Con gran controversia y un aluvión de críticas de por medio, Apple tomó la increíble decisión de dejar a Intel a un lado y sus CPUs de alto rendimiento para dirigirse hacia un camino totalmente nuevo para el mercado de PC High-End. No es que le faltara experiencia a los de Cupertino, pero dejar de lado a Intel y AMD son palabras mayores, sobre todo si escoges ARM como arquitectura de núcleos y CPUs principal. ¿Estamos ante el empujón definitivo de ARM en CPU de consumo?
Que un gigante como Apple apoye una tecnología no es sinónimo de triunfo, ya lo hemos visto en otras ocasiones con ellos mismos como ejemplo. Pero lo que sí consigue es centrar todas las miradas durante un tiempo a ver hacia donde se desarrolla la industria y los estándares. ARM como tal no es nueva en el sector de las CPUs, ni de escritorio ni de servidor, pero ¿es una apuesta segura de futuro?
ARM, Apple, Intel y AMD, ¿estamos ante una guerra oficial entre x86 y ARM?
Muchos son los motivos por los que Apple ha dicho adiós a Intel, pero dos emergen como los principales para que los de Cupertino hayan dado un paso bastante polémico en la industria: Apple es una de las empresas fundadoras de ARM, ahora propiedad de NVIDIA, y por lo tanto tiene la opción de diseñar bajo sus patentes un chip completamente desde cero y a su gusto, aunque haya que licenciar la arquitectura para 32 bits y 64 bits respectivamente.
El segundo motivo es que Intel ha dado saltos de rendimiento muy pequeños y en eficiencia no son lo deseado por los de la manzana mordida. Teniendo esto en mente, es lógico que Apple haya decidido dar el salto al diseño de un SoC totalmente personalizado y fuera de x86, migrando el software en su gran mayoría y centrándose en lo que necesitan exactamente en el futuro.
Las licencias cruzadas y patentes de AMD e Intel son un problema que Apple no quiere ni oír, no hay posibilidad de diseñar con ellos un chip totalmente personalizado hasta el extremo, así que, si los ingenieros de la compañía afirman poder diseñar un chip que compita con los gigantes, siendo más eficiente y adaptando su software a ello, ¿por qué seguir con Intel y depender de su tecnología?
¿Es el despegue definitivo de ARM frente a x86?
No realmente, por lo menos de momento. El problema de ARM es que es usado de forma muy específica en distintos entornos, mientras que x86 es más de uso general. Un ejemplo claro son los últimos movimientos de Amazon, Google o la propia Microsoft: SoCs personalizados en ARM para sus servidores, donde esa personalización logra que el software también se adapte como un guante de latex a una mano.
Ahí se gana rendimiento y dada la imposibilidad de AMD e Intel de ofrecer un producto totalmente personalizado desde cero, los grandes del sector prefieren no licenciar y basar sus esfuerzos e inversión en ARM personalizando sus procesadores, de manera que lo que en uso general generaría peor rendimiento que un Intel Core o Xeon, o un AMD Ryzen o EPIC, resulta que logra superarlos siendo incluso más eficiente.
Por lo tanto, ARM está ganando la batalla en servidores de grandes compañías con músculo para diseñar CPUs, pero en las demás todo seguirá girando igual por no tener precisamente ese impulso financiero.
En el mundo de los mortales, en el mercado general, ARM tiene su cuota de mercado, pequeña, pero existe, pero en general ni AMD ni Intel van a perder su liderazgo presente y futuro debido a que sus CPUs hacen muy bien lo que deben hacer: adaptarse a cualquier condición bajo 32 bits o 64 bits.
Windows ayudará a la implementación en gama baja
Lo cierto es que, haciendo una mirada general en todas las escalas y sectores, ARM ha ganado la batalla en móviles, en integrados en el IoT, en servidores comunes es competitivo, en personalizados es el rey, e incluso ya se está metiendo en portátiles poco a poco. Windows 10 va a soportar de forma nativa su arquitectura dando un buen soporte, así que todo podría hacernos pensar que será una derrota de x86 en no más de dos décadas, pero …. NVIDIA está de por medio.
La compra de NVIDIA sobre ARM ha cambiado el paradigma de la industria y de los semiconductores inclusive. No sabemos cómo va a gestionar NVIDIA esto, pero es muy probable que cierre el grifo en algunos ámbitos para potenciar una arquitectura propia basada en ARM que entre a jugar donde AMD ahora es el rey: en las consolas.
Luego podría intentar centrarse en CPUs de bajo consumo y por qué no, en servidores. Seguirá licenciando sin duda, porque el beneficio es enorme, pero podría ser un nuevo jugador en el terreno de juego. Esto también abre una nueva e hipotética vía para aquellos como China que no quieran entrar por el sesgo americano: RISC-V.
Un gigante con músculo como China apostando por RISC-V en toda su industria y con Huawei a la cabeza podría ser un golpe que ni x86 ni ARM vean venir a tiempo. En cualquier caso, las mejoras de ARM también se han estancado como ya le pasó a Intel, solo AMD parece tener una hoja de ruta creíble y escalable.
Por lo tanto, es muy precipitado decir que ARM o Apple vayan a superar a sus rivales, lo harán en sus plataformas cerradas y porque no se pueden comparar, pero ARM como tal tendrá que seguir luchando si quiere el pastel de x86.