Si eres poseedor de una consola Xbox One y pretendes comprar una Xbox Series X cuando salga al mercado, en esta guía te vamos a contar qué es lo que tienes que tener en cuenta para transferir tu perfil a la nueva consola, con las partidas guardadas y los juegos, así como qué es lo que puedes hacer con tu actual consola.
No cabe duda de que la Xbox One sigue siendo una buena consola con un amplio catálogo de juegos. Cuando la Xbox Series X esté disponible para comprar mucha gente dejará «abandonada» su actual consola para utilizar la nueva, y eso activará a buen seguro el mercado de segunda mano. Así pues, a continuación vamos a darte una serie de consejos tanto para preparar tu actual Xbox One de cara a migrar tu perfil a la Xbox Series X y así evitar contratiempos, como a qué hacer con respecto a tu consola actual.
Cómo migrar tu perfil de Xbox One a Xbox Series X
Lo primero que deberías hacer es una copia de seguridad total de tu Xbox One, y para ello tienes dos opciones: o mediante un disco duro externo, o transfiriendo los datos por red a la nueva consola. Ya que actualmente no es posible mas que la primera opción, vamos a ver cómo puedes transferir todas tus cosas desde la consola a un disco duro externo conectado por USB.
Ten en cuenta que si tienes la consola conectada a Internet, Xbox transfiere automáticamente de forma parcial tus datos a la nube (perfil, logros, capturas, partidas guardadas e historial de compras). Una copia de seguridad total incluye todo lo anterior, pero incluyendo juegos, vídeos, etc. Todo.
Para ello, pulsa el botón de configuración (el engranaje) y ve al menú Sistema -> Realizar una copia de seguridad y transferir.
Una vez que selecciones esta opción se te plantearán varias opciones más. Primero deberás seleccionar qué es lo que quieres guardar en la copia de seguridad, y obviamente deberás seleccionar todo. Después te preguntará dónde quieres guardarlo, y ahí deberás seleccionar el disco duro externo que previamente deberías haber conectado a la consola por USB. Evidentemente, la capacidad del disco debe ser igual o superior a la de la consola para que quepan todos tus datos sin problemas.
Si llega el caso de que ya has comprado una Xbox Series X cuando leas este tutorial, debes saber que también tienes la opción de hacer una transferencia directa entre consolas. Simplemente debes tener ambas encendidas y conectadas a la red local de tu casa; en la Xbox One debes ir al menú Red -> Transferencia de red -> Permitir transferencia de red. Una vez hecho, en la parte superior derecha debería aparecer el menú «consolas locales», así que debes seleccionarlo y marcar todo lo que quieres transferir.
Evidentemente, en la nueva consola deberás seguir el procedimiento inverso en ambos casos (en el caso del disco externo, deberás conectarlo a la nueva Xbox Series X). De todos modos, como hemos indicado antes una vez que inicies sesión con tu cuenta Xbox en la nueva consola, automáticamente se cargará la copia de seguridad parcial de tu perfil, incluyendo todo menos los juegos, aplicaciones y vídeos grabados.
Prepara tu Xbox One si pretendes venderla
Es altamente probable que si pretendes comprar la nueva Xbox Series X quieras vender tu Xbox One actual, especialmente dado el alto precio que tendrá la consola. Como hemos adelantado antes, esta situación provocará que el mercado de segunda mano se cope de consolas de segunda mano, así que si pretendes vender la tuya debes saber que el momento es ahora para poder sacar un mejor precio, ya que una vez que salga la Xbox Series X, las Xbox One se devaluarán bastante.
Ten en cuenta, además, que Microsoft ha garantizado retrocompatibilidad de los juegos, así que os recomendamos no vender aquellos a los que queráis seguir jugando en la nueva consola. Ya que vuestras partidas se migrarán junto con el perfil podréis continuar por donde lo dejásteis sin problemas aunque estéis en la nueva consola, y de hecho será especialmente interesante cuando la Series X salga al mercado ya que inicialmente no tendrá demasiados juegos en catálogo, así que merece la pena seguir usando los que tengas de Xbox One.
En todo caso, recuerda hacer previamente una copia de seguridad de tu perfil y tus datos como te hemos explicado arriba, y recuerda también que es muy importante borrar todos los datos de la consola actual y desvincularla de tu cuenta antes de ponerla a la venta para evitar posibles problemas.
Para ello, ve al menú Configuración -> Todos los ajustes -> Sistema -> Información de la consola y actualizaciones -> Restablecer configuración predeterminada de fábrica.
Por último, recuerda también que los mandos de Xbox One son compatibles con la Xbox Series X. Si pretendes vender tu Xbox One quizá quieras guardar alguno de tus mandos (si tienes varios) para utilizarlos en la nueva consola, ya que así te ahorrarás algo de dinero.
Adquiere un HDD Externo o un SSD externo
Los juegos de Xbox One, a no ser que están optimizados para Xbox Series X no aprovechan las velocidades del SSD y no todos van a ser adaptados, por lo que si tienes varios juegos de Xbox One en los que las ventajas del SSD van a ser mínimas entonces te recomendamos que adquieras un disco duro externo para volcar los juegos de tu Xbox One sea el modelo que sea.
Luego solo necesitarás conectarlo a la Xbox Series X o Xbox Series S para jugarlos, no te preocupes por el acceso, tus juegos están asociados a tu cuenta de Xbox Live. Por cierto, esos juegos de Xbox 360, apenas ganan con el SSD porque no se diseñaron para ellos, incluso ganan en velocidad de carga con el USB 3.0, por lo que te recomendamos no dejarlos en el SSD.