Los procesadores Ryzen 3000 han incluido unas tecnologías bastante peculiares. En algunas como Precision Boost Overdrive se da la casuística de que un usuario normal no va a tener que realizar overclocking manual para alcanzar el mejor rendimiento. Pero al mismo tiempo, el voltaje que incluye que se logra está lejos del real, y por ello hoy aprenderemos a usar el voltaje offset para mejorar la vida útil de nuestro procesador Ryzen y reducir su temperatura bajo overclock.
El voltaje offset es un tipo de parámetro muy usado por el overclocker medio que busca sobre todo no dañar su procesador en exceso y además conseguir la mejor temperatura posible. Este tipo de técnicas se usan para overclocks estables 24/7 y que dejan gestionar al sistema operativo, firmware y driver el resto de los voltajes de la tabla SKU destinados para ello.
En los procesadores Ryzen supone además concretar un voltaje bastante mejor que el que AMD destina a sus CPUs, ya que normalmente llegan con valores mayores de los necesarios para funcionar de forma correcta y completamente estable.
Cómo usar el voltaje offset para mejorar el overclock y la temperatura
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que no vamos a usar software como Ryzen Master para estos menesteres, por mucho que AMD diga que es apto y que no influye. Todo overclocker que se precie y busque los mejores parámetros y estabilidad realizará dicho overclock desde la UEFI por razones obvias.
La UEFI incluye controles y parámetros mucho mejores, más exactos y más extensos que en muchas ocasiones son necesarios si queremos afinar al límite dichos voltajes, donde además no se deja influenciar por el software común para su modificación.
Por lo tanto, nuestro primer paso es ingresar en la UEFI de nuestra placa base y localizar los parámetros de voltaje. Esto varía entre las marcas, ya que cada una lo coloca donde entiende que es debido. Nuestro ejemplo usa una placa base ASUS X570-F Gaming, así que veamos qué es lo que tenemos que hacer para ajustar dicho setting.
En nuestro caso, el setting en concreto se denomina Voltaje de la VDDCR CPU, donde como vemos nos marca en UEFI 1.440 voltios. Esto no debe ser tenido en cuenta, ya que el voltaje debe ser leído en Windows y bajo estrés para poder valorar cuánto podemos bajarlo.
En cualquier caso, esto es algo personal de cada procesador, así que tendremos que realizar estos pasos previos de forma individual.
Una vez llegados al setting, solo tendremos que abrirlo y seleccionar Offset mode, tras lo cual nos aparecerán dos nuevos valores.
Voltaje positivo o voltaje negativo: cada procesador podrá aplicar un ajuste distinto
Dichos parámetros son el desfase en valores positivo o negativo del voltaje y el propio voltaje offset. Esto no es más que una subida (o bajada) del valor que le asignemos al voltaje en sí mismo, en el caso de este ejemplo 0,01250 voltios.
Hay que tener en cuenta que esta subida de voltaje no se aplica al voltaje máximo que calculamos previamente mediante estrés, sino al voltaje en reposo. Tendremos que ir probando una serie de voltajes hasta encontrar el nuestro, ya que cada procesador es un mundo.
Para comenzar, y si solo buscamos bajar el voltaje de la CPU sin overclock, os recomendamos empezar con valores positivos, en concreto con +0,001 voltios, pasar 8 horas de Realbench con el máximo de RAM de nuestro sistema y a partir de ahí ir bajando en negativo hasta que el programa detecte inestabilidad o tengamos un pantallazo azul o congelación del PC.
En estos casos, habrá que subir al menos +0,005V para intentar estabilizar. Volveremos a repetir el proceso de las 8 horas y así hasta que sea totalmente estable.
Si buscamos mejorar la frecuencia mediante overclock, lo ideal es comenzar en positivo con +0,150 voltios, comprobar estabilidad y si no fuese estable seguir subiendo. Si pasamos las 8 horas de Realbench, ya podemos comenzar a bajar en positivo, es decir, +0,145 voltios, +0,140 voltios, etc … Normalmente es difícil acertar a la primera, así que es un proceso que seguro nos tomará tiempo.