Por qué un monitor CRT es mejor que un LCD para gaming

Por qué un monitor CRT es mejor que un LCD para gaming

Josep Roca

El puerto VGA fue utilizado por primera vez en el IBM PS/2, lanzado en 1987, y durante años se convirtió en la salida de vídeo por excelencia en los PCs hasta que fue completamente reemplazado por puertos ideados para monitores LCD como el DVI, el HDMI y el DisplayPort. No obstante, si tienes un monitor VGA por ahí guardado que sea completamente funcional pero vuestra gráfica no soporta una salida VGA entonces os vamos a dar una solución,

Si tienes un monitor CRT completamente funcional y cogiendo polvo te damos un motivo para conectarlo a tu PC y como puedes hacerlo.

¿Para qué queremos un monitor CRT?

El hecho de utilizar una tecnología obsoleta y fuera de mercado nos puede parecer contraproducente e ilógico, pero hay un motivo para ello. Muchas pantallas LCD, incluidas las más nuevas, tienen una resolución en movimiento mucho más baja que su resolución estática.

CRT Gaming

Esto significa que llevan mucho peor la transición de fotogramas que las CRT y esto es debido al tiempo en que las pantalla LCD necesitan para variar el valor de los píxeles.

Por el momento, los fabricantes de pantallas LCD han ido lanzando monitores al mercado con una alta frecuencia, pero si tienes una pantalla CRT por ahí guardada, puede que te sirva, especialmente para juegos competitivos como los eSports, además que no te hará falta una GPU muy potente para ejecutarlos a la resolución a la que funciona un CRT y con una alta tasa de refresco.

Los monitores antes eran distintos

Los monitores CRT no hacían uso de las interfaces de vídeo modernas como el HDMI y el DisplayPort, sino una interfaz de vídeo llamada VGA. Para entender cómo funciona el puerto VGA hemos de tener en cuenta cómo se comunicaba con la tarjeta gráfica y para ello hemos de conocer qué hace cada uno de sus pines.

VGA Pinout

El VGA es un conector de vídeo RGB, esto significa que tiene canales para los tres componentes principales (rojo, verde y azul) de manera separada, También podemos ver los pines HSYNC y VSYNC y es que en las tarjetas gráficas con salida VGA tiene que ser el propio chip gráfico el encargado de contar los tiempos de la pantalla activa.

La tecnología VGA se ideó cuando todo el mundo utilizaba monitores de tubo, donde el haz de electrones recorre la pantalla para generar la imagen y lo hace de forma tan rápida que nuestros ojos se piensan que los píxeles que vemos en la pantalla siguen siendo los píxeles activos. La realidad es que la salida VGA funciona igual que las interfaces de vídeo que había en los televisores de tubo, pero con un mayor ancho de banda para conseguir una mayor resolución y tasa de refresco.

En cambio, los monitores LCD son distintos, no hay un haz de electrones que recorra la pantalla sino una gran cantidad de píxeles que son activador por una ingente cantidad de LEDs para componer los píxeles, por lo que deja de ser necesario el contar los tiempos de la pantalla activa.

¿Por qué no podemos utilizar un monitor VGA con un puerto HDMI?

Si miramos el pinout del puerto HDMI veremos que faltan una serie de pines que sí que se encuentran en un VGA como son el HSync y el VSync, esto es debido a que en los sistemas HDMI no es el chip gráfico el que controla los tiempos de la resolución, sino que estos están controlados por el controlador dentro del cable HDMI.

Pinout HDMI

Esto hace que cualquier señal HDMI no se pueda conectar con una simple redirección de los pines a una salida VGA de forma directa. Es decir, podemos manipular una salida RGB como la salida por componentes para convertirla en una salida VGA, por ejemplo, simplemente enrutando los pines, pero con el HDMI esto no es posible, por lo que es necesaria una ayuda en forma de un conversor ntermedio.

Conversor HDMI a VGA

HDMI a VGA

La idea es utilizar un receptor HDMI modificado, pero en vez de enviar la señal al controlador interno de una pantalla LCD la idea es enviar dicha información a un DAC o un conversor digital a analógico que permita enviar la señal analógica a una salida VGA, Para ello existen dos formas para hacerlo.

  • Utilizar un FPGA o un CPLD que haya sido configurado para realizar la función de convertir la señal para HDMI en algo que la salida VGA pueda entender.
  • Hacer uso de componentes ya existentes en el mercado pensados para esta función,

Una solución es la placa CN0282 de Analog Devices:

Conversor HDMI a VGA

Se trata de un dispositivo utilizado en el mundo de la automoción donde una gran cantidad de pantallas LCD tienen una interfaz VGA por el hecho que no tienen la resolución y no requieren el ancho de banda del HDMI. Además, esta placa tiene extracción de audio y es que hemos de recordar que el VGA no soporta la señal de audio, la cual se perdería en el proceso, por lo que nos permite recuperar el audio de la fuente de origen.

El problema de esta solución es que no soporta HDCP, por lo que si el contenido que quieres transmitir esta codificado vía HDCP no podrás verlo en tu monitor VGA.

La solución más simple, un cable HDMI a VGA

Cable HDMI a VGA

Hay una solución mucho mejor y más simple que utilizar un conversor HDMI a VGA, con el problema añadido de que la señal de audio se perderá por completo en el proceso, por lo que si esto no te importa en absoluto puedes optar por un cable HDMI a VGA. Por otro lado, tened en cuenta que este cable si que soporta HDCP.

Esta sería la opción fácil y cómoda para aquellos que quieren jugar simplemente, pero hay muchos más casos donde el más conocido probablemente sea (aquí los profesores nos entenderán perfectamente) el querer conectar un portátil con HDMI a un proyector con VGA

Lógicamente no basta con reproducir la imagen per se, sino que se necesita enviar también audio. Por lo tanto, necesitamos pasar la imagen por VGA y luego los dos canales de audio normativos por RCA o mini Jack. Para ello existen unos adaptadores que son relativamente baratos y que nos solventarán esta «papeleta» de manera más o menos sencilla:

Es cierto que necesitaremos un cable VGA macho/macho para conectar el adaptador al proyector, pero estos también son baratos y sobre todo fáciles de conseguir, pero quizás lo que no sea tan simple es llevar el audio al mismo. Y es que el cable mini jack que integra podría quedarse algo corto en ciertas circunstancias, por ejemplo, si el proyector está colgado del techo.

Así que es más que probable que tengamos que comprar también un cable de un par de metros para el mini jack de 3,5 mm, o al menos un extensor si no encontramos dicho cable. Por lo demás no tiene mayor complicación y es una forma muy simple y barata de poder reproducir cualquier contenido desde un PC o portátil a un monitor o proyector con VGA.

Esto lógicamente vale para una tarjeta gráfica actual hacia un monitor CRT con VGA, es el mismo proceso siempre y cuando la salida sea HDMI y el audio esté configurado para que salga por dicho puerto y no por nuestros auriculares o por otra salida de sonido. Podemos usar solo la parte de la imagen si así lo deseamos, no habría ningún problema al respecto, pero no faltará aquel que quiera conectar el audio del HDMI a un equipo de sonido externo.