El conocido como «modo oscuro» en las aplicaciones poco tiene que ver con el «lado oscuro» de los caballeros Jedi de Star Wars. En muchas aplicaciones, este modo permite cambiar el habitual fondo blanco por tonos oscuros que, supuestamente, ayudan a ahorrar batería en ordenadores portátiles o smartphones pero, ¿es esto realmente útil para aumentar la autonomía de los dispositivos? Vamos a verlo.
El modo oscuro de las aplicaciones supuestamente ayuda a ahorrar batería y también a mejorar la salud visual del usuario. Tiene un sentido intuitivo: las luces más brillantes son más dañinas para la vista que las oscuras ya que el blanco es el color que emite más energía, y al usar más energía consumirá más energía, ¿verdad?
Sin embargo, como de costumbre la realidad es un poco más complicada. Si bien es cierto que los colores más oscuros usan menos energía, no todos los tipos de pantalla están diseñadas para aprovechar esto. Y, en lo que respecta a la salud visual del usuario, cuánto mejorará la experiencia con el modo oscuro depende en gran medida de la luz ambiental. Vamos a explicarlo todo.
¿Se ahorra batería con el modo oscuro?
Esto es relativamente sencillo, porque como explicábamos antes, depende del tipo de pantalla simplemente. Si la pantalla de tu portátil es OLED o AMOLED, entonces los modos oscuros de las aplicaciones sí que, efectivamente, estarán ayudándote a ahorrar consumo de batería y por lo tanto se prolongará la autonomía. Si la pantalla es LCD o de cualquier otro tipo, cambiar el color no hará que se reduzca el consumo de batería.
Las pantallas AMOLED funcionan pasando corrientes eléctricas a través de compuestos orgánicos para iluminar píxeles individuales. Así, si un píxel es negro estará desactivado y por lo tanto no necesita usar energía en absoluto. No obstante, solo el negro verdadero (hex 000000) desactivará completamente el píxel, y cualquier otro tono todavía consumirá energía (siendo el blanco el que más consume).
Las pantallas LCD, que son las más habituales en portátiles, no obtienen ningún beneficio de los modos oscuros de las aplicaciones, al menos en lo que a consumo de batería se refiere. De lo que sí se benefician es de un menor nivel de brillo, y es que cuando usamos el modo oscuro en ambientes oscuros, lo normal es bajar el brillo para que no nos deslumbre y ahí sí que estaremos ahorrando batería. Dependerá, en todo caso, de las condiciones de luz ambientales.
En resumen: si la pantalla del portátil es AMOLED u OLED, entonces el modo oscuro sí ayuda a reducir el consumo de batería. En cualquier otro caso, no.
¿Y en cuanto a la salud visual?
Aquí es dónde las cosas se ponen un poco más complicadas, y es que aunque nos vendan que los «temas oscuros» son mejores para la vista, la realidad es que no siempre es así.
En términos de legibilidad, el veredicto es claro: texto negro sobre fondo blanco es lo mejor para la vista, tanto por las propiedades del color como por la luz y por cómo es el ojo humano. El blanco refleja cada longitud de onda del espectro de color, lo que significa que nuestros iris no necesitan abrirse para absorber suficiente luz, dejándolos con su forma habitual. Debido a que la lente no se deforma por un iris más ancho, podemos ver las cosas con mayor nitidez, especialmente un color de alto contraste como el negro, que en realidad absorbe las longitudes de onda en lugar de reflejarlas.
El texto blanco sobre fondo negro, sin embargo, no funciona tan bien ya que el iris del ojo necesita abrirse para que entre más luz, deformando la lente y haciendo que parezca que las letras blancas tienen un efecto de «bleeding» (sangrado, conocido como efecto de halo). Si además eres una persona con astigmatismo este efecto es todavía más pronunciado. Así lo reafirman los estudios, que dicen que la legibilidad del texto es mejor en negro sobre claro que en claro sobre negro.
Esto es en cuanto a la legibilidad pero, ¿qué pasa con la fatiga visual? De momento los científicos no se ponen de acuerdo y no hay datos exactos, pero esto es lo que sabemos:
- El modo oscuro reduce el cansancio visual cuando la luz ambiental es baja. Por ejemplo, para leer de noche. Con alta luz ambiental el efecto es al contrario, así que es contraproducente osar modos oscuros a plena luz del día, por ejemplo.
- Un alto contraste entre el texto y el fondo (blanco sobre negro o al revés) reduce el cansancio visual. Por eso no se usan fondos grises o verdes.