes de alimentación 80 Plus Titanium sobrepasan el 94% de eficiencia pero, ¿será posible llegar en algún momento a un 100% de eficiencia?
Actualmente y aunque se ha demostrado que es más una estrategia de marketing que otra cosa, la eficiencia de las fuentes de alimentación se mide con la certificación 80 Plus, la cual sirve para catalogarlas en diferentes tiers (esto son 80 Plus, Bronze, Silver, Gold, Platinum y Titanium por ahora) dependiendo de lo eficientes que sean. En todo caso, como decíamos la mayor categoría a este respecto sitúa las fuentes con más de un 94% de eficiencia, pero no más.
¿Veremos fuentes de alimentación con 100% de eficiencia?
Una fuente de alimentación sirve, como objetivo final, para darle a los componentes del PC la electricidad que necesitan para funcionar. Sin embargo, en su interior suceden muchas más cosas para llegar a eso: tenemos filtros de entrada para eliminar el ruido eléctrico, tenemos reguladores de voltaje, conversores de corriente alterna a continua, conversores de voltaje para añadir a los 12V iniciales los valores de 5V y 3.3V que necesita el PC para funcionar, y muchas más cosas.
Cada componente por el que pasa la electricidad realiza su propio proceso, y en cada una de las conexiones que hay (que son muchas, tanto a nivel de soldadura como de otros tipos) se produce un cambio de material, de sección del cableado o de densidad. Esto implica necesariamente pérdidas, por norma general en forma de calor, y por ese motivo la mayoría de fuentes del mercado necesitan tener un ventilador para mantener los componentes internos a buena temperatura.
Incluso en el supuesto de que todas las conexiones internas de la fuente fueran perfectas y que todos sus componentes internos no tuvieran ninguna pérdida y fueran 100% eficientes, tendríamos que añadir el cableado. Nosotros enchufamos el PC al enchufe de la pared con conector Schuko, y luego los cables que conectamos en el interior del PC pueden ir soldados en las fuentes normales, o con conectores tipo MOLEX de más o menos pines, pero conectores. En éstos también se produce cierta pérdida de eficiencia por lo que hemos explicado antes: cambios de material, densidades, etc.
En definitiva, todo esto significa que con la tecnología actual es literalmente imposible conseguir un 100% de eficiencia en una fuente de alimentación, y ya conseguir valores por encima del 94% como sucede en las fuentes 80 Plus Titanium es un logro increíble si tenemos en cuenta por la cantidad de componentes distintos que pasa la electricidad en su interior desde que la tomamos del enchufe hasta que llega a los componentes.
La tecnología seguirá avanzando, y podría darse la situación de que inventaran un conversor de voltaje que sea capaz de convertir la corriente alterna que nos llega a 220V directamente a los tres raíles de +12V, +5V y +3,3V a los que funciona el PC, pero realmente para conseguir un 100% de eficiencia sería necesario que absolutamente toda la circuitería estuviera integrada para que no se desperdiciara nada en conexiones, y con todo y con eso es altamente probable que parte de la energía se desperdiciara en forma de calor debido a las fluctuaciones.
Es probable que las fuentes de alimentación sigan aumentando su eficiencia en el futuro y, posiblemente, tengan que sacar una certificación superior a la 80 Plus Titanium, pero ese momento queda todavía lejos y, desde luego, no vamos a poder llegar a un 100% de eficiencia.